El año en síntesis

En 2024 el BCE siguió avanzando en su ciclo de política monetaria, que ha pasado por tres fases distintas. La primera fue una fase de endurecimiento, comprendida entre julio de 2022 y septiembre de 2023, durante la cual los tipos de interés registraron una subida acumulada histórica de 450 puntos básicos. La segunda fue una fase de transición en la que los tipos se mantuvieron estables. Y la tercera, que comenzó en junio de 2024, ha sido una fase de relajación en la que la política monetaria se ha tornado gradualmente menos restrictiva.
El período examinado en este informe abarca las dos últimas fases de este ciclo. A principios de 2024, el BCE estaba aún en la fase de transición, con el tipo de interés de la facilidad de depósito situado en el 4 %. En ese momento, la inflación había caído hasta el 2,9 %, lo que supone en torno a tres cuartas partes del recorrido desde su máximo. Si bien las proyecciones de nuestros expertos mostraban que la inflación retornaría a nuestro objetivo del 2 % a medio plazo en 2025, había incertidumbre sobre la persistencia de la inflación.
Los indicadores de la inflación interna se situaban en niveles elevados y mostraban resistencia a la baja. Los anteriores aumentos de la inflación todavía se estaban transmitiendo a los salarios de forma escalonada. Las proyecciones de nuestros expertos se basaban en el supuesto de que las empresas absorberían estos incrementos salariales a través de los beneficios, en lugar de subir los precios, y de una recuperación de la productividad del trabajo que reduciría los costes laborales unitarios. Ambos factores solo pudieron confirmarse con el paso del tiempo.
Para aplicar una política sólida en este contexto, desde marzo de 2023 el BCE había basado sus decisiones sobre los tipos de interés en tres criterios clave: las perspectivas de inflación, la dinámica de la inflación subyacente y la intensidad de la transmisión de la política monetaria. Aunque las perspectivas de inflación estaban mejorando y la política monetaria estaba frenando claramente la demanda, el criterio de la inflación subyacente exigía cautela.
No obstante, a lo largo de 2024, la orientación restrictiva de nuestra política monetaria aseguró que la inflación siguiera descendiendo hacia nuestro objetivo. En junio, no solo las perspectivas de inflación se mantuvieron estables, indicando de forma consistente que la inflación alcanzaría el 2 % en 2025, también la mayoría de los indicadores de la inflación subyacente se habían relajado. Esta comprobación reforzó la confianza del BCE en que la inflación estaba retornando a su objetivo de manera sostenida.
En consecuencia, tras nueve meses en los que los tipos se mantuvieron sin variación, comenzamos a relajar el nivel de restricción de la política monetaria. En junio bajamos los tipos 25 puntos básicos al tiempo que seguimos aplicando un enfoque dependiente de los datos sin comprometernos de antemano con ninguna senda futura de tipos. Dado que los nuevos datos disponibles confirmaban las perspectivas de inflación favorables, continuamos relajando gradualmente el grado de restricción de la política monetaria.
Entre septiembre, octubre y diciembre rebajamos nuestro principal tipo de interés oficial otros 75 puntos básicos. Terminamos el año con una confianza creciente en que el proceso de desinflación avanzaba conforme a lo previsto.
En 2024, nuestro balance también siguió normalizándose y se redujo en medio billón de euros. A final de diciembre se habían alcanzado dos hitos: el reembolso íntegro de la financiación obtenida por las entidades de crédito en el marco de la tercera serie de operaciones de financiación a plazo más largo con objetivo específico y la finalización de las reinversiones del principal de los valores adquiridos en el marco del programa de compras de emergencia frente a la pandemia que iban venciendo.
En un entorno de reducción gradual de la liquidez como consecuencia de la normalización del balance, el BCE introdujo cambios en su marco operativo para la aplicación de la política monetaria. En particular, anunció que seguiría guiando la orientación de la política monetaria mediante el ajuste del tipo de la facilidad de depósito, al tiempo que reduciría el diferencial entre este tipo y el tipo de interés de las operaciones principales de financiación. En el futuro, el BCE proporcionará liquidez al sistema financiero mediante una amplia gama de instrumentos. Asimismo, sobre la base de la experiencia adquirida, el Consejo de Gobierno revisará los principales parámetros del marco operativo en 2026.
2024 también fue un año de importantes avances en los pagos. Gracias al creciente número de participantes en el servicio de liquidación de pagos inmediatos de TARGET (TARGET Instant Payment Settlement, TIPS), un servicio desarrollado por el Eurosistema para realizar pagos inmediatos en toda Europa, el número medio diario de pagos inmediatos en euros aumentó un 72 % durante el año.
En 2024, el Eurosistema avanzó en la fase de preparación del proyecto de un euro digital de dos años de duración. El primer informe de progreso del proyecto del euro digital se publicó en junio y el segundo en diciembre. El BCE también siguió trabajando en el desarrollo de las normas de funcionamiento del esquema del euro digital, que estandarizarán su uso y su gestión en la zona del euro. También se aceleraron los preparativos para la elaboración de una nueva serie de billetes en euros. El Consejo de Gobierno ha seleccionado ya los motivos para los temas «La cultura europea» y «Ríos y aves» y ha nombrado el jurado para un concurso de diseño que se convocará más adelante en 2025.
A medida que el mundo se va haciendo más digital, el BCE está dando pasos decisivos para integrar las tecnologías de inteligencia artificial en su trabajo. Los empleados del BCE pueden utilizar ahora cuatro grandes modelos de lenguaje que les prestan apoyo y benefician a más de 4.500 usuarios. También se están llevando a cabo varios proyectos experimentales en áreas como la comunicación automatizada y la visualización de datos.
En 2024, el BCE también amplió su trabajo sobre el cambio climático con la puesta en marcha de su plan sobre clima y naturaleza 2024-2025. Esta iniciativa se centra en tres áreas principales: el impacto y los riesgos de la transición a una economía verde; el creciente impacto físico del cambio climático y los efectos económicos de la adaptación al mismo, y los riesgos de pérdida y degradación de la naturaleza y su interacción con los riesgos relacionados con el clima.
La Casa del Euro, con sede en Bruselas, celebró su primera aniversario en 2024. Es un espacio compartido entre el BCE y siete bancos centrales nacionales que se creó para fomentar la cooperación entre los bancos centrales del Eurosistema y aumentar su visibilidad en una ciudad que alberga a muchas instituciones europeas. La Casa del Euro se ha convertido en un eje dinámico para la colaboración, el diálogo y el debate entre los bancos centrales y los principales agentes interesados.
En un mundo cada vez más incierto aumenta el número de europeos que reconocen la importancia de la unidad. En 2024, el apoyo al euro entre los ciudadanos alcanzó un máximo histórico, lo que refleja la apreciación más generalizada de que la moneda única es un proyecto que fomenta la paz y la prosperidad en Europa. Este creciente apoyo también pone de relieve la dedicación de los empleados del BCE y de otras personas que trabajan al servicio de los intereses de los ciudadanos europeos.
Fráncfort del Meno, abril de 2025
Christine Lagarde
Presidenta
El año en cifras
La economía empezó a recuperarse | La inflación general descendió hacia el objetivo |
El PIB real de la zona del euro creció un 0,9 % en 2024, frente al 0,4 % de 2023. Las tasas de crecimiento intertrimestrales pasaron a ser positivas a principios de 2024 tras cinco trimestres consecutivos de estancamiento. | La inflación general descendió hasta el 2,4 % en diciembre de 2024 desde el 2,9 % registrado en diciembre de 2023, acercándose al objetivo. |
El BCE redujo sus tres tipos interés oficiales hasta situar el tipo de la facilidad de depósito en el 3 % al final del año | El Eurosistema siguió reduciendo su balance |
La reducción de los tipos de interés oficiales del BCE situó el tipo de la facilidad de depósito en el 3 % y su descenso acumulado en 2024 fue de 100 puntos básicos. | El balance del Eurosistema se redujo 0,5 billones de euros como reflejo de la finalización de la tercera serie de operaciones de financiación a plazo más largo con objetivo específico (TLTRO III), de la disminución de la cartera del programa de compras de activos (APP) y, en cierta medida, del paso a las reinversiones parciales en el contexto del programa de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP). Estas medidas habían desempeñado un papel fundamental durante el período de baja inflación y durante la pandemia. |
Capacidad de resistencia de las entidades de crédito de la zona del euro | Los pagos inmediatos liquidados en TIPS aumentaron |
Las ratios de capital de nivel 1 ordinario (CET1) de las entidades de crédito de la zona del euro se mantuvieron próximas a su máximo histórico y se situaron en el 15,7 % en el tercer trimestre de 2024. Ello se debió a la elevada rentabilidad bancaria y al bajo nivel de préstamos dudosos. | Con un número creciente de participantes en el servicio de liquidación de pagos inmediatos de TARGET (TIPS), los pagos inmediatos en euros se incrementaron de 963.894 pagos diarios en diciembre de 2023 a 1.657.421 pagos diarios en diciembre de 2024, un aumento del 72 %. |
El Centro de Visitantes del BCE | Publicación de información financiera relacionada con el clima sobre las tenencias mantenidas por el Eurosistema con fines de política monetaria |
El Centro de Visitantes del BCE recibió un total de 21.325 visitantes en 2024, ofreciendo al público la oportunidad de conocer el BCE desde dentro. | El BCE aumentó la transparencia sobre la huella de carbono del Eurosistema ampliando la información financiera relacionada con el clima publicada, que ahora incluye más del 99 % de los activos mantenidos con fines de política monetaria. |
1 Moderación adicional de las presiones inflacionistas subyacentes sustentada en la orientación restrictiva de la política monetaria del BCE
La actividad económica mundial siguió mostrando capacidad de resistencia en 2024 y continuó expandiéndose a un ritmo moderado. La incertidumbre aumentó durante el año y se situó en niveles elevados, en un contexto de intensificación de las tensiones geopolíticas y de interrogantes sobre las políticas económicas, en particular tras las elecciones presidenciales en Estados Unidos. El comercio internacional se recuperó de la desaceleración registrada en 2023 según las importaciones se fueron adelantando en vista de la incertidumbre geopolítica y acerca de la política comercial. La inflación mundial siguió moderándose, aunque su persistencia en el componente de servicios de las economías avanzadas ralentizó el proceso desinflacionista. El euro se depreció frente al dólar estadounidense y, en menor medida, también en términos efectivos nominales. La economía de la zona del euro se fortaleció en 2024, principalmente como consecuencia del ritmo positivo de crecimiento mundial y de la resiliencia de los servicios, en un entorno de caída de la inflación general. Al mismo tiempo, la actividad de la industria continuó siendo débil, ya que se vio afectada por las condiciones de financiación restrictivas, los elevados costes de la energía y de otros insumos, las deficiencias estructurales y el alto grado de incertidumbre. Mientras que el endurecimiento de la política monetaria del BCE en los años anteriores siguió transmitiéndose con intensidad a la actividad económica y contribuyó por tanto al descenso sostenido de la inflación durante 2024, el mercado de trabajo continuó exhibiendo cierta fortaleza. Los Gobiernos de la zona del euro siguieron retirando las medidas de apoyo adoptadas en respuesta a las perturbaciones de la pandemia de COVID-19, los precios energéticos y la inflación, lo que revirtió en parte la anterior relajación de la política fiscal. La inflación general de la zona del euro volvió a disminuir en 2024, pero a un ritmo más lento que en el año anterior, ya que la moderación impulsada en aquel período por la disminución del componente energético se había agotado. Las presiones inflacionistas subyacentes se moderaron como resultado de la desaparición gradual de los efectos de anteriores perturbaciones de oferta y del debilitamiento de la demanda asociado a unas condiciones monetarias y financieras y unas políticas fiscales restrictivas, aunque también siguieron viéndose influidas por el fuerte crecimiento de los salarios.
1.1 La actividad económica mundial mostró capacidad de resistencia, mientras que la inflación general continuó disminuyendo
El crecimiento económico mundial continuó mostrando capacidad de resistencia en 2024 pese a los factores adversos
La economía mundial continuó mostrando capacidad de resistencia en 2024, pero los riesgos para el crecimiento siguieron orientados a la baja en un contexto de crecientes divergencias entre sectores y países. La actividad económica se expandió a un ritmo sostenido, aunque moderado (3,4 %), prácticamente sin variación con respecto al año anterior pero por debajo de su media histórica (panel a del gráfico 1.1). La actividad evolucionó de forma desigual en los distintos grupos de países, dado que las economías emergentes crecieron un 4,1 %, mientras que las avanzadas se expandieron a un ritmo más lento (1,9 %). Las diferencias observadas en las tasas de avance fueron acordes con patrones históricos, ya que el crecimiento medio a largo plazo de los países emergentes durante el período 1999-2023 superó en 3,1 puntos porcentuales el registrado por las economías avanzadas. La evolución de la actividad económica mundial también fue dispar en los distintos sectores: la expansión global se vio respaldada en particular por la solidez de los servicios, en contraposición con el debilitamiento de la actividad en el sector manufacturero. La incertidumbre mundial siguió siendo elevada y los factores adversos a corto plazo para el crecimiento se agravaron durante el año, debido a la intensificación de las tensiones geopolíticas y a la incertidumbre sobre las políticas económicas, sobre todo en los ámbitos comercial y fiscal, en particular tras las elecciones presidenciales en Estados Unidos.
El crecimiento económico continuó siendo vigoroso en Estados Unidos, pero se ralentizó en China
En Estados Unidos, la actividad económica mantuvo su vigor a lo largo de 2024, en gran parte como consecuencia de la solidez de la demanda interna, en particular del gasto de los hogares. Las tensiones en el mercado de trabajo estadounidense disminuyeron durante el año, y la tasa de paro aumentó desde el 3,7 % al inicio de 2024 hasta el 4,1 % al cierre del año. En China, el avance de la economía se ralentizó en 2024, aunque de forma marginal. La falta de dinamismo de la demanda interna en un contexto de escasa confianza de los consumidores y la prolongada debilidad del sector inmobiliario siguieron lastrando el crecimiento, pero la mejora de la demanda exterior neta y los estímulos fiscales y monetarios sostuvieron el ritmo de expansión hacia finales de año.
Gráfico 1.1
Evolución de la actividad y el comercio mundiales (excluida la zona del euro)

Fuentes: Haver Analytics, fuentes nacionales y cálculos del BCE.
Notas: Panel a: «PIB mundial» excluye la zona del euro. Los agregados se calculan utilizando el PIB ajustado por ponderaciones de la paridad del poder adquisitivo. Panel b: el crecimiento del comercio mundial se define como el crecimiento de las importaciones mundiales, incluidas las importaciones a la zona del euro. En ambos paneles, las líneas discontinuas indican las medias de largo plazo entre 1999 y 2023, y las últimas observaciones corresponden a 2024 actualizadas el 28 de marzo de 2025.
El comercio mundial se recuperó en 2024 porque las importaciones se adelantaron en un contexto de mayor incertidumbre
El comercio mundial se recuperó de forma significativa en 2024, y la tasa de crecimiento de las importaciones aumentó hasta situarse en el 4,4 %, desde el 1,2 % del año anterior, aunque se mantuvo ligeramente por debajo de su media de largo plazo (panel b del gráfico 1.1). La expansión del comercio internacional se vio favorecida por una intensa demanda adelantada de bienes importados en un contexto de preocupación por las disrupciones en las rutas de transporte marítimo en el mar Rojo y por posibles retrasos antes de las vacaciones del final del año. En Estados Unidos, las importaciones también se adelantaron por las incertidumbres asociadas a las huelgas en los puertos de la costa este del país y a las políticas comerciales. Se esperaba que la normalización de las importaciones de bienes, unida a un ciclo de producción manufacturera todavía débil y a una composición menos favorable de la demanda mundial, hubiera ocasionado una pérdida de impulso de los intercambios comerciales hacia finales de año.
La inflación mundial continuó moderándose en 2024, pero las presiones sobre los precios de los servicios siguieron siendo persistentes
La tasa de inflación mundial medida por la variación interanual del índice de precios de consumo (IPC) siguió disminuyendo en 2024 (gráfico 1.2) y en octubre se situó en el 3 %, frente al 3,4 % observado al final de 2023. La moderación de la inflación general se debió al descenso de las tasas de variación de los precios de los alimentos y la energía, así como a la de los precios de los bienes excluidos los alimentos y la energía. Por su parte, las presiones sobre los precios de los servicios continuaron siendo persistentes en las economías avanzadas.
Gráfico 1.2
Inflación general mundial y sus principales componentes
(tasas de variación interanual; datos mensuales)

Fuentes: Fuentes nacionales y OCDE a través de Haver Analytics, y cálculos del BCE.
Notas: La inflación mundial (excluida la zona del euro) se calcula a partir de los IPC nacionales y las ponderaciones anuales del PIB expresadas en términos de paridad del poder adquisitivo. El agregado se calcula sobre la base de 22 países que representan el 74 % del PIB mundial (excluida la zona del euro) en los mismos términos. Las contribuciones de los componentes a la inflación general se calculan utilizando las ponderaciones medias de los países de la OCDE. Las tasas de variación de los precios de los bienes y servicios que forman parte de la inflación subyacente excluyen la energía y los alimentos.
Las últimas observaciones corresponden a diciembre de 2024.
Los principales riesgos para las perspectivas de crecimiento de la economía mundial al final de 2024 incluían un aumento de la fragmentación económica global y del proteccionismo comercial, sobre todo en Estados Unidos, una escalada de las tensiones geopolíticas en Oriente Próximo o en la guerra de Rusia contra Ucrania, fenómenos meteorológicos más intensos y frecuentes, y una desaceleración adicional en China.
Las fluctuaciones de los precios de las materias primas energéticas estuvieron impulsadas por los acontecimientos geopolíticos
Si se consideran los datos al cierre del año, los precios de la energía aumentaron en términos globales en 2024 con respecto a 2023, ya que la subida de los precios europeos del gas contrarrestó el descenso de los del petróleo. Los precios del Brent cayeron un 5 %, debido fundamentalmente a factores de demanda como la debilidad de la producción manufacturera en Europa y la desaceleración de la actividad económica en China. Por el lado de la oferta, el conflicto en Oriente Próximo y los recortes sostenidos de producción por parte de los países que integran la OPEP+ evitaron que los precios del crudo siguieran bajando, pero no fueron suficientes para impulsarlos al alza. Los precios del gas en Europa se incrementaron un 52 % con datos referidos al final del año, aunque permanecieron muy por debajo del máximo alcanzado en 2022. Inicialmente, estos precios descendieron como resultado de un consumo persistentemente bajo en la región, en particular en el sector industrial. Sin embargo, a partir del segundo trimestre subieron de forma sostenida debido a presiones de oferta, entre ellas las interrupciones imprevistas del suministro de gas noruego, los episodios de recrudecimiento de la guerra de Rusia contra Ucrania y la preocupación sobre la expiración del acuerdo de tránsito de gas entre Rusia y Ucrania. Al final del año, los niveles de almacenamiento de gas en Europa habían descendido por debajo de los de 2022 y 2023, y también eran inferiores a su media al final del año previa a la crisis energética, lo que pone de manifiesto las dificultades de Europa para mantener niveles suficientes de reservas estratégicas a largo plazo.
El euro se depreció frente al dólar estadounidense en 2024 y en menor medida en términos efectivos nominales
Tras fluctuar durante 2024, al cierre del año el tipo de cambio efectivo nominal del euro se situaba ligeramente por debajo (−1,1 %) de los niveles registrados al final de 2023, como consecuencia de la compensación entre movimientos de signo opuesto en los tipos de cambio bilaterales frente a distintas monedas. Por un lado, el euro se depreció frente al dólar estadounidense (−6 %), un debilitamiento que se vio respaldado por unos datos económicos sorprendentemente positivos en Estados Unidos, por los flujos de huida hacia activos más seguros en un contexto de tensiones geopolíticas globales y, más avanzado el año, por las expectativas de cambios en las políticas con la nueva Administración estadounidense. Posteriormente, como los datos económicos relativos a la zona del euro también empeoraron en el cuarto trimestre de 2024, los mercados anticiparon una senda más pronunciada de futuros recortes de los tipos de interés oficiales en la zona del euro así como reducciones más moderadas de los tipos de intervención de política monetaria en Estados Unidos, lo que lastró adicionalmente a la moneda única frente al dólar estadounidense. Asimismo, las expectativas de una orientación persistentemente restrictiva de la política monetaria en el Reino Unido fortalecieron la libra esterlina, tanto en términos generales como en relación con el euro. La moneda única también perdió valor frente al renminbi chino en 2024, pero en menor medida que respecto al dólar (−3,4 %), ya que la fortaleza del renminbi se vio mermada por los crecientes factores económicos adversos en China. Por otro lado, el euro se apreció frente a las monedas de la mayoría de sus otros socios comerciales principales. Entre estas monedas, el yen japonés se vio sometido a presiones a la baja durante gran parte de 2024, dado que el nivel persistentemente reducido de los tipos de interés en Japón habría impulsado flujos asociados a operaciones «carry trade» desde el yen hacia monedas más rentables.
1.2 La actividad económica de la zona del euro comenzó a recuperarse gradualmente
La actividad económica de la zona del euro comenzó a recuperarse en un contexto de persistencia de factores adversos
El PIB real de la zona del euro creció un 0,9 % en 2024, frente al 0,4 % registrado en 2023 (gráfico 1.3). Las tasas de avance intertrimestrales pasaron a ser positivas a principios de 2024 tras cinco trimestres consecutivos de estancamiento, y a finales de año volvieron a desacelerarse. El aumento del crecimiento fue atribuible principalmente a los servicios, que siguieron beneficiándose de los cambios estructurales que se produjeron después de la pandemia, entre los que cabe destacar una reorientación más rápida hacia una economía más basada en el conocimiento, la transición ecológica y cambios en los patrones de gasto en consumo. La expansión de la economía también se vio respaldada por la recuperación de las rentas reales, por el comercio mundial y por el programa Next Generation EU (NGEU). Al mismo tiempo, el sector industrial continuó mostrando debilidad debido a una conjunción de factores estructurales y cíclicos. Este sector se vio más afectado que los servicios por las condiciones aún restrictivas derivadas del anterior ciclo de endurecimiento de la política monetaria y por los altos costes de los insumos. Aunque la mayoría de los modelos muestran que el impacto máximo del endurecimiento sobre la actividad económica se produjo entre finales de 2023 y principios de 2024, el ciclo de relajación de la política monetaria que se inició a mediados de 2024 aún no se había transmitido a la economía. La industria también se vio afectada por la pérdida de cuota de exportación de la zona del euro, así como por los retos regulatorios y por la elevada incertidumbre ligada a los acontecimientos políticos y geopolíticos. En general, en 2024, el crecimiento reflejó las contribuciones positivas del consumo público y privado y de la demanda exterior neta, mientras que la inversión y la variación de existencias frenaron la actividad económica.
Gráfico 1.3
PIB real de la zona del euro
(tasas de variación interanual; contribuciones en puntos porcentuales)

Fuente: Eurostat.
Nota: Las últimas observaciones corresponden a 2024.
El consumo privado se aceleró ligeramente, impulsado por los servicios
El consumo privado se aceleró en 2024 y creció un 1 % con respecto al año anterior. Pese a la solidez del consumo de servicios, el consumo privado total se incrementó solo de forma modesta en la primera mitad del año, ya que la demanda de bienes siguió siendo débil (gráfico 1.4). En el tercer trimestre del año cobró un impulso considerable gracias a factores transitorios como los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de París 2024, y en el cuarto experimentó una moderación. El avance de la renta real disponible respaldó el gasto de los hogares en 2024, dado que los salarios nominales aumentaron, la inflación se ralentizó y el crecimiento del empleo siguió mostrando capacidad de resistencia. No obstante, las condiciones de financiación aún restrictivas continuaron frenando el gasto de los hogares, y, en general, el ahorro se mantuvo en cotas elevadas.
Gráfico 1.4
Consumo, inversión (sin construcción) e inversión residencial en la zona del euro
(índices: IV TR 2019 = 100)
a) Consumo privado

b) Inversión

Fuentes: Eurostat y cálculos del BCE.
Notas: En el panel a, el consumo privado se refiere al concepto nacional y los componentes aluden al concepto de consumo interno. Las últimas observaciones corresponden al cuarto trimestre de 2024.
La inversión se vio frenada por las condiciones de financiación restrictivas y la elevada incertidumbre
La inversión residencial cayó con fuerza en 2024 en un contexto de condiciones de financiación aún restrictivas y de debilidad de la demanda. La caída fue del 4 % con respecto a 2023, el mayor descenso interanual registrado desde 2009, durante la crisis financiera global. Esta contracción se debió sobre todo al efecto retardado del endurecimiento de la política monetaria derivado del aumento de los tipos de interés hipotecarios y del endurecimiento de los criterios de concesión de préstamos. Aunque las rentas reales se estaban recuperando y el crecimiento de los precios de los inmuebles residenciales se mantuvo débil, las restrictivas condiciones de financiación dificultaron la accesibilidad a la vivienda y deprimieron la demanda de este tipo de inmuebles. Sin embargo, dada la sólida recuperación observada en la inversión residencial tras la pandemia ―respaldada en parte por generosos incentivos fiscales (ya retirados) en Italia―, al final de 2024, esta rúbrica de inversión se mantenía un 1,3 % por encima de su nivel prepandemia, si bien mostró un comportamiento peor que el consumo privado (3,1 %) y la inversión sin construcción (5,2 %, excluidos los activos intangibles en Irlanda).
La inversión sin construcción (la aproximación más cercana a la inversión empresarial en las cuentas nacionales) volvió a contraerse en 2024, en un contexto de atonía de la demanda interna y externa, de condiciones de financiación restrictivas y de elevada incertidumbre en diversos frentes. En conjunto, dicha inversión se redujo un 2,3 % en comparación con 2023, aunque registró una volatilidad trimestral considerable durante el año (véase gráfico 1.4). Si se excluye la inversión en activos intangibles realizada por las multinacionales en Irlanda, que muestra un comportamiento volátil, la inversión sin construcción disminuyó un 0,5 % en 2024[1]. Este resultado refleja tanto la persistente debilidad de la inversión en maquinaria y bienes de equipo como la desaceleración de las tasas de crecimiento de la inversión en activos intangibles observada en los últimos años. En un entorno de falta de dinamismo de la demanda interna y de mayor debilidad del sector exportador, las expectativas de producción a más largo plazo —que suelen ser un determinante fundamental de la inversión— se mantuvieron en niveles bajos durante el año, lo que redujo los incentivos para que las empresas invirtieran. La preocupación por las pérdidas de competitividad, la moderación de la rentabilidad y la incertidumbre elevada y generalizada —originada por los acontecimientos geopolíticos, por el creciente temor a una mayor fragmentación comercial y por la intensificación de la incertidumbre sobre las políticas― también supusieron un lastre adicional para la inversión empresarial en 2024.
Las exportaciones de la zona del euro continuaron faltas de dinamismo pese a la mejora de la demanda externa
Las exportaciones de la zona del euro mejoraron ligeramente en 2024 pero continuaron mostrando una trayectoria relativamente débil. Diversos factores contribuyeron a la falta de dinamismo del avance de las exportaciones, pese al contexto de mejora de la demanda externa. Los efectos retardados de la anterior apreciación del euro tuvieron un impacto adverso. Los costes energéticos siguieron siendo un importante motivo de preocupación, ya que los precios relativamente elevados del gas incrementaron los gastos de producción de los exportadores de la zona del euro, lo que contrajo los márgenes de beneficio y redujo la competitividad. La atonía de la demanda de China ―sobre todo de bienes de equipo― y la mayor competencia de los fabricantes de ese país también plantearon retos para la zona del euro. Las importaciones crecieron a un ritmo reducido, afectadas por la debilidad de la demanda interna y de la inversión. En conjunto, la demanda exterior neta tuvo un impacto levemente positivo en el crecimiento. La balanza comercial de la zona del euro siguió mejorando en 2024 con respecto a 2023.
Mercado de trabajo
El mercado de trabajo de la zona del euro mantuvo su fortaleza, mientras que el crecimiento de la productividad del trabajo se estancó
En general, el mercado de trabajo de la zona del euro mantuvo su fortaleza en 2024, aunque la expansión del empleo se ralentizó con respecto a los últimos años y los indicadores de opinión sugerían que los mercados de trabajo se habían ido enfriando a lo largo del año. La tasa de paro descendió desde el 6,5 % en enero hasta el 6,2 % en diciembre, uno de los registros más bajos desde la introducción del euro y 1,3 puntos porcentuales por debajo del nivel previo a la pandemia observado en enero de 2020. En el último trimestre del año también se situó, en promedio, en el 6,2 % (gráfico 1.5). El empleo total y las horas totales trabajadas fueron acordes, en general, con el avance de la economía, creciendo ambos alrededor del 1 % en 2024. Como consecuencia de esta evolución, la productividad se mantuvo en gran medida estancada. El escaso crecimiento de la productividad del trabajo fue de carácter fundamentalmente cíclico, y estuvo determinado por la debilidad de la demanda, mientras que las empresas atesoraron empleo, es decir, retuvieron más trabajadores de lo necesario en un período de bajo crecimiento económico. No obstante, puede que también influyeran factores estructurales. Las horas medias trabajadas disminuyeron un 0,1 % en 2024 y en el último trimestre del año se mantuvieron un 0,9 % por debajo del nivel anterior a la pandemia. La evolución de las horas medias trabajadas siguió reflejando factores como el atesoramiento de empleo desde el segundo semestre de 2023 y unos niveles aún elevados de bajas por enfermedad. La tasa de actividad del colectivo con edades comprendidas entre 15 y 74 años se elevó hasta el 66 % en el cuarto trimestre de 2024, 1,2 puntos porcentuales por encima de su nivel prepandemia. Las mujeres, los trabajadores de más edad, las personas con educación superior y los trabajadores extranjeros son los que más han contribuido a este aumento de la población activa. La demanda de trabajo disminuyó en 2024 en comparación con años anteriores, y la tasa de vacantes siguió descendiendo con respecto al máximo registrado en el segundo trimestre de 2022 hasta situarse en el 2,5 % en el cuarto trimestre de 2024, todavía por encima de la tasa previa a la pandemia, el 2,3 % en el último trimestre de 2019[2]. La convergencia de los salarios nominales hacia la inflación favoreció un reajuste de las dinámicas del empleo y de la producción, al tiempo que alineó más los salarios reales con la recuperación de la productividad. Por lo tanto, la política monetaria del BCE, a través de su orientación a medio plazo y sin perjuicio del mantenimiento de la estabilidad de precios, contribuyó a sostener el empleo y la productividad, que figuran entre los objetivos de la Unión Europea a los que el BCE puede contribuir.
Gráfico 1.5
Mercado de trabajo

Fuentes: Eurostat y cálculos del BCE.
Nota: Las últimas observaciones corresponden a diciembre de 2024 para la tasa de paro y al cuarto trimestre de 2024 para el empleo, las horas totales y medias trabajadas y la productividad por hora trabajada.
1.3 La orientación de la política fiscal de la zona del euro se endureció
Es probable que la orientación de la política fiscal se endureciera, debido a la retirada de las medidas de apoyo público adoptadas en respuesta a la crisis energética y a la elevada inflación
El déficit de las Administraciones Públicas de la zona del euro habría seguido disminuyendo en 2024 hasta situarse ligeramente por encima del umbral del 3 % del PIB (gráfico 1.6), frente al 3,6 % registrado en 2023. Esta evolución refleja principalmente un endurecimiento de la orientación de la política fiscal en 2024, debido a la retirada de las medidas adoptadas por los Gobiernos en 2022-2023 para compensar a los hogares y a las empresas por los altos niveles de los precios energéticos y por la inflación[3]. Al mismo tiempo, es probable que el aumento del gasto por intereses de la deuda pública, sobre todo en países con una deuda elevada, contribuyera negativamente al saldo presupuestario[4].
La ratio de deuda en relación con el PIB de la zona del euro habría aumentado ligeramente hasta situarse próxima al 88 % del PIB en 2024, desde un nivel ya elevado (87,4 %) en 2023 y, por tanto, se habría mantenido muy por encima del nivel previo a la crisis —83,6 % en 2019— (gráfico 1.6). Este incremento probablemente estuvo impulsado por el déficit primario y por los ajustes positivos entre déficit y deuda.
Gráfico 1.6
Saldo presupuestario de la zona del euro y deuda de las Administraciones Públicas
(porcentajes del PIB; orientación de la política fiscal: puntos porcentuales del PIB potencial)

Fuentes: Eurostat, Proyecciones macroeconómicas elaboradas por los expertos del Eurosistema para la zona del euro, diciembre de 2024 y cálculos del BCE.
Nota: En el panel a, el indicador de la orientación de la política fiscal se ha ajustado por el lado de los ingresos a partir de 2021 excluyendo las subvenciones del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia del NGEU porque esos ingresos no tienen efectos macroeconómicos restrictivos.
Los bienes públicos estratégicos contribuyen a reforzar la resiliencia de la economía europea
A finales de 2024 se preveía que la orientación de la política fiscal siguiera endureciéndose en 2025, aunque a un ritmo más lento que en años anteriores. No obstante, se consideraba que estas perspectivas fiscales estaban sujetas a una incertidumbre elevada. Los riesgos políticos procedían de los planes presupuestarios de las grandes economías de la zona del euro, así como de las futuras decisiones de la nueva Administración estadounidense y de las respuestas europeas. Estos riesgos se sumaron a las presiones fiscales a largo plazo derivadas del envejecimiento de la población. Además, hay expectativas crecientes de que la política fiscal proporcione bienes públicos estratégicos para reforzar la resiliencia de la economía europea avanzando en las transiciones ecológica y digital e incrementando la seguridad económica y la defensa. El programa NGEU realizará una importante contribución a dichas transiciones hasta que concluya al final de 2026 (véase recuadro 1).
El marco reformado de gobernanza económica de la UE entró en vigor el 30 de abril de 2024. Este marco se centra en la sostenibilidad de la deuda y tiene por objeto garantizar unas finanzas públicas saneadas y sostenibles, al tiempo que incentiva las reformas estructurales y la inversión[5]. Un elemento central del nuevo marco es la publicación de los planes fiscales y estructurales de medio plazo de los países. En estos planes se presenta la senda de crecimiento del gasto neto, así como los supuestos macroeconómicos subyacentes y en el caso de los países que pretenden ampliar el período de ajuste de cuatro a siete años se explican las medidas fiscales y estructurales previstas que les permitirían situar sus ratio de deuda en una trayectoria descendente verosímil a medio plazo.
Con la publicación de su paquete de otoño el 26 de noviembre y el 18 de diciembre, la Comisión Europea puso en marcha el primer ciclo de aplicación del nuevo marco de gobernanza económica. El paquete incluye la evaluación de los planes fiscales y estructurales de medio plazo nacionales y sus proyectos de planes presupuestarios para 2025. La Comisión concluyó que quince de los dieciséis planes presentados por los países de la zona del euro cumplían los requisitos establecidos en el nuevo marco. El período de ajuste fiscal recomendado se amplió de cuatro a siete años para cuatro países (España, Francia, Italia y Finlandia) a petición propia. La extensión del período de ajuste debe sustentarse en una serie de compromisos de inversión y reforma diseñados, entre otros fines, para contribuir al crecimiento sostenible e inclusivo y a la resiliencia, con el objetivo de apoyar la sostenibilidad presupuestaria[6].
La senda de gasto neto plurianual es el principal indicador de seguimiento del nuevo marco de gobernanza económica
A raíz de una recomendación de la Comisión Europea, en julio de 2024 el Consejo ECOFIN decidió iniciar un procedimiento de déficit excesivo a cinco países de la zona del euro, concretamente a Bélgica, Francia, Italia, Malta y Eslovaquia. Para corregir los déficits excesivos, la Comisión recomendó unas sendas de gasto neto plurianual acordes con los planes fiscales y estructurales de medio plazo presentados. Esta senda de gasto neto plurianual ha pasado a ser el principal indicador de seguimiento del nuevo marco de gobernanza económica.
Aplicar de forma plena, transparente y sin demora el marco de gobernanza económica revisado ayudará a los Gobiernos a reducir los déficits presupuestarios y las ratios de deuda de forma sostenida.
1.4 La inflación general siguió descendiendo hacia el objetivo
La inflación general descendió hasta el 2,4 % en diciembre de 2024 desde el 2,9 % registrado en diciembre de 2023, acercándose al objetivo
La inflación general de la zona del euro, medida por el Índice Armonizado de Precios de Consumo (IAPC), permaneció en una senda desinflacionista en 2024. En diciembre se situó en el 2,4 %, 0,5 puntos porcentuales por debajo del nivel observado un año antes (gráfico 1.7). Mientras que en 2023 el proceso de desinflación estuvo impulsado principalmente por la desaparición de los efectos de las perturbaciones de oferta anteriores, en 2024 reflejó cada vez más la transmisión de la orientación restrictiva de la política monetaria. La retirada gradual de las medidas de apoyo público adoptadas en respuesta a las perturbaciones asociadas a la pandemia y a los precios de la energía respaldó la desinflación al frenar la demanda agregada. Sin embargo, también supuso un lastre para el proceso desinflacionista, dado que estas medidas se habían diseñado para contener la inflación. En ese contexto, gran parte de las fluctuaciones que experimentó la inflación medida por el IAPC a lo largo del año se debieron a la variación de los precios de la energía, incluido el repunte observado al final del año. La evolución de los precios de los bienes no energéticos fue el factor que más contribuyó al avance de la desinflación, ya que tanto el componente de alimentos como el de bienes industriales no energéticos del IAPC registraron en diciembre de 2024 tasas de inflación más bajas ―3,5 puntos porcentuales y 2 puntos porcentuales, respectivamente― que en el mismo mes de 2023. Por su parte, la tasa de variación de los bienes industriales no energéticos se situó en un nivel próximo a la media de largo plazo previa a la pandemia del 0,6 % (calculada para el período comprendido entre 1999 y 2019). El descenso de estos dos componentes se debió a la desaparición gradual de las presiones latentes derivadas de shocks de costes anteriores y a un entorno internacional de fijación de precios más favorable en general. En cambio, la tasa de variación del componente de servicios del IAPC se mantuvo de forma persistente en torno al 4 % durante el año. Esta persistencia reflejó el impacto relativamente intenso de las presiones salariales sobre muchas partidas de servicios y la influencia de partidas «de mayor lentitud» (como los seguros, los alquileres de vivienda, etc.), cuyos precios han reaccionado con un desfase a las perturbaciones inflacionistas extraordinarias registradas anteriormente.
Gráfico 1.7
Inflación general y sus principales componentes
(tasas de variación interanual; contribuciones en puntos porcentuales)

Fuentes: Eurostat y cálculos del BCE.
Nota: Las últimas observaciones corresponden a diciembre de 2024.
La inflación de la energía fluctuó en terreno negativo durante la mayor parte del año, mientras que la de los alimentos disminuyó considerablemente
En 2024, la inflación de la energía fue algo más baja, en promedio, que en 2023, y permaneció en terreno negativo durante la mayor parte del año. Las tasas de variación interanual negativas de los precios de la energía observadas a principios de año se debieron principalmente a la dinámica de los precios del gas y la electricidad, mientras que a partir de agosto estuvieron determinadas por los precios de los combustibles para transporte. La volatilidad observada en los mercados energéticos mayoristas relacionada con sucesos como la guerra de Rusia contra Ucrania y con los efectos de base derivados de la evolución del año anterior acentuaron el perfil desigual de la inflación de la energía en 2024. La evolución de los precios de los alimentos contribuyó sustancialmente a la desinflación, en particular como consecuencia de la acusada caída que se produjo en los primeros meses del año, cuando descendieron las tasas de variación interanual de los precios de los alimentos elaborados y, en particular, las de los no elaborados. Este descenso estuvo relacionado con la disipación de las presiones latentes originadas por las fuertes subidas anteriores de los precios de la energía y los alimentos[7]. Posteriormente, la inflación de los alimentos mostró cierta volatilidad, en gran parte como reflejo de las fluctuaciones de los precios de los alimentos no elaborados, sobre todo de los de las frutas y hortalizas, que probablemente estuvieron asociadas a unas condiciones meteorológicas adversas.
Los indicadores de la inflación subyacente descendieron considerablemente en el primer semestre del año y se mantuvieron prácticamente estables en el segundo
Los indicadores de la inflación subyacente tratan de captar el componente persistente o común de la inflación, que señala el nivel en el que se prevé que la inflación general se estabilice a medio plazo tras la desaparición de los factores temporales. Sin embargo, como estos indicadores se habían visto impulsados al alza por las importantes perturbaciones de oferta anteriores, se esperaba que se moderaran en el contexto del proceso general de desinflación[8]. La inflación subyacente medida por el IAPC, excluidos los componentes volátiles de energía y alimentos, disminuyó desde el 3,4 % en diciembre de 2023 hasta el 2,7 % en abril de 2024 y posteriormente permaneció estable en líneas generales, situándose en diciembre también en el 2,7 %. El descenso de la inflación subyacente en los primeros meses de 2024 refleja la caída de la tasa de variación de los precios de los bienes industriales no energéticos, mientras que la de los precios de los servicios apenas varió durante el año y fluctuó en torno al 4 %. La inflación de los servicios suele tardar más en reducirse que la de otros componentes, ya que muchas de sus partidas (por ejemplo, el alquiler de vivienda, los seguros, y sanidad y educación) responden con retraso a las perturbaciones inflacionistas generales. La persistencia de la inflación de los servicios en 2024 también está relacionada con el elevado crecimiento de los salarios, cuyo peso en los costes de los servicios es mayor que en los de las manufacturas. Otros indicadores de la inflación subyacente, aunque mostraron cierta volatilidad, también disminuyeron durante el año, y en mayor medida durante el primer semestre. En general, estas disminuciones son resultado de la desaparición de los efectos de las perturbaciones de oferta anteriores, así como del debilitamiento de la demanda en un contexto de política monetaria aún restrictiva. Este último factor también ayuda a explicar por qué la desinflación se aprecia más claramente en el caso de los bienes que en el de los servicios, dado que la ponderación de las partidas que se estima que son sensibles a la política monetaria es mayor en la categoría de bienes que en la de servicios[9].
Las presiones de costes de origen interno disminuyeron como consecuencia de la moderación del crecimiento salarial y del efecto amortiguador de los beneficios
En 2024, las presiones de costes de origen interno, medidas por el crecimiento del deflactor del PIB, disminuyeron hasta situarse en el 2,9 %, desde el 5,9 % registrado en 2023. Esta evolución reflejó la caída de la contribución tanto de los costes laborales unitarios como de los beneficios unitarios (gráfico 1.8). La aportación de estos últimos se redujo porque los beneficios amortiguaron cada vez más las presiones al alza, aún elevadas, generadas por los costes laborales unitarios[10]. Al mismo tiempo, dichas presiones se moderaron como consecuencia de un menor crecimiento de los salarios, medido por la remuneración por asalariado, y de cierto fortalecimiento del avance de la productividad del trabajo. El ritmo de expansión interanual de la remuneración por asalariado descendió hasta el 4,5 % en 2024, desde el 5,3 % observado en 2023, pero se mantuvo significativamente por encima de su media anterior a la pandemia (2,2 %), debido al persistente tensionamiento de los mercados de trabajo y a las presiones remanentes para compensar la inflación. La moderación del avance de la remuneración por asalariado fue atribuible a una respuesta más rápida de la deriva salarial que la del crecimiento de los salarios negociados, lo que refleja, entre otras cosas, la probabilidad de que los ajustes para compensar los efectos de la inflación hayan dejado de formar parte de la deriva salarial y se hayan incorporado a los salarios negociados[11]. Al final de 2024, los salarios reales en la zona del euro habían retornado, en general, a los niveles registrados con anterioridad a la escalada de la inflación.
Gráfico 1.8
Deflactor del PIB y componentes
(tasas de variación interanual; contribuciones en puntos porcentuales)

Fuentes: Eurostat y cálculos del BCE.
Notas: Las últimas observaciones corresponden al cuarto trimestre de 2024.
La evolución de la productividad del trabajo se muestra invertida en el gráfico, ya que un aumento (reducción) de su crecimiento reduce (aumenta) las presiones de costes de origen interno.
Las expectativas de inflación a más largo plazo permanecieron ancladas en torno al objetivo de inflación del BCE del 2 %
Las expectativas de inflación a más largo plazo expresadas en la encuesta del BCE a expertos en previsión económica (EPE) disminuyeron desde el 2,1 % a finales de 2023 hasta el 2 % en la encuesta publicada en el primer trimestre de 2024 y permanecieron firmemente ancladas en las demás encuestas del año (gráfico 1.9). Datos adicionales procedentes de otras encuestas ―como la encuesta del BCE a analistas de política monetaria (Survey of Monetary Analysts) y la de Consensus Economics― también sugerían que estas expectativas eran acordes con el objetivo del BCE del 2 %. La orientación restrictiva de la política monetaria favoreció la desinflación a través no solo de la moderación de la demanda, sino también del anclaje sostenido de las expectativas de inflación a más largo plazo, lo que limitó el riesgo de efectos de segunda vuelta. Los indicadores de mercado de la compensación por inflación a más largo plazo (como el tipo swap de inflación [ILS] a cinco años dentro de cinco años) registraron una volatilidad algo más elevada durante el año, pero convergieron hacia niveles próximos al 2 % hacia finales de año. Es muy probable que la volatilidad observada a lo largo de 2024 se debiera a las variaciones de las primas de riesgo de inflación, ya que las expectativas genuinas de inflación estimadas se mantuvieron relativamente estables en torno al 2 %. En cuanto al consumo, la mediana de las expectativas de inflación a tres años vista disminuyó desde el segundo trimestre del año hasta octubre, mes en el que se situó en el 2,1 %, el nivel más bajo registrado desde febrero de 2022, cuando Rusia invadió Ucrania. Sin embargo, posteriormente, las expectativas superaron esa tasa durante el resto del año como consecuencia del aumento de la inflación y de la intensificación de la incertidumbre, aunque permanecieron en niveles inferiores a los observados a principios de año[12].
Gráfico 1.9
Indicadores de opinión y de mercado de las expectativas de inflación
(tasas de variación interanual)

Fuentes: LSEG, BCE (encuesta sobre las expectativas de los consumidores [CES] y encuesta a expertos en previsión económica [EPE]) y cálculos del BCE.
Notas: El tipo swap de inflación a cinco años dentro de cinco años (tipo del ILS 5a5a) se publica mensualmente. La encuesta EPE correspondiente al cuarto trimestre de 2024 se realizó entre el 1 y el 3 de octubre de 2024. En las encuestas EPE correspondientes al tercer y cuarto trimestre de 2024, las expectativas a más largo plazo se referían a 2029, y en las relativas al primer y segundo trimestre de 2024 a 2028. La última observación para la CES corresponde a diciembre de 2024.
1.5 Las condiciones de financiación se relajaron gradualmente, pero siguieron siendo restrictivas
Los rendimientos de la deuda soberana aumentaron como reflejo de factores internos y globales
Ante la disminución progresiva de las presiones inflacionistas durante 2024 (véase sección 1.4), el BCE moderó el grado de restricción de la política monetaria reduciendo sus tipos de interés oficiales a partir de junio (véase sección 2.1). En la primera mitad de 2024, el tipo OIS (overnight index swap) a diez años ―libre de riesgo― aumentó de forma gradual, unos 50 puntos básicos, hasta alcanzar el máximo del año en el verano. Posteriormente, como consecuencia de la disminución de las expectativas de tipos de interés de los mercados financieros y de las primas por plazo, el tipo OIS a diez años descendió gradualmente hasta situarse, en promedio, en el 2,2 % en diciembre de 2024 (gráfico 1.10), alrededor de 20 puntos básicos por debajo de la media registrada en diciembre de 2023. En general, los rendimientos de la deuda pública a largo plazo finalizaron 2024 en niveles más altos que a principios de año. En Francia, los rendimientos de la deuda soberana fueron significativamente superiores a los observados un año antes, debido a la mayor incertidumbre sobre las perspectivas fiscales y a los acontecimientos políticos en el país. Los diferenciales de rendimiento de la deuda soberana a largo plazo con respecto a los tipos libres de riesgo correspondientes se ampliaron, en general, en el último trimestre del año, una evolución que estuvo asociada a la menor escasez de activos de garantía en un contexto de aumento (esperado) de las emisiones de deuda soberana y a la reducción del balance del Eurosistema. En Italia, la disminución de los diferenciales ―que se benefició de una calificación crediticia más favorable―, contribuyó a la caída de los rendimientos de los bonos a largo plazo en 2024. En diciembre de 2024, la media ponderada por el PIB de los rendimientos nominales de la deuda pública a diez años de la zona del euro permaneció, en promedio, en el mismo nivel (2,7 %) que un año antes.
Gráfico 1.10
Tipos de interés a largo plazo y coste de los préstamos a empresas y a hogares para adquisición de vivienda
(porcentajes)

Fuentes: Bloomberg, LSEG y cálculos del BCE.
Notas: Observaciones mensuales. El rendimiento de la deuda pública a diez años de la zona del euro es una media ponderada por el PIB. Los indicadores del coste de los préstamos se calculan agregando los tipos de interés a corto y a largo plazo de los préstamos bancarios utilizando una media móvil de 24 meses del volumen de nuevas operaciones. Las últimas observaciones corresponden a diciembre de 2024.
Los mercados de renta variable se vieron respaldados por la disminución de las primas de riesgo y de los tipos de interés
En 2024, las cotizaciones bursátiles registraron subidas en el sector no financiero y, en mayor medida, en el sector financiero. En este último estuvieron lideradas por el sector bancario, que se benefició de elevados niveles de rentabilidad. Al cierre de 2024, los índices bursátiles amplios del sector no financiero y del sector bancario de la zona del euro se situaban en torno a un 3 % y un 21 % por encima de sus niveles respectivos al final de 2023. Los precios de las acciones se vieron respaldados por la disminución de sus primas de riesgo, por la mejora de las expectativas de beneficios a corto plazo, por el reparto de mayores dividendos y por el descenso de los tipos de interés libres de riesgo a largo plazo. Los rendimientos de los bonos corporativos se redujeron tanto en el segmento de grado de inversión como en el de alto rendimiento y al final de diciembre de 2024 se situaban en niveles más bajos que un año antes, debido a la caída de los tipos libres de riesgo y al estrechamiento de los diferenciales.
El agregado monetario amplio y la intermediación bancaria reflejaron la moderación del grado de restricción de la política monetaria
Los depósitos bancarios dejaron de disminuir y empezaron a recuperarse hacia finales de 2024, y el agregado monetario amplio (M3) repuntó a medida que el grado restricción de la política monetaria se fue moderando. La tasa de variación interanual de M3 fue del 3,4 % en diciembre, frente a cero en el mismo mes de 2023 (gráfico 1.11). La recuperación estuvo impulsada por las entradas netas del exterior, que reflejaron el abultado superávit por cuenta corriente derivado de la debilidad de las importaciones y del interés extranjero en los bonos de la zona del euro en un contexto de rendimientos atractivos. Estas entradas compensaron la disminución de liquidez resultante de la reducción del balance del Eurosistema. Como consecuencia de los reembolsos de la financiación obtenida en la tercera serie de operaciones de financiación a más largo plazo con objetivo específico (que fueron íntegros al final del año) y de la contracción de las carteras de activos del Eurosistema, las entidades de crédito siguieron recurriendo a fuentes de financiación de mercado más caras. Con todo, sus costes de financiación descendieron gradualmente con respecto a los máximos de 2023, aunque en menor medida que los tipos de interés oficiales. En general, los balances bancarios continuaron siendo, en general, sólidos.
Los tipos de interés de los préstamos bancarios a empresas y a hogares descendieron, pero las condiciones de financiación siguieron siendo restrictivas
Las condiciones de financiación en la zona del euro siguieron siendo restrictivas en 2024, aunque los recortes de los tipos de interés oficiales del BCE redujeron ligeramente el grado de restricción de la política monetaria. El coste nominal de la financiación de las empresas y los hogares disminuyó en cierta medida, tras alcanzar en 2023 los niveles más altos en casi quince años. El tipo de interés sintético de los préstamos bancarios a sociedades no financieras se situó en el 4,4 % en diciembre, lo que supuso un descenso de unos 90 puntos básicos con respecto al final de 2023, y el tipo correspondiente de los préstamos a hogares para adquisición de vivienda cayó alrededor de 60 puntos básicos, hasta el 3,4 % (gráfico 1.10). Así pues, el elevado diferencial entre los tipos de interés aplicados a los préstamos a las empresas y a los hogares observado durante la fase de endurecimiento de la política monetaria se redujo solo marginalmente. Las diferencias en los tipos de interés de los préstamos en los distintos países siguieron siendo limitadas, señal de que, en líneas generales, la política monetaria del BCE se estaba transmitiendo con fluidez en toda la zona del euro.
El crédito bancario concedido a empresas y a hogares se mantuvo débil, pero mostró signos de recuperación
El crédito bancario concedido a hogares y a empresas se mantuvo débil a causa de unas condiciones crediticias aún restrictivas y de la atonía de la demanda agregada (gráfico 1.11), aunque mostró signos de recuperación en la segunda mitad de 2024. Como se señaló en la encuesta sobre préstamos bancarios en la zona del euro, los criterios de concesión de préstamos a empresas se endurecieron en el cuarto trimestre de 2024, tras haberse estabilizado en los trimestres anteriores. Según la encuesta sobre el acceso de las empresas a la financiación, la disponibilidad de crédito bancario mejoró solo de forma transitoria y empeoró en el cuarto trimestre. La tasa de crecimiento interanual de los préstamos bancarios a empresas fue del 1,7 % en diciembre. En general, la financiación empresarial mediante deuda siguió mostrando signos de debilidad y los flujos netos de financiación externa de las empresas se situaron considerablemente por debajo de su dinámica a más largo plazo, pese al repunte de las emisiones y de las valoraciones de las acciones cotizadas (gráfico 1.12). En cuanto al crédito bancario a hogares, la recuperación gradual de su tasa de crecimiento interanual, hasta el 1,1 % en diciembre, estuvo impulsada principalmente por los préstamos hipotecarios. Esta evolución fue acorde con la relajación general de los criterios de aprobación durante el año y con el fuerte repunte de la demanda de préstamos señalado en las encuestas sobre préstamos bancarios de la segunda mitad de 2024, así como con las intenciones sostenidas de compra de vivienda expresadas en la encuesta sobre las expectativas de los consumidores a lo largo del año. Al mismo tiempo, al final de 2024, el porcentaje de hogares que en esa encuesta indicaron que el acceso al crédito se había deteriorado seguía superando al de los que manifestaron que había mejorado, con un recurso sostenido al crédito al consumo concentrado entre los hogares de menores ingresos. Además, las entidades de crédito siguieron indicando un endurecimiento de los criterios de concesión del crédito al consumo durante 2024.
Gráfico 1.11
Crecimiento de M3 y del crédito a empresas y a hogares
(tasas de variación interanual)

Fuente: BCE.
Notas: «Empresas» se refiere a las sociedades no financieras. Las últimas observaciones corresponden a diciembre de 2024.
Gráfico 1.12
Flujos netos de financiación externa de las empresas
(flujos anuales en mm de euros)

Fuentes: BCE y Eurostat.
Notas: «Empresas» se refiere a las sociedades no financieras. IFM: instituciones financieras monetarias. En «préstamos de instituciones financieras no monetarias y del resto del mundo», las instituciones financieras no monetarias incluyen otros intermediarios financieros, fondos de pensiones y empresas de seguros. Los «préstamos de IFM» y los «préstamos de instituciones financieras no monetarias y del resto del mundo» están corregidos por titulizaciones y otras transferencias. «Otros» es la diferencia entre el total y los instrumentos incluidos en el gráfico, y comprende principalmente préstamos entre empresas relacionadas y crédito comercial. Las últimas observaciones corresponden al tercer trimestre de 2024. El flujo anual de 2024 se ha calculado como la suma de cuatro trimestres de los flujos registrados entre el cuarto trimestre de 2023 y el tercero de 2024. Las cuentas sectoriales trimestrales de la zona del euro son objeto de revisiones significativas cada cinco años y la más reciente se realizó en 2024, lo que explica que los datos correspondientes a algunos años difieran sustancialmente de los utilizados en el Informe Anual anterior.
Recuadro 1
El impacto duradero de la pandemia de COVID-19 y las tendencias estructurales de crecimiento de la productividad
La zona del euro está atravesando un período de transformación caracterizado por perturbaciones económicas y por cambios estructurales profundos que inciden en el crecimiento de la productividad a medio y largo plazo. En los últimos años, la zona se ha enfrentado a una combinación singular de perturbaciones y cambios estructurales que están teniendo efectos complejos e inciertos en el avance de la productividad. La pandemia de COVID-19, la rápida transición digital y las transiciones ecológica y demográfica destacan como factores fundamentales que afectan a las perspectivas de productividad a medio y largo plazo. Cada uno de estos factores introduce mecanismos específicos a través de los cuales influyen en la productividad, y sus interacciones añaden aún más complejidad al entorno económico. En este recuadro se examinan estas dinámicas y sus implicaciones para el crecimiento de la productividad. El análisis se basa en los trabajos recientes sobre productividad de un grupo de expertos del Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC)[13].
El impacto duradero de la pandemia en el crecimiento de la productividad
La pandemia provocó disrupciones generalizadas en todos los países, sectores y empresas que afectaron al avance de la productividad de distintas maneras. El amplio alcance de la crisis, junto con medidas como los confinamientos y la alteración de los patrones de trabajo y de consumo, así como las amplias medidas de apoyo a las empresas y a los hogares, supusieron un cambio con respecto a fases recesivas anteriores.
Las medidas de respuesta adoptadas evitaron quiebras generalizadas, pero debilitaron la reasignación de recursos orientada a incrementar la productividad. Los datos disponibles muestran que la crisis dio lugar a que las empresas poco productivas registrasen una contracción más significativa que las empresas con mayores niveles de productividad, o que las primeras tuvieran más probabilidades de salir del mercado que las segundas, lo que facilitó la reasignación de recursos a corto plazo (gráfico A). Sin embargo, este efecto fue menos pronunciado que en crisis anteriores, debido a las amplias medidas de apoyo que evitaron las salidas del mercado y la contracción de las empresas. El análisis llevado a cabo por el grupo de expertos del SEBC muestra que la asignación de subvenciones a las empresas tuvo un efecto más distorsionador con el tiempo, a pesar de que los criterios de concesión no se modificaron.
La pandemia aceleró el proceso de digitalización, cambió el comportamiento de los consumidores y afectó a los patrones de bajas por enfermedad y al nivel educativo, con posibles efectos a largo plazo. La profundización de la economía digital—incluido el mayor uso del teletrabajo—, respaldada por iniciativas como el programa NGEU, ofrece unas perspectivas prometedoras. Al mismo tiempo, la pandemia tuvo efectos duraderos en la población activa, y todavía no es posible cuantificar íntegramente sus consecuencias a largo plazo para el crecimiento de la productividad.
Gráfico A
Distribución de la productividad de empresas que salieron de un sector en comparación con las que sobrevivieron en el mismo sector en 2020
(densidad)

Fuente: Cálculos de los autores basados en datos a nivel de empresa de Orbis-iBACH.
Notas: El conjunto de datos incluye Bélgica, Alemania, España, Francia, Italia y Portugal. La productividad del trabajo se define como el valor añadido real por asalariado.
La transformación digital y el crecimiento de la productividad
Las tecnologías digitales pueden impulsar la eficiencia de los trabajadores complementando sus tareas y facilitando la externalización de actividades no esenciales. Además, la digitalización incrementa la competitividad de los mercados, permite alcanzar una participación relevante en un mercado sin tener presencia física (scale without mass) y amplía el acceso a los mercados a través del comercio electrónico. Datos a nivel de empresa de países como Francia y Austria demuestran que las inversiones en tecnologías digitales pueden traducirse en un avance sostenido de la productividad, aunque de una magnitud relativamente reducida, en promedio, y tras un período inicial de ajuste.
Las ganancias de productividad derivadas de la digitalización son muy dispares entre los distintos sectores y empresas. Aunque el impacto medio de la inversión digital es reducido, en los sectores que pueden beneficiarse de la digitalización sus efectos son diecisiete veces superiores a la media. Además, solo alrededor del 30 % de las empresas, normalmente las más productivas, consiguen usar las nuevas tecnologías digitales de forma innovadora y disruptiva para incrementar su productividad, dado que ya disponen de las competencias y los activos intangibles complementarios necesarios (gráfico B). En cuanto a los efectos agregados, las mejoras de eficiencia asociadas a la digitalización han impulsado de forma significativa el avance de la productividad del trabajo, como evidencian simulaciones que muestran que, sin estas mejoras, el crecimiento de la productividad en países como Alemania y Francia habría sido sustancialmente más bajo.
El impacto de la transición ecológica en el crecimiento de la productividad
Debido a la urgente necesidad de reducir las emisiones de gases de efecto invernadero (GEI) se han aplicado políticas para promover la adopción de soluciones bajas en carbono, con un posible impacto en el avance de la productividad agregada. Los dos canales principales a través de los que la transición ecológica incide en la productividad son la inversión en innovación verde y la reasignación de recursos. La necesidad de reducir emisiones de GEI incentiva a las empresas a innovar y a incorporar prácticas más eficientes y sostenibles en sus actividades. Al mismo tiempo, la economía se está reorientando hacia sectores más verdes, redirigiendo el trabajo y el capital desde los sectores y empresas contaminantes. Esta reasignación puede incrementar la productividad total si los recursos se destinan a usos más eficientes.
Gráfico B
Impacto estimado de la digitalización en el crecimiento de la productividad total de los factores (PTF) de empresas con distintos niveles iniciales de PTF
(puntos porcentuales)

Fuente: R. Anderton, V. Botelho y P. Reimers, «Digitalisation and productivity: gamechanger or sideshow?», Working Paper Series, n.º 2794, BCE, marzo de 2023.
Notas: El gráfico muestra el impacto de la digitalización en el crecimiento de la PTF en sectores específicos en función de la posición de la empresa en la distribución de la PTF (donde 1 es el decil inferior de la distribución y 10 el decil superior).
La evidencia empírica sugiere que unas políticas medioambientales exigentes pueden impulsar la innovación verde a largo plazo, pero pueden ser perjudiciales para el crecimiento de la productividad total de los factores (PTF) a corto plazo. El análisis realizado por el grupo de expertos muestra que para realizar la transición a una economía baja en carbono es necesaria una combinación de políticas que conjugue los impuestos sobre el carbono, la regulación y el apoyo a las tecnologías verdes. Sin embargo, esta transición será costosa a corto plazo a medida que las empresas se adaptan, y tendrá un impacto negativo en el crecimiento de la PTF, sobre todo en empresas contaminantes de pequeño tamaño por sus mayores limitaciones de acceso a la financiación. No obstante, las políticas medioambientales están incentivado la innovación verde, como refleja el significativo incremento del número de patentes de tecnología verde registradas por empresas contaminantes. Es probable que el aumento de la innovación verde resulte en un mayor avance de la productividad a largo plazo.
El impacto sobre la productividad de la reasignación de recursos impulsada por las políticas de transición varía en función de los sectores. A determinados niveles de productividad sectorial, la reasignación entre sectores reduciría mecánicamente la productividad, dado que, en promedio, los sectores muy intensivos en carbono son más productivos. No obstante, en sectores con una definición muy específica, la intensidad en carbono y la productividad del trabajo de las empresas no siempre están correlacionadas. Por tanto, la reasignación de recursos de empresas con altas emisiones de carbono a otras con bajas emisiones no conduce necesariamente a un aumento de la productividad. La información desagregada a nivel de empresa obtenida del régimen de comercio de derechos de emisión de la UE muestra que, en la mayoría de los sectores, las compañías más eficientes en carbono son también las más productivas. Esto implica que, ceteris paribus, dados los niveles actuales de productividad de las empresas, la reasignación de recursos hacia empresas más verdes conducirá a un mayor crecimiento de la productividad del trabajo en esos sectores. Sin embargo, en otros sectores ―como los de pasta de papel, papel y metales― ferrosos sucede lo contrario, y la reasignación provocará una disminución de la productividad.
Conclusiones
La interacción entre las perturbaciones recientes y las tendencias estructurales en curso crea un entorno complejo para el crecimiento de la productividad a medio y largo plazo. Tanto la pandemia como las transiciones digital y ecológica han planteado retos y oportunidades únicos. Como sugiere el informe reciente de Mario Draghi, las autoridades deben gestionar estas dinámicas con cautela para promover un entorno que favorezca el crecimiento sostenido de la productividad, aprovechando las tecnologías digitales y verdes, y mitigando al mismo tiempo los posibles efectos distorsionadores de las medidas de intervención[14]. Conforme la economía global evoluciona, es imprescindible que las autoridades de la zona del euro tengan en cuenta estas interacciones para configurar y apoyar de forma eficaz las sendas futuras de crecimiento de la productividad.
2 La política monetaria comenzó a relajarse, aunque se mantuvo en territorio restrictivo
En 2024, el Consejo de Gobierno moderó el grado de restricción de la política monetaria a medida que la inflación mostraba señales de convergencia sostenida hacia el objetivo del 2 %, al tiempo que la economía de la zona del euro registraba un crecimiento lento (véase sección 2.1). Los tipos de interés permanecieron sin variación durante casi todo el primer semestre del año. Posteriormente, el Consejo de Gobierno redujo el tipo de interés de la facilidad de depósito 25 puntos básicos en junio y en septiembre, lo que representó un cambio hacia una política monetaria menos restrictiva. Asimismo, mantuvo su compromiso de aplicar un enfoque dependiente de los datos, en el que las decisiones se adoptan en cada reunión, para determinar el nivel de restricción y su duración apropiados. En el tercer trimestre, el avance de la actividad económica continuaba siendo débil, con algunos indicios de estabilización, respaldada por el aumento del consumo y de la demanda mundial. El Consejo de Gobierno tenía una confianza creciente en que la inflación descendería de forma gradual y volvió a reducir 25 puntos básicos el tipo de interés de la facilidad de depósito en octubre y en diciembre.
El balance del Eurosistema se redujo 0,5 billones de euros en 2024, como parte del proceso de normalización iniciado en 2022, y se situó en 6,4 billones de euros al cierre del año (véase sección 2.2). Esta reducción se debió a los reembolsos anticipados y al vencimiento de operaciones de la tercera serie de operaciones de financiación a plazo más largo con objetivo específico (TLTRO III, por sus siglas en inglés), así como a la disminución de la cartera de valores del programa de compras de activos (APP, por sus siglas en inglés) y, en cierta medida, también de la del programa de compras de emergencia frente a la pandemia (PEPP, por sus siglas en inglés). Los valores de este último programa pasaron a reinvertirse parcialmente a partir de julio. El Consejo de Gobierno aprobó cambios en el marco operativo para la aplicación de la política monetaria en marzo de 2024 (véase recuadro 2) y puso fin a las reinversiones en el marco del PEPP al final del año.
En 2024 el Eurosistema introdujo mejoras en su marco de gestión de riesgos con el fin de asegurar una implementación de la política monetaria eficiente en este ámbito. Como consecuencia de los elevados niveles de los tipos de interés oficiales, el BCE incurrió en pérdidas al registrar ingresos netos por intereses negativos que se compensarán con beneficios futuros (véanse la sección 2.3 y las Cuentas Anuales 2024 del BCE). Se espera que los ingresos netos por intereses del Eurosistema aumenten de nuevo en los próximos años y que contribuyan a su resiliencia financiera.
2.1 Moderación del grado de restricción de la política monetaria
El Consejo de Gobierno mantuvo sin variación los tipos de interés en enero para asegurar una política monetaria suficientemente restrictiva
En enero de 2024, el Consejo de Gobierno consideró que la economía seguía falta de dinamismo tras el estancamiento observado durante 2023. Las perspectivas de crecimiento económico a corto plazo de la zona del euro señalaban una moderación de la actividad económica y del comercio a escala mundial y unas condiciones de financiación restrictivas, y se observaban riesgos derivados del aumento de las tensiones geopolíticas originadas por el conflicto en Oriente Próximo y por la guerra de Rusia contra Ucrania. Sin embargo, algunos indicadores de opinión prospectivos apuntaban a una recuperación del crecimiento más adelante. Pese a la atonía del crecimiento, el mercado de trabajo conservaba su fortaleza tras el descenso en gran parte continuado de la tasa de paro desde septiembre de 2020. La inflación había aumentado en diciembre de 2023 como consecuencia de un efecto de base en los precios de la energía, y se mantenía elevada en el 2,9 %. Al mismo tiempo, la mayoría de los indicadores de la inflación subyacente habían continuado su trayectoria descendente a medida que los efectos de las anteriores perturbaciones de oferta disminuyeron y el impacto de la política monetaria restrictiva redujo la demanda. El Consejo de Gobierno confirmó su valoración de que los tipos de interés oficiales del BCE se encontraban en niveles que, mantenidos durante un período suficientemente largo, contribuirían de forma sustancial al pronto retorno de la inflación a su objetivo del 2 % a medio plazo. Por tanto, en su reunión de enero decidió mantener sin variación los tipos de interés oficiales, en los niveles acordados en septiembre de 2023, y reiteró que los mantendría en niveles suficientemente restrictivos durante el tiempo que fuera necesario.
El Consejo de Gobierno decidió mantener sin variación los tipos de interés en marzo...
En las proyecciones macroeconómicas de los expertos del BCE de marzo, la inflación se revisó a la baja, en particular para 2024, debido a la menor contribución de los precios de la energía. Las proyecciones apuntaban a que, con el tiempo, la inflación disminuiría gradualmente hacia el objetivo del BCE. La inflación general había descendido en febrero, pero las presiones inflacionistas internas seguían siendo elevadas, como consecuencia, en parte, del fuerte crecimiento de los salarios y de la caída de la productividad del trabajo. La economía de la zona del euro continuaba mostrando debilidad. Se consideraba que el gasto en consumo había sido limitado, que la inversión se había ralentizado y que las exportaciones se habían reducido como resultado de la desaceleración de la demanda externa y de cierta pérdida de competitividad de las empresas de la zona del euro. Los expertos del BCE habían revisado a la baja sus proyecciones de crecimiento a corto plazo. Con todo, aún se esperaba que la economía se recuperara y creciera con el tiempo, respaldada inicialmente por el consumo y más tarde también por la inversión. En particular, se preveía un repunte de las rentas reales asociado al descenso de la inflación y a los incrementos salariales. Aunque las condiciones de financiación seguían siendo restrictivas, también se esperaba que el efecto moderador en la demanda generado por las anteriores subidas de los tipos de interés desapareciera gradualmente y que las exportaciones se recuperaran. Continuando con su enfoque dependiente de los datos y sobre la base de su valoración de las perspectivas de inflación, la dinámica de la inflación subyacente y la intensidad de la transmisión de la política monetaria, en marzo, el Consejo de Gobierno decidió mantener sin variación los tres tipos de interés oficiales del BCE.
El Consejo de Gobierno también subrayó la importancia de avanzar en la unión de los mercados de capitales para estabilizar el crecimiento cuando los países afronten perturbaciones locales que la política monetaria no puede abordar. Un sistema financiero más integrado y diversificado potenciaría la compartición de riesgos entre países a través de canales privados, ayudaría a reducir la fragmentación financiera y aseguraría la transmisión efectiva de la política monetaria a toda la zona del euro, entre otros beneficios.
... y anunció cambios en el marco operativo para la aplicación de la política monetaria
Asimismo, en marzo, el Consejo de Gobierno aprobó cambios en el marco operativo para la aplicación de la política monetaria. En la revisión del marco, anunciada en diciembre de 2022, se establecieron los principios y parámetros fundamentales para la implementación de la política monetaria y la provisión de liquidez del banco central, en un contexto de disminución gradual del exceso de liquidez en el sistema bancario (véase recuadro 2). En concreto, el Consejo de Gobierno decidió continuar guiando la orientación de la política monetaria mediante el ajuste del tipo de interés de la facilidad de depósito y proporcionar liquidez con flexibilidad, en función de las necesidades de las entidades de crédito, a través de una amplia variedad de instrumentos, entre ellos —en una fase posterior—, operaciones estructurales de financiación a plazo más largo y una cartera estructural de valores. También aprobó una reducción de 50 a 15 puntos básicos del diferencial entre el tipo de interés de las operaciones principales de financiación y el tipo de interés de la facilidad de depósito a partir del 18 de septiembre de 2024.
La inflación continuó su senda descendente...
La inflación siguió descendiendo y se situó en el 2,4 % en marzo, y la mayoría de los indicadores de la inflación subyacente se redujeron, lo que confirmó el panorama de disminución gradual de las presiones sobre los precios. Sin embargo, la tasa de variación de los precios de los servicios se mantuvo en un nivel elevado (el 4 %), impulsada por las subidas de los precios internos. Los salarios continuaban creciendo —según datos del último trimestre de 2023—, pero a un ritmo más lento de lo previsto. El aumento de los costes laborales estaba siendo absorbido, en cierta medida, por los beneficios empresariales, y ello limitó su impacto sobre los precios de consumo. Al mismo tiempo, el crecimiento de los costes laborales unitarios seguía siendo considerable como resultado del débil avance de la productividad, si bien se estaba desacelerando con respecto a los altos niveles registrados anteriormente.
... y el efecto de la política monetaria restrictiva en las condiciones de financiación y en la economía se hizo más evidente
A medida que avanzó el año se fue haciendo más evidente que la política monetaria restrictiva del Consejo de Gobierno estaba teniendo un impacto significativo en la economía y, por consiguiente, en la inflación. En el primer trimestre de 2024, los elevados costes de financiación de las empresas y los hogares y el endurecimiento de los criterios de aprobación del crédito dieron lugar a reducciones de los planes de inversión y de las compras de vivienda, así como a una contracción adicional de la demanda de crédito. Aunque el gasto en servicios se mantuvo sólido, las empresas manufactureras se enfrentaban a una demanda débil. Los niveles de producción continuaban siendo bajos, sobre todo en los sectores intensivos en energía. No obstante, se esperaba que el crecimiento de las exportaciones de la zona del euro experimentara una aceleración, respaldada por el fortalecimiento de la economía mundial y por el aumento de la demanda de bienes comerciables.
En abril, el Consejo de Gobierno anunció que mantendría sin variación los tres tipos de interés oficiales del BCE, en territorio restrictivo. Subrayó su compromiso de aplicar un enfoque dependiente de los datos en el que las decisiones se adoptan en cada reunión, sin comprometerse de antemano con una senda concreta de tipos. Por primera vez, el Consejo de Gobierno comunicó que sería apropiado reducir el nivel de restricción de la política monetaria si su valoración de las perspectivas de inflación, la dinámica de la inflación subyacente y la intensidad de la transmisión de la política monetaria reforzasen adicionalmente la confianza en que la inflación estaba convergiendo hacia el objetivo de forma sostenida.
El Consejo de Gobierno recortó los tipos de interés en junio hasta situar el tipo de la facilidad de depósito en el 3,75 %, tras haberlos mantenido sin variación durante nueve meses...
Ese momento llegó en junio, y el Consejo de Gobierno decidió recortar 25 puntos básicos los tres tipos de interés oficiales del BCE tras haberlos mantenido sin variación durante nueve meses. Desde la reunión de septiembre de 2023, la última ocasión en la que el Consejo de Gobierno había subido los tipos, la inflación había descendido 2,6 puntos porcentuales y las perspectivas de inflación habían mejorado notablemente. Los indicadores de la inflación subyacente también habían disminuido, lo que reforzó las señales de debilitamiento de las presiones inflacionistas, y las expectativas de inflación se habían reducido en todos los horizontes. La política monetaria había mantenido unas condiciones de financiación restrictivas. Esto contribuyó de forma importante a la caída de la inflación al frenar la demanda y mantener las expectativas de inflación firmemente ancladas.
Pese a estos desarrollos positivos, las presiones inflacionistas internas seguían siendo intensas y el crecimiento salarial elevado, compensando el anterior repunte de la inflación. Se consideró que era probable que la inflación permaneciera por encima del objetivo hasta bien avanzado el año siguiente. Los expertos del Eurosistema habían revisado ligeramente al alza sus proyecciones de inflación para 2024 y 2025 con respecto a marzo y preveían que la inflación experimentaría fluctuaciones durante el resto de 2024, entre otros motivos por los efectos de base relacionados con la energía. Con todo, en ese momento se esperaba que la inflación disminuyera hacia el objetivo durante la segunda mitad de 2025, como consecuencia del menor crecimiento de los costes laborales, de la materialización de los efectos de la política monetaria restrictiva y de la desaparición gradual del impacto de la crisis energética y de la pandemia.
La inflación aumentó hasta el 2,6 % en mayo, aunque la tasa de variación de los precios de los alimentos y de los bienes se redujo. El ritmo de avance de los precios de la energía experimentó un ligero repunte tras un año de tasas interanuales negativas, y la inflación de los servicios se incrementó hasta el 4,1 %, desde el 3,7 % de abril.
Tras cinco trimestres de estancamiento, la economía de la zona del euro creció un 0,3 % en el primer trimestre de 2024. La actividad de los servicios se estaba expandiendo, mientras que la de las manufacturas mostraba señales de estabilización en niveles bajos. El empleo avanzó un 0,3 % en el primer trimestre, con unos 500.000 nuevos empleos creados desde diciembre de 2023. Se esperaba que la economía continuara falta de dinamismo a corto plazo y que posteriormente se recuperara, respaldada por el aumento de los salarios, la mejora de la relación real de intercambio y el incremento de las rentas reales. Los costes de financiación se habían estabilizado en niveles restrictivos y el crédito seguía mostrando debilidad como resultado de las anteriores subidas de los tipos de interés oficiales. Además, en junio de 2024, las entidades de crédito reembolsaron un importe significativo de los fondos obtenidos en las TLTRO III tras el cuantioso reembolso realizado en marzo, lo que provocó un descenso sustancial del exceso de liquidez.
... y confirmó la reducción gradual de las tenencias de valores adquiridos en el marco del PEPP en el segundo semestre de 2024
El Consejo de Gobierno también confirmó en junio que reduciría las tenencias del Eurosistema de valores adquiridos en el marco del PEPP en 7,5 mm de euros mensuales en promedio durante el segundo semestre del año. Este enfoque replicaría en gran parte el aplicado en el APP.
El Consejo de Gobierno decidió mantener sin variación los tipos de interés en julio
Cuando se celebró la reunión del Consejo de Gobierno de julio, la mayoría de los indicadores de inflación correspondientes a junio habían permanecido estables o habían disminuido, en línea con las expectativas, pero las presiones internas sobre los precios y la inflación de los servicios continuaban siendo elevadas. Los salarios seguían creciendo a un ritmo intenso, mientras que su impacto sobre la inflación aún se veía mitigado en cierta medida por los beneficios empresariales. La información más reciente respaldaba, en líneas generales, la valoración anterior de las perspectivas de inflación a medio plazo, y el Consejo de Gobierno decidió mantener sin variación los tipos de interés oficiales en su reunión de julio. También reafirmó su intención de mantener la orientación restrictiva de la política monetaria durante el tiempo que fuera necesario.
La inflación disminuyó hasta el 2,2 % en agosto, mientras que la actividad económica continuó siendo débil
La inflación disminuyó hasta el 2,2 % en agosto, desde el 2,6 % de julio. Con todo, las presiones internas sobre los precios y la inflación de los servicios continuaban siendo elevadas, principalmente como resultado del aumento de los salarios. Las presiones de los costes laborales seguían moderándose, pero también continuaban siendo intensas. Las proyecciones de los expertos del BCE de septiembre confirmaron las anteriores perspectivas de inflación, lo que reforzó la valoración de un retorno gradual y sostenido de la inflación al 2 %. Se esperaba que la inflación aumentara a finales de año y se redujera hacia el objetivo en el segundo semestre de 2025. Dado que la tasa de variación de los precios de los servicios había sido mayor de lo previsto, las proyecciones relativas a la inflación subyacente (que excluye la energía y los alimentos) en 2024 y 2025 se revisaron ligeramente al alza, aunque seguían apuntando a una senda de rápido descenso.Cuando el Consejo de Gobierno celebró su reunión de septiembre, las condiciones de financiación continuaban siendo restrictivas y el crédito seguía creciendo con lentitud en un entorno de debilidad de la demanda, al tiempo que la actividad económica mostraba falta de dinamismo. En el segundo trimestre de 2024, la economía había crecido un 0,2 %, un ritmo más lento que en el trimestre anterior y por debajo de las expectativas. La demanda exterior neta y el gasto público fueron los principales motores del crecimiento. El consumo privado y la inversión, que se esperaba que lideraran la recuperación, continuaban siendo débiles, probablemente como consecuencia de los elevados riesgos geopolíticos. Por consiguiente, los expertos del BCE revisaron a la baja sus proyecciones de crecimiento con respecto a junio para reflejar una menor contribución de la demanda interna en los trimestres siguientes. Se esperaba que la economía se fortaleciera con el tiempo y creciera un 0,8 % en 2024, un 1,3 % en 2025 y un 1,5 % en 2026. La recuperación se vería respaldada por el avance del consumo, la desaparición gradual de los efectos de la política monetaria restrictiva y el incremento de la demanda global y las exportaciones.
El Consejo de Gobierno dio un paso más en la moderación del grado de restricción de la política monetaria en septiembre...
A la luz de la nueva información disponible, que reforzaba la confianza en un descenso gradual de la inflación hacia el objetivo del BCE, en septiembre el Consejo de Gobierno decidió reducir 25 puntos básicos el tipo de interés aplicable a la facilidad de depósito —el tipo de interés mediante el que guía la orientación de la política monetaria—, dando así un paso más en la moderación del grado de restricción de la política monetaria. Como ya se había anunciado el 13 de marzo de 2024, a partir del 18 de septiembre tendrían efecto algunos cambios en el marco operativo para la aplicación de la política monetaria (véase recuadro 2). En concreto, el diferencial entre el tipo de interés de las operaciones principales de financiación y el tipo de la facilidad de depósito se ajustó y se situó en 15 puntos básicos, mientras que el diferencial entre el tipo de interés de la facilidad marginal de crédito y el tipo de las operaciones principales de financiación se mantuvo sin cambios en 25 puntos básicos. En septiembre, el exceso de liquidez en la zona del euro cayó por debajo de los 3 billones de euros, debido fundamentalmente a que las entidades de crédito reembolsaron la financiación obtenida en las operaciones TLTRO III. La finalización gradual de las reinversiones de los bonos que fueron venciendo en las carteras mantenidas por el Eurosistema con fines de política monetaria contribuyó cada vez más a esta caída.
... y de nuevo en octubre
En septiembre, la inflación se redujo hasta el 1,7 %, su nivel más bajo desde abril de 2021, lo que reforzó la confianza en que el proceso de desinflación avanzaba conforme a lo previsto. La mayoría de los indicadores de la inflación subyacente descendieron o se mantuvieron sin variación en septiembre. Los precios de la energía disminuyeron significativamente ―a una tasa interanual del –6,1 %― y la mayoría de los indicadores de las expectativas de inflación a largo plazo fluctuaron en torno al 2 %. Las perspectivas de inflación se vieron influenciadas por una actividad económica más débil de lo esperado. Según los indicadores coyunturales, la producción manufacturera seguía cayendo. Aunque la actividad de los servicios parecía haberse beneficiado de una temporada estival favorable, los indicadores coyunturales apuntaban a un retroceso en el tercer trimestre de 2024. Las empresas aumentaban sus inversiones a un ritmo lento, mientras que las exportaciones se reducían. Pese al incremento de las rentas, los hogares habían preferido consumir menos y ahorrar en el segundo trimestre de 2024, el último trimestre para el que se disponía de datos. En respuesta a esta dinámica y a sus consecuencias sobre la inflación, en octubre, el Consejo de Gobierno decidió moderar más el grado de restricción de la política monetaria y recortar 25 puntos básicos los tipos de interés oficiales del BCE, de modo que el tipo de la facilidad de depósito se situó en el 3,25 %.
Hacia el final del año, la evolución de la inflación era acorde con un retorno sostenido al objetivo
Conforme se acercó el final del año, la estimación de avance indicaba un ligero aumento de la inflación en noviembre, hasta el 2,3 %, desde el 2 % registrado en octubre. Este aumento se esperaba y obedeció a una caída previa de los precios de la energía, que dejó de reflejarse en las tasas interanuales. Aunque la tasa de variación de los precios de los alimentos y de los servicios se redujo, la inflación interna se mantenía elevada, debido a las presiones salariales y al hecho de que algunas ramas de los servicios aún se estaban ajustando con cierto retraso a la anterior escalada de la inflación. Por otra parte, la evolución de la inflación subyacente era acorde, en líneas generales, con un retorno sostenido de la inflación al objetivo. Según las proyecciones de los expertos del Eurosistema de diciembre, la inflación general se situaría, en promedio, en el 2,4 % en 2024, el 2,1 % en 2025, el 1,9 % en 2026 y el 2,1 % en 2027 cuando el régimen ampliado de comercio de derechos de emisión de la UE comenzaría a aplicarse.
La economía de la zona del euro había crecido un 0,4 % en el tercer trimestre de 2024, superando las expectativas, impulsada principalmente por la mejora del consumo y por la acumulación de existencias por parte de las empresas. Al mismo tiempo, la inversión se mantenía en niveles bajos, en un entorno de elevada incertidumbre. Los indicadores coyunturales disponibles para el cuarto trimestre de 2024 sugerían que el crecimiento estaba perdiendo impulso. Las encuestas indicaban que las manufacturas seguían contrayéndose y que el avance de los servicios se estaba desacelerando. El mercado de trabajo continuaba mostrando capacidad de resistencia. La tasa de paro de la zona del euro había sido del 6,3 % en octubre de 2024, sin variación con respecto a septiembre. Esta tasa llevaba disminuyendo de forma casi ininterrumpida desde septiembre de 2020 (8,6 %) y en noviembre se situó en el 6,2 %, su nivel más bajo desde la introducción del euro. Aunque las condiciones de financiación seguían siendo restrictivas, los recortes recientes de los tipos de interés iban reduciendo gradualmente el coste del crédito para las empresas y los hogares. De acuerdo con las proyecciones de diciembre, la economía se fortalecería con el tiempo, aunque a un ritmo menor de lo estimado anteriormente. Se esperaba que el aumento de los salarios reales reforzara el gasto de los hogares, mientras que el abaratamiento del crédito debería estimular el consumo y la inversión. Si no se producía una escalada de las tensiones comerciales, se consideraba probable que las exportaciones respaldaran la recuperación en un contexto de mejora de la demanda mundial.
El Consejo de Gobierno decidió moderar más el grado de restricción de la política monetaria en diciembre
En este contexto, en su reunión de diciembre, el Consejo de Gobierno decidió recortar 25 puntos básicos los tipos de interés oficiales del BCE y reafirmó su compromiso de asegurar que la inflación se estabilizara de forma sostenida en el objetivo del 2 % a medio plazo. En su comunicación ya no indicó que los tipos de interés oficiales se mantendrían en niveles suficientemente restrictivos durante el tiempo que fuera necesario. La reducción de los tipos oficiales del BCE situó el tipo de la facilidad de depósito en el 3,00 % y su descenso acumulado en 2024 fue de 100 puntos básicos (gráfico 2.1).
Gráfico 2.1
Modificaciones de los tipos de interés oficiales del BCE
(puntos porcentuales)

Fuente: BCE.
En diciembre se puso fin a las reinversiones en el marco del PEPP y a los reembolsos de las TLTRO III
En diciembre también se puso fin a dos medidas de política monetaria que desempeñaron un papel fundamental en el período de baja inflación y durante la pandemia: el PEPP y las TLTRO III. El Consejo de Gobierno puso fin a las reinversiones en el marco del PEPP al final de 2024. Desde enero de 2025, el Eurosistema ya no reinvierte el principal de los valores de la cartera del PEPP que van venciendo. Además, el 18 de diciembre, las entidades de crédito reembolsaron los importes restantes obtenidos en las TLTRO, con lo que esta parte del proceso de normalización del balance concluyó. Los tipos de interés oficiales siguen siendo el principal instrumento para asegurar un retorno sostenido de la inflación al objetivo.
2.2 Normalización del balance del Eurosistema
El balance del Eurosistema se redujo gradualmente a medida que las operaciones TLTRO III fueron venciendo y los valores mantenidos en las carteras de política monetaria disminuyeron
En 2024 continuó el proceso de normalización progresiva del balance del Eurosistema iniciado en 2022. Al cierre del año, el balance se había reducido hasta situarse en 6,4 billones de euros (desde 6,9 billones de euros al final de 2023). Esta reducción se debió a los reembolsos anticipados y al vencimiento de las operaciones TLTRO III, así como a la disminución de la cartera del APP y, en cierta medida, también de la del PEPP. Los valores de este último programa pasaron a reinvertirse parcialmente a partir de julio.
Al cierre de 2024, las partidas del activo relacionadas con la política monetaria del balance del Eurosistema ascendían a 4,3 billones de euros, 0,8 billones de euros menos que al final de 2023. Los préstamos concedidos a entidades de crédito de la zona del euro constituían el 1 % de los activos totales (frente al 6 % al final de 2023), y las tenencias de valores adquiridos con fines de política monetaria representaban el 67 % de los activos totales (frente al 68 % al cierre de 2023). El resto de los activos financieros del balance —principalmente activos en moneda extranjera, oro y carteras denominadas en euros no relacionadas con la política monetaria— registraron un aumento de 0,3 billones de euros.
En cuanto al pasivo, el importe total de las tenencias de reservas de las entidades de crédito y del recurso a la facilidad de depósito cayó hasta situarse en 3 billones de euros al cierre de 2024 (frente a 3,5 billones de euros al final de 2023) y representaba el 47 % de los pasivos totales (frente al 51 % al cierre de 2023). Los billetes en circulación se mantuvieron prácticamente sin variación en 1,6 billones de euros y suponían el 25 % de los pasivos totales (frente al 23 %).
Gráfico 2.2
Evolución del balance consolidado del Eurosistema

Fuente: BCE.
Notas: Las cifras positivas se refieren a los activos y las negativas a los pasivos. La línea que muestra el exceso de liquidez se presenta como una cifra positiva, aunque se refiere a la suma de las siguientes partidas del pasivo: saldos en cuenta corriente por encima de las exigencias de reservas y recurso a la facilidad de depósito.
Evolución de las carteras del APP y del PEPP
El proceso de finalización de las compras de activos se desarrolló sin contratiempos y fue bien absorbido por el mercado
El Eurosistema concluyó las compras netas de activos en el marco del PEPP el 1 de abril de 2022 y las del APP el 1 de julio de 2022. A partir de entonces siguió reinvirtiendo íntegramente el principal de los valores que fueron venciendo y que se habían adquirido al amparo de los programas con el fin de mantener unas condiciones de amplia liquidez y una orientación apropiada de la política monetaria. En el caso del APP, el Eurosistema puso fin a las reinversiones en julio de 2023. En cuanto al PEPP, en el primer semestre de 2024 se continuó reinvirtiendo íntegramente el principal de los valores que fueron venciendo y en el segundo la cartera se redujo en 7,5 mm de euros mensuales en promedio. Las reinversiones en el marco de este programa dejaron de realizarse al final de diciembre de 2024. Se espera que el tamaño de las carteras del APP y del PEPP disminuya a un ritmo mesurado y predecible, dado que el Eurosistema ya no reinvierte el principal de los valores que vayan venciendo.
Las tenencias de valores adquiridos en el marco del APP se redujeron de 3 billones de euros (a coste amortizado) al cierre de 2023 a 2,7 billones de euros al final de 2024. La cartera del programa de compras de valores públicos (PSPP, por sus siglas en inglés) ascendía a 2,1 billones de euros al cierre del año y constituía la mayor parte de las tenencias de valores del APP (el 79 % del total). El vencimiento medio ponderado de los valores del PSPP era de 6,86 años al final de 2024, con algunas variaciones entre jurisdicciones. El programa de compras de bonos de titulización de activos (ABSPP, por sus siglas en inglés) representaba menos del 1 % (7 mm de euros) del total de las tenencias de valores del APP al cierre del año, el tercer programa de adquisiciones de bonos garantizados (CBPP3, por sus siglas en inglés) el 9 % (253 mm de euros) y el programa de compras de bonos corporativos (CSPP, por sus siglas en inglés) el 11 % (288 mm de euros).
Al final de 2024, las tenencias de valores adquiridos en el marco del PEPP se cifraban en 1,6 billones de euros (a coste amortizado). Las tenencias de bonos garantizados representaban menos del 1 % (6 mm de euros) del total, las de activos del sector corporativo el 3 % (45 mm de euros) y las de valores públicos el 97 % (1,6 billones de euros)[15]. El vencimiento medio ponderado de las tenencias de valores del sector público del PEPP era de 7,14 años al final de 2024.
El Eurosistema continuó orientando sus compras restantes de bonos corporativos hacia emisores con mejor comportamiento climático. En 2024, el BCE publicó su segundo conjunto de datos financieros relacionados con el clima y amplió el alcance para incluir también las carteras de valores del sector público y de bonos garantizados mantenidas por el Eurosistema con fines de política monetaria (en el marco del APP y del PEPP), con una sección sobre las reservas exteriores del BCE (véase sección 11.5). También publicó un segundo conjunto de información climática sobre las carteras no relacionadas con la política monetaria, en concreto las carteras de los fondos de pensiones de los empleados del BCE y de los recursos propios de la institución.
La finalización gradual de las reinversiones se llevó a cabo sin contratiempos y fue bien absorbida por los mercados financieros[16].
Las amortizaciones de valores del sector privado en el marco del APP y del PEPP ascendieron a 74 mm de euros en 2024, mientras que las de valores del sector público en el contexto del PSPP y del PEPP fueron de 466 mm de euros en total. Las reinversiones de las carteras del PEPP se cifraron en 2,6 mm de euros para los valores del sector privado y en 157 mm de euros para los del sector público. Las reinversiones del principal de bonos corporativos y de bonos garantizados adquiridos en el marco del PEPP se basaron en carteras de referencia que reflejaban la capitalización de mercado del universo elegible de bonos corporativos y bonos garantizados, respectivamente. Habida cuenta del elevado importe de las amortizaciones y de su distribución desigual, las reinversiones de valores del sector público se ajustaron entre jurisdicciones y a lo largo del tiempo con el fin de asegurar una presencia en los mercados estable y equilibrada, considerando su impacto sobre la formación de precios y el correcto funcionamiento de los mercados. Este mecanismo de ajuste dio lugar a desviaciones temporales de las tenencias de valores en el marco del PEPP con respecto a la asignación establecida de acuerdo con la clave de capital del Eurosistema, aunque la mayor parte de ellas se habían revertido al final del período de ajuste, que es el año natural en el que se efectúan las amortizaciones[17].
Los activos adquiridos en el PSPP, el CSPP, el CBPP3 y el PEPP siguieron estando disponibles para operaciones de préstamo de valores, con el fin de respaldar la liquidez en los mercados de bonos y de cesiones temporales (repos). En 2024, la disponibilidad de activos de garantía mejoró de forma significativa en comparación con años anteriores, lo que quedó reflejado en la disminución de los volúmenes prestados.
Evolución de las operaciones de financiación del Eurosistema
Al cierre de 2024, el saldo vivo de las operaciones de financiación del Eurosistema ascendía a 34 mm de euros, lo que supone una reducción de 376 mm de euros con respecto al final de 2023. Esta variación refleja fundamentalmente la finalización de la serie de operaciones TLTRO III, cifrándose los reembolsos voluntarios efectuados y las operaciones que fueron venciendo en 392 mm de euros. De esta manera, el vencimiento medio ponderado de las operaciones de financiación vivas del Eurosistema pasó de 5,2 meses al final de 2023 a 1,3 meses al cierre de 2024.
Evolución de los activos negociables admitidos como garantía y de los activos de garantía movilizados
El valor nominal de los activos negociables admitidos como garantía en las operaciones de financiación del Eurosistema aumentó en 526 mm de euros en 2024 y alcanzó los 19,3 billones de euros al final del año (gráfico 2.3). Los valores emitidos por las administraciones centrales continuaron siendo la categoría de activo más importante (10,4 billones de euros). Otras categorías importantes de activos incluían bonos bancarios no garantizados (2,2 billones de euros), bonos corporativos (2 billones de euros) y bonos bancarios garantizados (1,9 billones de euros). Los valores emitidos por las administraciones regionales (644 mm de euros), los bonos de titulización (617 mm de euros) y otros activos negociables (1,6 billones de euros) representaron una proporción menor del conjunto de activos admisibles.
Gráfico 2.3
Evolución de los activos negociables admitidos como garantía

Fuente: BCE.
Notas: Los valores de los activos se expresan en términos nominales. Se muestran las medias de los datos de fin de mes para cada período.
En 2024, el importe de los activos de garantía movilizados descendió 231 mm de euros y se situó en 1,5 billones de euros (gráfico 2.4). Este descenso se corresponde con el 60 % de la reducción neta del saldo vivo de las operaciones de financiación del Eurosistema a lo largo del año. Más de la mitad de la disminución de los activos de garantía movilizados se produjo tras el vencimiento de la operación TLTRO III en marzo de 2024, que supuso la desmovilización de activos de garantía por un importe superior a 135 mm de euros. Durante el resto del año, el importe total de los activos de garantía movilizados se mantuvo relativamente estable. Si se considera la evolución por categorías de activos, la reducción más acusada se observó en los préstamos y créditos, seguidos de los bonos de titulización de activos, los bonos bancarios garantizados y los bonos corporativos.
Gráfico 2.4
Evolución de los activos de garantía movilizados
(mm de euros)

Fuente: BCE.
En el caso de los activos de garantía se muestran las medias de los datos de fin de mes para cada período, y los importes son los obtenidos después de la valoración y de la aplicación de los recortes de valoración. Para el crédito vivo se utilizan datos diarios.
Revisión de los marcos de préstamos adicionales y de las categorías de activos de garantía relacionadas
En noviembre de 2024, el BCE anunció cambios en el marco de activos de garantía del Eurosistema que afectaban a los «préstamos adicionales» (additional credit claims) y a las categorías de activos de garantía relacionadas[18]. El objetivo de estos cambios es promover una mayor armonización, flexibilidad y eficiencia en la gestión de riesgos de este marco, preservando al mismo tiempo su amplitud. En consonancia con estos objetivos, el Consejo de Gobierno decidió integrar determinadas medidas temporales en el marco general de activos de garantía y, de forma paralela —también en vista del vencimiento de las últimas TLTRO y de la consiguiente disminución de las necesidades agregadas de activos de garantía—, poner fin a las medidas temporales relativas a dichos activos que ya no fueran necesarias[19].
Las medidas temporales que se incorporarán al marco general incluyen la aceptación como garantía de las siguientes categorías de activos: i) bonos de titulización de activos cuya segunda mejor calificación crediticia corresponda a la categoría 3 en la escala de calificación armonizada del Eurosistema y cumplan los criterios de admisión establecidos en la Orientación sobre medidas temporales relativas a los activos de garantía (el «marco temporal»)[20], y ii) activos negociables denominados en dólares estadounidenses, libras esterlinas y yenes japoneses. Además, los sistemas estadísticos internos de evaluación del crédito de los bancos centrales nacionales se aceptarán como una fuente adicional de evaluación del crédito (véase sección 2.3).El BCE seguirá retirando las medidas temporales de flexibilización de los criterios de admisión de los activos de garantía relacionadas con la crisis que ya no sean necesarias, conforme a las decisiones anteriores adoptadas el 24 de marzo de 2022 y el 30 de noviembre de 2023. Dejarán de aceptarse las siguientes categorías de deudores y de activos que se admitieron con arreglo al marco temporal: i) personas físicas como deudores admisibles, y carteras de préstamos respaldados por activos inmobiliarios como categorías de activos admisibles, dentro del marco de préstamos adicionales, ii) préstamos individuales con una calificación inferior a la categoría 3 de calidad crediticia, y iii) préstamos en moneda extranjera denominados en dólares estadounidenses, libras esterlinas y yenes japoneses. Asimismo, el BCE retirará gradualmente las medidas de flexibilización temporal de determinados requisitos técnicos para la aceptación de préstamos adicionales, como los aplicados a los préstamos y créditos que se beneficiaron parcialmente de avales públicos relacionados con la pandemia de COVID-19. Además, dejará de aceptar instrumentos de renta fija con garantía hipotecaria emitidos al por menor e instrumentos de renta fija no negociables garantizados por préstamos admitidos, que se han estado aceptando con arreglo a la Orientación relativa a la Documentación General sobre la aplicación del marco de la política monetaria del Eurosistema[21][22].
Además de adoptar estas decisiones, el Consejo de Gobierno encomendó a los comités pertinentes del Eurosistema la realización de los trabajos preparatorios con miras a la integración futura de carteras de préstamos a sociedades no financieras en el marco general. Estos trabajos incluirán un marco de control de riesgos adecuado y todos los requisitos técnicos necesarios.
Estos cambios asegurarán el mantenimiento de un marco de activos de garantía amplio para las operaciones de financiación, que seguirán llevándose a cabo mediante procedimientos de subasta a tipo de interés fijo con adjudicación plena, y contribuirán a asegurar que, en el futuro, la aplicación de la política monetaria del BCE continúa guiándose por los principios de eficacia, solidez, flexibilidad y eficiencia, en línea con el marco operativo revisado para la aplicación de la política monetaria.
2.3 Gestión de los riesgos financieros de los instrumentos de política monetaria
El Eurosistema gestiona de forma continuada los riesgos financieros inherentes a la ejecución de sus operaciones de política monetaria. Su función de gestión de riesgos trata de lograr la eficiencia en términos de riesgo, es decir, alcanzar los objetivos de política monetaria con el menor riesgo posible[23].
Dado que los tipos interés oficiales del BCE no se modificaron en la primera mitad de 2024, los gastos por intereses del Eurosistema continuaron siendo elevados, y los ingresos por intereses reducidos, lo que generó pérdidas en la mayoría de los bancos centrales del Eurosistema
El BCE mantuvo sin variación los tipos de interés oficiales en la primera parte de 2024 con el fin de asegurar el pronto retorno de la inflación al objetivo del 2 % a medio plazo (véase sección 2.1). En consecuencia, el coste de los pasivos de los balances de los bancos centrales del Eurosistema siguió siendo elevado, mientras que los ingresos generados por las carteras de valores del APP y el PEPP y por las TLTRO III continuaron siendo reducidos. Esta diferencia hizo que los ingresos netos por intereses de la mayoría de los bancos centrales del Eurosistema fueran negativos. Algunos bancos centrales pueden compensar los ingresos netos por intereses negativos con los colchones financieros constituidos en años anteriores. Las pérdidas que no sea posible compensar pueden registrarse en el balance del banco central respectivo. Esas pérdidas se compensarán posteriormente con beneficios futuros sin que afecten a la capacidad del Eurosistema para cumplir su mandato de mantener la estabilidad de precios y operar con eficacia. Con el tiempo, se espera que la rentabilidad del Eurosistema mejore, dado que la diferencia entre los tipos de interés de los activos y los pasivos se reducirá[24]. De acuerdo con los principios establecidos en el contexto de los cambios en el marco operativo para la aplicación de la política monetaria anunciados por el Consejo de Gobierno en marzo de 2024 (véase recuadro 2), a largo plazo, el marco preservará la solidez financiera del balance del Eurosistema y respaldará la independencia de los bancos centrales.
La principal modificación del marco de gestión de riesgos del Eurosistema en 2024 fue una mayor diversificación de sus sistemas de evaluación del crédito utilizados para los activos de garantía. Los riesgos del APP y del PEPP continuaron gestionándose con arreglo a los marcos de control de riesgos establecidos, mientras que se puso fin a las reinversiones de forma gradual.
Diversificación de los sistemas de evaluación del crédito utilizados para valorar los activos de garantía
El Eurosistema usa diferentes sistemas para evaluar la calidad crediticia de los activos que acepta como garantía en las operaciones de política monetaria
En 2024 se integró un sistema adicional de evaluación del crédito en el marco de evaluación del crédito del Eurosistema (ECAF, por sus siglas en inglés). El ECAF es una de las herramientas que se utilizan para mitigar el riesgo de crédito de los activos empleados en las operaciones de política monetaria. En él se definen los procedimientos, las normas y las técnicas que aseguran el cumplimiento del requisito del Eurosistema de que todos los activos admitidos reúnan criterios de alta calidad crediticia. El ECAF se basa en los sistemas de evaluación del crédito de una de las tres fuentes siguientes: las agencias externas de calificación crediticia (denominadas instituciones externas de evaluación del crédito o ECAI, por sus siglas en inglés), los sistemas internos de evaluación del crédito de los bancos centrales nacionales (BCN) y los sistemas basados en calificaciones internas de las entidades de contrapartida.
Las calificaciones emitidas por Scope Ratings GmbH actualmente se utilizan con fines de política monetaria
Tras la aceptación de Scope Ratings GmbH en 2023 como quinta ECAI, el proceso de integración de sus calificaciones en la infraestructura tecnológica del Eurosistema se concluyó en 2024. El 16 de diciembre de 2024, el Eurosistema comenzó a utilizar las calificaciones emitidas por esta agencia para evaluar la calidad crediticia de los activos negociables que se aportan como garantía en las operaciones de política monetaria. Actualmente, estas calificaciones se emplean junto con las otorgadas por las ECAI que ya estaban aceptadas (Morningstar DBRS, Fitch Ratings, Moody’s y S&P Global Ratings) e incluyen calificaciones de los bonos de titulización de activos emitidas por Scope Ratings GmbH que en 2024 se determinó que cumplían los criterios de admisión del Eurosistema.
Asimismo, el Eurosistema acordó incorporar los sistemas estadísticos internos de evaluación del crédito de los BCN en el marco general de activos de garantía de la política monetaria
El Consejo de Gobierno también decidió incorporar los sistemas estadísticos internos de evaluación del crédito (S-ICAS, por sus siglas en inglés) de los BCN del Eurosistema en el marco general de activos de garantía de la política monetaria. En respuesta a la pandemia de COVID-19, en abril de 2020, el Consejo de Gobierno decidió ampliar el alcance de los sistemas de evaluación del crédito que podían emplearse en los marcos de préstamos adicionales de los BCN, incluyendo sus propios enfoques conservadores de evaluación del crédito. Posteriormente, algunos BCN empezaron a utilizar los S-ICAS, que evalúan la solvencia de deudores/avalistas de préstamos adicionales a sociedades no financieras con arreglo al marco temporal de activos de garantía (véase sección 2.2.4) empleando principalmente metodologías cuantitativas, además de sus sistemas internos de evaluación del crédito habituales, que también requieren del juicio experto. El 19 de diciembre de 2024, el Consejo de Gobierno aprobó un marco armonizado para los S-ICAS para que estos sistemas se acepten como fuente adicional de evaluación crediticia en el marco general[25]. Todos los S-ICAS existentes deben asegurarse de cumplir el marco armonizado. Estos sistemas contribuyen a asegurar un conjunto amplio de activos de garantía, que incluyen los consistentes en préstamos bancarios al sector empresarial, en particular a las pequeñas y medianas empresas.
Gestión de los riesgos de las compras de activos en el marco del APP y el PEPP
Pese a la disminución de su tamaño, los programas de compras de activos aún comportan riesgos, que se gestionan con arreglo a marcos específicos de control de riesgos
En 2024 se continuó con las reinversiones del principal de los valores que fueron venciendo en el marco del PEPP, primero íntegramente y después de manera parcial, mientras que el principal de los valores que vencieron en el APP dejó de reinvertirse a mediados de 2023 (véase sección 2.2.1). Estos dos programas, que se introdujeron con fines de política monetaria, están integrados por distintas categorías de activos, en concreto títulos de deuda del sector público y del sector privado, así como bonos de titulización de activos y bonos garantizados. Los riesgos financieros de estos programas se gestionan con arreglo a marcos específicos de control de riesgos financieros que tienen en cuenta los objetivos de política monetaria de cada programa y los perfiles de riesgo de las diferentes categorías de activos. Estos marcos se componen de criterios de admisión, sistemas de evaluación del riesgo de crédito y procedimientos de diligencia debida, sistemas de valoración, carteras de referencia y límites. Al igual que durante la fase de compras netas de activos, seguirán aplicándose a las tenencias de valores mientras permanezcan en el balance del Eurosistema. Los principales elementos de estos marcos, que se resumen en el cuadro 2.1 de la sección 2.3 del Informe Anual de 2022 del BCE, continúan siendo válidos.
Recuadro 2
La revisión del marco operativo en 2024
El marco operativo del BCE es el conjunto de instrumentos y procedimientos, incluidas las operaciones de mercado y las facilidades permanentes, mediante el que se implementa la orientación de la política monetaria del Consejo de Gobierno. El objetivo de este marco es guiar los tipos de interés del mercado monetario a corto plazo hacia niveles alineados lo más posible con los tipos de interés oficiales fijados por el Consejo de Gobierno, con el fin de transmitir la orientación deseada de la política monetaria.
En diciembre de 2022, el BCE anunció la revisión del marco operativo con el objeto de asegurar que continuara siendo adecuado en un contexto de reducción gradual de la liquidez como consecuencia del proceso de normalización del balance del Eurosistema. El volumen actual de activos de política monetaria proporciona al sistema bancario elevados niveles de exceso de liquidez (gráfico A).
Gráfico A
Evolución del balance del Eurosistema
(billones de euros)

Fuente: BCE.
Notas: OFPML: operaciones de financiación a plazo más largo; TLTRO: operaciones de financiación a plazo más largo con objetivo específico; OPF: operaciones principales de financiación.
El 13 de marzo de 2024, el Consejo de Gobierno acordó una serie de principios que guiarán la implementación de la política monetaria en el futuro. Estos principios se refieren a la eficacia y la eficiencia del marco operativo en la implementación de la orientación deseada de la política monetaria, a su solidez ante diferentes configuraciones de la política monetaria y ante distintos entornos financieros y de liquidez, a su flexibilidad para satisfacer las necesidades del amplio y diverso sector bancario del área del euro, y a su coherencia con el funcionamiento fluido y ordenado de los mercados (principio de economía de mercado abierto). Asimismo, en la medida en que las diferentes configuraciones del marco operativo sean igualmente adecuadas para asegurar la implementación eficaz de la orientación de la política monetaria, el marco facilitará la consecución por el BCE de su objetivo secundario de apoyar las políticas económicas generales de la Unión Europea ―en particular la transición a una economía verde―, sin perjuicio de su objetivo primordial de estabilidad de precios.
Conforme a estos principios, el Consejo de Gobierno acordó el siguiente conjunto de parámetros y características fundamentales para su marco operativo:
- El Consejo de Gobierno continuará guiando la orientación de la política monetaria mediante el tipo de interés de la facilidad de depósito.
- El Eurosistema proporcionará liquidez utilizando una gran variedad de instrumentos.
- Las operaciones principales de financiación continuarán ejecutándose mediante procedimientos de subasta a tipo de interés fijo con adjudicación plena. Están destinadas a desempeñar un papel fundamental para atender las necesidades de liquidez de las entidades de crédito y su uso por las entidades de contrapartida es fundamental para una implementación fluida de la política monetaria.
- Las operaciones de financiación a plazo más largo, a tres meses, también continuarán ejecutándose mediante procedimientos de subasta a tipo de interés fijo con adjudicación plena.
- Con efectos a partir del 18 de septiembre de 2024, el tipo interés de las operaciones principales de financiación se ajustará de forma que el diferencial entre ese tipo y el tipo de la facilidad de depósito se sitúe en 15 puntos básicos. El tipo de interés de la facilidad marginal de crédito se ajustará de modo que el diferencial entre ese tipo y el tipo aplicable a las operaciones principales de financiación se mantenga sin cambios en 25 puntos básicos.
- En una fase posterior se introducirán nuevas operaciones estructurales de financiación a plazo más largo y una cartera estructural de valores, una vez que el balance del Eurosistema comience a crecer de forma duradera, teniendo en cuenta las tenencias de bonos preexistentes.
- El coeficiente de reservas para determinar las exigencias de reservas mínimas de las entidades de crédito se mantiene sin cambios en el 1 %. La remuneración de las reservas mínimas permanece sin variación en el 0 %.
- Se mantendrá un marco de activos de garantía amplio para las operaciones de financiación.
Sobre la base de la experiencia adquirida, el Consejo de Gobierno revisará los parámetros fundamentales del marco operativo en 2026, y está preparado para ajustar antes el diseño y los parámetros de dicho marco, si fuera necesario, con el fin de asegurar que la implementación de la política monetaria siga adecuándose a los principios establecidos.
3 El sector financiero europeo: vulnerabilidades elevadas para la estabilidad financiera en un entorno de volatilidad
Los riesgos y las vulnerabilidades para la estabilidad financiera de la zona del euro continuaron siendo elevados en 2024, y el foco de preocupación se trasladó de la persistencia de una inflación alta al aumento de los riesgos a la baja para el crecimiento. Además, los riesgos geopolíticos y la incertidumbre sobre las políticas económicas se incrementaron, lo que acrecentó la probabilidad de que se produjeran eventos de cola. En este contexto, las autoridades nacionales trataron de asegurar suficiente espacio a la política macroprudencial para contrarrestar la posible materialización de riesgos. La acumulación asociada de colchones de capital liberables se vio favorecida por la elevada rentabilidad bancaria, lo que ayudó a las entidades a mantener su capacidad de resistencia gracias a los avances que habían realizado en años anteriores y a la actividad supervisora continuada. Se avanzó significativamente en la finalización de un marco regulatorio sólido para el sector financiero —en particular, la transposición de las reformas finales de Basilea III al Derecho de la UE para las entidades de crédito, así como los trabajos preparatorios sobre la intermediación financiera no bancaria (IFNB) y la unión de los mercados de capitales—.
3.1 El entorno de estabilidad financiera en 2024
Las vulnerabilidades para la estabilidad financiera de la zona del euro continuaron siendo elevadas en 2024
Las vulnerabilidades para la estabilidad financiera de la zona del euro siguieron siendo elevadas en 2024, y los principales riesgos se trasladaron de la preocupación por la persistencia de una inflación alta a los temores sobre el crecimiento. Al moderarse la tasa de variación de los precios de consumo, se produjo un giro en el ciclo de tipos de interés en la zona del euro y en otras de las principales economías avanzadas. La disminución de los tipos de interés de referencia ayudó a reducir los costes totales de la financiación, aunque continuaron existiendo algunos focos de vulnerabilidad asociados a la limitada capacidad de pago de la deuda de algunos prestatarios. Las vulnerabilidades soberanas aumentaron en algunos países de la zona del euro en un contexto de retos fiscales y de preocupación por la influencia de la baja productividad en la debilidad del crecimiento económico. Al mismo tiempo, los riesgos geopolíticos y la incertidumbre sobre las políticas económicas también se incrementaron. Pese a ello y a algunos breves episodios de volatilidad, los mercados financieros y el sistema bancario mantuvieron su solidez. Sin embargo, estos episodios de volatilidad pusieron de relieve las vulnerabilidades del sistema financiero ante dinámicas adversas. Por consiguiente, las perspectivas para la estabilidad financiera de la zona del euro siguen siendo frágiles.
Las vulnerabilidades soberanas aumentaron en un entorno de mayor incertidumbre geopolítica, de debilidad de los fundamentos fiscales y de lento crecimiento potencial
Aunque las vulnerabilidades soberanas siguieron siendo contenidas en el conjunto de la zona del euro, en algunos países se incrementaron en 2024. La sostenibilidad de la deuda soberana suscitó preocupación a causa de la incertidumbre geopolítica y sobre las políticas, así como de los elevados niveles de deuda soberana y de déficit en algunos países, en un contexto de crecimiento tendencial lento. Ello dio lugar a una ampliación de los diferenciales soberanos de algunos países —sobre todo de Francia, después de las elecciones celebradas en el verano y de un período de incertidumbre política—, que culminó en rebajas de la calificación crediticia hacia el final del año. Dada la preocupación por el crecimiento y la productividad de la zona del euro a medio plazo, los altos costes de financiación y la debilidad de los fundamentos fiscales podrían reducir el espacio fiscal de los países para apoyar a sus economías frente a futuras perturbaciones adversas. Además, el aumento de los rendimientos soberanos de referencia podría repercutir en el conjunto de la economía.
Los costes del servicio de la deuda siguieron siendo elevados para las empresas y los hogares vulnerables
En conjunto, el sector empresarial de la zona del euro mantuvo su fortaleza en 2024. Los elevados tipos de interés continuaron lastrando la rentabilidad, lo que se tradujo en un aumento significativo de la morosidad en algunos sectores y países. No obstante, las tasas de morosidad siguieron siendo bajas. Parece que la capacidad de las pequeñas y medianas empresas (pymes) para atender el pago de su deuda fue particularmente vulnerable a la desaceleración de la actividad económica y a los altos costes de financiación. Al mismo tiempo, el sector inmobiliario comercial sufrió pérdidas adicionales durante el año como consecuencia de los retos de carácter cíclico y estructural. Sin embargo, el tamaño relativamente modesto de este sector mitigó cualquier impacto sistémico en el sector bancario.
Las vulnerabilidades del sector hogares de la zona del euro disminuyeron debido a los menores niveles de deuda, a la resiliencia de los mercados de trabajo, al fuerte crecimiento de las rentas y a las elevadas tasas de ahorro. Sin embargo, la capacidad de servicio de la deuda de los hogares con rentas bajas y de aquellos con hipotecas a tipo variable se vio comprometida y podría reducirse aún más si el crecimiento se ralentiza y los mercados laborales se debilitan. Los mercados inmobiliarios residenciales se mantuvieron estables, pero persistieron los riesgos en aquellos que registraban elevados niveles de deuda hipotecaria y signos de sobrevaloración.
Los mercados financieros estuvieron expuestos a ajustes repentinos y pronunciados, especialmente en los mercados de renta variable
Los mercados financieros de la zona del euro y mundiales experimentaron varios episodios de volatilidad en 2024, impulsados por el aumento de la incertidumbre macrofinanciera y geopolítica. Aunque los efectos de desbordamiento a la zona del euro fueron limitados, estos episodios pusieron de relieve las vulnerabilidades subyacentes en los mercados financieros. Los niveles históricamente bajos de las primas de riesgo bursátiles y los reducidos diferenciales de los bonos corporativos indican que los inversores podrían haber estado infravalorando la probabilidad de escenarios adversos. Además, la elevada concentración de la capitalización bursátil en unas cuantas empresas tecnológicas estadounidenses suscitó preocupación en torno a una burbuja de precios de los activos relacionados con la IA e incrementó la vulnerabilidad de las carteras a correcciones repentinas de los precios y a dinámicas de amplificación (véase recuadro 3). Con la mayor integración de los mercados internacionales de renta variable, la percepción de riesgos de los mercados era muy sensible a sorpresas negativas, lo que aumentó la posibilidad de correcciones bruscas en los mercados y de efectos de desbordamiento adversos a escala mundial.
La solidez de los colchones de capital y de liquidez ayudó a las entidades de crédito a absorber pérdidas crediticias
Las entidades de crédito de la zona del euro registraron ratios de capital de nivel 1 ordinario (CET1) de alrededor del 15 % desde principios de 2023, lo que las situó en una buena posición para preservar su capacidad de resistencia durante los múltiples períodos de incertidumbre vividos en 2023 y 2024. Aunque las carteras de pymes y de inmuebles comerciales sufrieron pérdidas en algunos países de la zona del euro en 2024, las ratios de préstamos dudosos (NPL, por sus siglas en inglés) se mantuvieron próximas a sus mínimos históricos, y los sólidos colchones de capital y de liquidez de las entidades les permitieron absorber pérdidas holgadamente. La rentabilidad de las entidades de crédito también siguió mostrando un fuerte crecimiento, impulsado, entre otros factores, por los elevados márgenes de intermediación y los menores gastos de explotación.
Las vulnerabilidades del sector de IFNB podían amplificar las dinámicas de mercado adversas
En 2024, el sector de IFNB mantuvo su capacidad de resistencia frente a episodios de volatilidad en los mercados y continuó respaldando la financiación de mercado en la zona del euro en todas las categorías de riesgo de crédito. Sin embargo, las vulnerabilidades relacionadas con la concentración de exposiciones, los desajustes de liquidez y el elevado apalancamiento en algunas partes del sector de fondos de inversión siguieron siendo motivo de preocupación. Existía la posibilidad de que se produjeran variaciones bruscas de las valoraciones que dieran lugar a salidas repentinas de fondos y a ajustes de los márgenes, amplificando las dinámicas de mercado adversas y provocando efectos de desbordamiento a otras partes del sistema financiero. Este riesgo continuó siendo particularmente relevante dado que las carteras no bancarias estaban sujetas a un mayor riesgo de crédito en un entorno de incertidumbre geopolítica y de debilitamiento del crecimiento económico.
Varias cuestiones estructurales, incluidos los riesgos climáticos y las debilidades en materia de ciberseguridad, siguieron afectando a la estabilidad financiera y podían amplificar las vulnerabilidades existentes. Además, el creciente nivel de fragmentación geopolítica suscitó preocupación por la posible reversión de la integración económica, comercial y financiera mundial conseguida hasta el momento. Estas vulnerabilidades estructurales requieren prudencia, ya que aumentan la posibilidad de una mayor volatilidad, sobre todo si se materializaran durante un período de debilidad cíclica y crearan espirales adversas.
3.2 La política macroprudencial: asegurar la capacidad de resistencia en tiempos de dificultades e incertidumbre
En 2024, el BCE no identificó la necesidad de aplicar medidas de capital más rigurosas
El BCE tiene la tarea de evaluar las medidas de capital macroprudenciales propuestas por las autoridades nacionales para las entidades de crédito de los países que participan en el Mecanismo Único de Supervisión (MUS). Es importante señalar que posee, asimismo, la facultad de aplicar medidas de capital más rigurosas en caso necesario. En su estrecho seguimiento de las orientaciones nacionales de política macroprudencial llevado a cabo en 2024, el BCE no identificó esa necesidad, dado que varios países ya habían aplicado nuevas medidas macroprudenciales para reforzar la capacidad de resistencia de sus sistemas bancarios frente a las vulnerabilidades acumuladas y los riesgos a la baja.
Preservar la capacidad de resistencia del sistema financiero continúa siendo esencial
El Consejo de Gobierno instó a las autoridades nacionales a preservar la capacidad de resistencia de las entidades de crédito y anunció un marco revisado para OEIS
En junio de 2024, el Consejo de Gobierno emitió un comunicado en el que instaba a las autoridades macroprudenciales nacionales a mantener los requerimientos de colchones de capital actuales a fin de preservar la resiliencia de las entidades de crédito y garantizar la disponibilidad de los colchones en caso de deterioro de las condiciones del sector bancario o macrofinancieras. En el comunicado también se señalaba que en algunos países seguía siendo deseable que los colchones de capital liberables aumentaran en mayor medida para hacer frente a las vulnerabilidades y reforzar el espacio macroprudencial, mientras que las condiciones imperantes en el sector bancario limitaban los riesgos de prociclicidad. Asimismo, el Consejo de Gobierno instó a las autoridades nacionales a que mantuvieran las medidas vigentes basadas en la capacidad de pago de los prestatarios para asegurar unos criterios rigurosos y sostenibles de concesión de préstamos. En diciembre de 2024, el BCE revisó su marco para evaluar los colchones de capital de otras entidades de importancia sistémica (OEIS) con el fin de tener en cuenta la importancia sistémica de estas entidades para la unión bancaria en su conjunto. La metodología revisada para evaluar los colchones mínimos deberá estar plenamente implantada el 1 de enero de 2028[26].
A finales de 2024, todos los países de la unión bancaria habían implantado alguna forma de colchón de capital liberable
En este contexto, las autoridades nacionales siguieron endureciendo la política macroprudencial en 2024 para aumentar la resiliencia de las entidades de crédito, y todos los países de la unión bancaria habían implantado alguna forma de requerimiento de colchón liberable a finales del año. Esto se vio facilitado por la rentabilidad y el margen de capital de las entidades que, en promedio, se mantuvieron en niveles altos. En 2024, tres países de la zona del euro anunciaron la introducción del colchón de capital anticíclico, mientras que un país comunicó la introducción del colchón contra riesgos sistémicos[27]. Estas medidas reflejan los esfuerzos continuados de muchas autoridades nacionales por reforzar el espacio macroprudencial en forma de colchones de capital liberables, aun cuando las condiciones de los riesgos cíclicos en sus países no apuntan a un entorno de riesgos elevados[28]. Además, algunos países ajustaron la calibración del colchón de OEIS, con impacto en algunas entidades concretas, tras la plena aplicación de la metodología sobre los colchones mínimos de las OEIS el 1 de enero de 2024. Por último, además de las medidas basadas en el capital, dos países anunciaron la aplicación de medidas basadas en la capacidad de pago de los prestatarios, lo que elevó a 17 el número de países con medidas de este tipo[29].
En 2024, el BCE comunicó sus análisis y sus puntos de vista sobre temas de política macroprudencial. En los capítulos sobre política macroprudencial de las ediciones de mayo y de noviembre de su informe Financial Stability Review subrayó su firme apoyo a las iniciativas regulatorias dirigidas a crear espacio macroprudencial y a mejorar la eficacia y la efectividad del marco macroprudencial de la UE para las entidades de crédito[30]. También continuó analizando las implicaciones para la estabilidad financiera de las iniciativas legislativas para imponer impuestos extraordinarios a las entidades de crédito y manifestó su preocupación en tres dictámenes[31]. Por último, el BCE reiteró la importancia de mejorar el marco macroprudencial para las entidades no bancarias, con el fin de ayudar a asegurar que sean una fuente estable de financiación a lo largo del ciclo financiero (véase sección 3.4).
Cooperación con la Junta Europea de Riesgo Sistémico
La JERS es responsable de la vigilancia macroprudencial del sistema financiero de la UE
El BCE alberga el secretariado de la Junta Europea de Riesgo Sistémico (JERS) y le proporciona apoyo analítico, estadístico, logístico y administrativo[32]. Además de este apoyo habitual, en 2024 el BCE continuó realizando importantes contribuciones a los trabajos de la JERS. En particular, copresidió el Grupo de Trabajo sobre Instrumentos (IWG, por sus siglas en inglés), el Grupo de Trabajo de Análisis (AWG, por sus siglas en inglés) y el Grupo de Trabajo sobre Pruebas de Resistencia (Task Force on Stress Testing) de la JERS. Las competencias analíticas y de modelización del BCE fueron de especial ayuda para este último grupo de trabajo a la hora de elaborar el escenario adverso para las pruebas de resistencia a escala de la UE de 2025 coordinadas por la Autoridad Bancaria Europea (EBA, por sus siglas en inglés) y de realizar la primera prueba de resistencia de liquidez a todo el sistema financiero de la UE. A este respecto, el BCE también copresidió un equipo que elaboró un marco de seguimiento del riesgo de liquidez sistémica.
Un informe conjunto del BCE y la JERS muestra un uso más activo del colchón de capital anticíclico
Además, el BCE elaboró, en colaboración con la JERS, un informe sobre el mayor uso del colchón de capital anticíclico por parte de los Estados miembros para aumentar la capacidad de resistencia en una fase temprana del ciclo financiero y, de este modo, mitigar el impacto de las restricciones de crédito[33]. También siguió apoyando los trabajos de la JERS sobre una amplia gama de temas, en particular: i) las herramientas macroprudenciales para la ciberresiliencia[34]; ii) el seguimiento de las vulnerabilidades relacionadas con el sector de IFNB[35]; iii) las vulnerabilidades del sector inmobiliario y la labor de seguimiento relacionada con la recomendación de la JERS de 2023 sobre las vulnerabilidades del sector inmobiliario comercial[36],[37]; iv) las implicaciones macroprudenciales de las variaciones de los tipos de interés, y v) las implicaciones para la política macroprudencial de la elevada incertidumbre y de los riesgos emergentes (especialmente en relación con los desarrollos geopolíticos, climáticos y tecnológicos). Por último, el grupo de alto nivel sobre la revisión del Reglamento de la JERS llevó a cabo una segunda revisión del Reglamento de la JERS[38]. El grupo realizó propuestas para mejorar la capacidad de vigilancia macroprudencial de la institución, en particular a través de una evaluación más holística de los riesgos sistémicos que tenga en cuenta las interconexiones, las interdependencias y los efectos de desbordamiento[39]. Puede consultarse más información en el sitio web de la JERS y en sus Informes Anuales.
3.3 Actividades microprudenciales para garantizar la seguridad y la solidez de las entidades de crédito
Las entidades de crédito siguieron mostrando capacidad de resistencia gracias a los avances realizados en años anteriores y a la actividad supervisora continuada
Las entidades de crédito europeas siguieron mostrando capacidad de resistencia a lo largo de 2024. Los bancos supervisados directamente por el BCE mantuvieron posiciones de capital y de liquidez sólidas. En el tercer trimestre, la ratio de CET1 agregada se situó en el 15,72 %, y las condiciones de liquidez continuaron siendo favorables en general. La ratio de préstamos dudosos se situó en torno al 2,3 % en ese trimestre, un nivel próximo a su mínimo histórico. La rentabilidad bancaria siguió siendo elevada, impulsada principalmente por las subidas de los tipos de interés.
Los riesgos prudenciales fueron provocados en gran medida por un entorno de riesgos externos cada vez más volátil y complejo
No obstante, las entidades de crédito tuvieron que hacer frente a un período prolongado de tensiones geopolíticas constantes, caracterizado por una incertidumbre elevada y un aumento de la volatilidad, así como a un difícil entorno de riesgos (incluidos riesgos climáticos y medioambientales). En consecuencia, el trabajo de supervisión del BCE siguió centrándose en la eficacia de las funciones de control interno y de los procedimientos de gobernanza, y en asegurar que las entidades supervisadas tuvieran capital suficiente para hacer frente a escenarios adversos creíbles.
La ciberresiliencia formó parte de las prioridades supervisoras para el período 2024-2026
En este contexto, el proceso de revisión y evaluación supervisora (PRES) de 2024 no dio lugar a cambios importantes en las puntuaciones de las entidades ni en los requerimientos de Pilar 2 totales. Los requerimientos totales de capital y recomendación de Pilar 2 aumentaron ligeramente, hasta el 15,6 % de los activos ponderados por riesgo (15,5 % en 2023)[40].
En 2024, la Supervisión Bancaria del BCE continuó prestando especial atención a la gestión del riesgo de crédito, abordando las deficiencias de la aplicación de la NIIF 9 y llevando a cabo revisiones específicas de las carteras inmobiliarias y de pymes para mitigar el deterioro de la calidad de los activos. Las deficiencias en la agregación de datos sobre riesgos y presentación de informes de riesgos, que dificultan la adopción de decisiones eficaces, requirieron mayores esfuerzos supervisores para mejorar los sistemas de información de las entidades de crédito y abordar las vulnerabilidades en materia de seguridad tecnológica. El riesgo operacional y el riesgo de TIC siguieron siendo motivo de preocupación, lo que pone de relieve la necesidad de acelerar el proceso de digitalización y de reforzar la ciberresiliencia. El BCE llevó a cabo una prueba de resistencia sobre ciberresiliencia, que mostró que las entidades disponían de marcos de respuesta y recuperación, aunque seguían existiendo áreas de mejora. En cuanto a los riesgos climáticos y medioambientales, el BCE continuó realizando un seguimiento del cumplimiento por parte de las entidades de crédito de los plazos establecidos en 2022 para que cumplieran todas las expectativas supervisoras al final de 2024. Al igual que en 2023, los ejercicios supervisores fueron seguidos de un diálogo continuado, cartas individuales a las entidades y, en caso necesario, decisiones de supervisión vinculantes en las que se contemplaba la imposición de pagos periódicos coercitivos[41]. El BCE también utilizó herramientas prospectivas para evaluar el ajuste de la financiación bancaria con los objetivos climáticos de la UE.
En 2024 el foco se centró en un enfoque flexible, ágil y basado en el riesgo
A lo largo de 2024, la Supervisión Bancaria del BCE continuó aplicando un enfoque ágil y basado en el riesgo. En mayo, el Consejo de Supervisión decidió reformar el PRES con el fin de: i) focalizar las evaluaciones de riesgos reforzando el enfoque plurianual; ii) integrar mejor las actuaciones supervisoras; iii) emplear todo el conjunto de herramientas supervisoras; iv) mejorar la comunicación; v) aumentar la estabilidad de las metodologías, y vi) utilizar mejor los sistemas de TI y el análisis de datos. Además, el BCE y la EBA crearon el Comité Conjunto de Información Bancaria (Joint Bank Reporting Committee) para armonizar e integrar la presentación de información por parte del sector bancario, con el objetivo de mejorar la eficiencia y reducir los costes asociados.
Décimo aniversario de la supervisión bancaria europea: un año de integración fomentando una cultura supervisora cohesionada
El 6 de noviembre de 2024, el MUS celebró su décimo aniversario. Para conmemorar este acontecimiento, se designó el año completo como «un año de integración» y se organizaron diversos eventos específicos, entre los que se incluyó la puesta en marcha del primer programa de formación básica del MUS (SSM Foundation Programme). El programa forma parte de la formación ofrecida por el MUS y su finalidad es promover, entre otras cosas, una cultura supervisora cohesionada en toda la supervisión bancaria europea.
Las prioridades supervisoras para el período 2025-2027 del BCE tienen los objetivos siguientes: i) reforzar la capacidad de las entidades de crédito para evaluar y gestionar las amenazas macrofinancieras, en particular las perturbaciones geopolíticas; ii) asegurar que subsanen de manera eficaz e inmediata las deficiencias persistentes identificadas en el control supervisor, iii) dotarlas de los recursos necesarios para afrontar los nuevos retos derivados de la digitalización y del uso de las nuevas tecnologías.
Como parte de su empeño constante por aumentar la transparencia, en 2024 el BCE tomó debidamente en consideración los comentarios recibidos durante la consulta pública sobre la versión revisada de su Guía sobre modelos internos. La versión final revisada de la Guía sobre modelos internos se publicó en febrero de 2024. Durante el año, el BCE también inició consultas públicas sobre su proyecto de Guía sobre gobernanza y cultura del riesgo, sobre su Guía sobre la externalización de servicios en la nube a proveedores de servicios en la nube y sobre las políticas revisadas relativas a las opciones y facultades de que disponen las autoridades de supervisión de conformidad con la legislación de la UE. También publicó una completa metodología para evaluar los riesgos de tipo de interés y de diferencial de crédito y actualizó su metodología del PRES para riesgo operacional y de TIC. Por último, el BCE publicó las mejores prácticas sobre ajustes a la dotación de provisiones con arreglo a la NIIF 9 y sobre la gestión del riesgo de liquidez intradía.
El BCE impuso sanciones a tres entidades de crédito en 2024[42].
El 5 de junio de 2024, el Consejo de Gobierno nombró a tres nuevos representantes del BCE en el Consejo de Supervisión: Sharon Donnery, Pedro Machado y Patrick Montagner.
Puede consultarse información más detallada en el sitio web de supervisión bancaria del BCE y en el Informe Anual sobre las actividades de supervisión del BCE de 2024.
3.4 La contribución del BCE a iniciativas de políticas regulatorias europeas e internacionales
En 2024 se realizaron avances considerables sobre varias iniciativas de políticas europeas e internacionales
En 2024 se lograron avances significativos en la mejora del marco regulatorio del sector financiero. El BCE contribuyó a la implementación de las reformas finales de Basilea III en la UE y a la propuesta para reforzar el marco de gestión de crisis bancarias y garantía de depósitos de la UE. También se realizaron importantes progresos en la regulación de los criptoactivos (donde el foco pasó a centrarse en su aplicación) y en el proyecto del euro digital. Al mismo tiempo, el BCE participó en los debates sobre políticas regulatorias y en los preparativos en curso en relación con las iniciativas legislativas sobre la IFNB y la unión de los mercados de capitales.
Avances importantes en el marco regulatorio de las entidades de crédito
Las reformas finales de Basilea III se transpusieron al Derecho de la UE, salvo las normas sobre riesgo de mercado, que se aplazaron hasta enero de 2026
Las versiones revisadas del Reglamento de Requerimientos de Capital[43] y de la Directiva de Requerimientos de Capital[44] (conocidas generalmente en su conjunto como el paquete bancario de la UE) se adoptaron formalmente y se publicaron en el Diario Oficial de la Unión Europea el 19 de junio de 2024. En particular, estos dos actos legislativos transpusieron las reformas finales de Basilea III al Derecho de la UE, incrementando la resiliencia del sistema bancario de la UE frente a diversos riesgos. También ampliaron el conjunto de herramientas de supervisión para incluir el tratamiento de los riesgos climáticos y otros riesgos de sostenibilidad. El BCE contribuyó al paquete bancario aportando su experiencia y conocimientos técnicos al trílogo entre la Comisión Europea, el Consejo de la UE y el Parlamento Europeo. También apoyó y sigue apoyando a los reguladores, en particular a la ABE, para que empezaran a aplicar los elementos del paquete bancario, por ejemplo, mediante procesos de consulta sobre las normas técnicas de ejecución y las normas técnicas de regulación relacionadas. Para asegurar la igualdad de condiciones, la aplicación en la UE de las normas sobre riesgo de mercado de Basilea, esto es, la conversión de la revisión fundamental de la información de la cartera de negociación (Fundamental Review of the Trading Book) en un requerimiento regulatorio, se pospuso hasta enero de 2026.
Avanzaron las reformas del marco de gestión de crisis bancarias y garantía de depósitos
A lo largo de 2024, el Parlamento Europeo y el Consejo de la Unión Europea adoptaron sus posturas en torno a la reforma del marco de gestión de crisis bancarias y garantía de depósitos, tras la propuesta legislativa presentada por la Comisión Europea en abril de 2023. Los objetivos de la propuesta incluían ampliar el ámbito de la resolución para incluir a los bancos pequeños y medianos, y proporcionar herramientas para facilitar el uso de los sistemas de garantía de depósitos en la gestión de crisis. El resultado de las negociaciones tripartitas debería garantizar el cumplimiento de estos objetivos y reforzar el marco de gestión de crisis bancarias y garantía de depósitos de la UE.
Implementación de un marco regulatorio para los criptoactivos
Se realizaron importantes avances en la aplicación de la regulación de los criptoactivos
En 2024, el BCE apoyó la finalización y la implementación de un marco regulatorio para los criptoactivos, tanto a escala de la UE como internacional. En el ámbito de la UE, el BCE realizó contribuciones a las normas técnicas y las directrices que fueron coordinadas por la ABE y la Autoridad Europea de Valores y Mercados en relación con el Reglamento relativo a los mercados de criptoactivos[45]. Asimismo, el BCE emitió un dictamen sobre la propuesta de reglamento y de directiva sobre servicios de pago y de dinero electrónico para garantizar salvaguardas y requerimientos prudenciales adecuados para las fichas de dinero electrónico, e instó a que se realizara una evaluación de impacto de los servicios de préstamo de criptoactivos[46]. En los foros internacionales, como el Consejo de Estabilidad Financiera (FSB, por sus siglas en inglés), la atención pasó a centrarse en promover y supervisar la aplicación de la respuesta regulatoria a los criptoactivos. A este respecto, el BCE contribuyó al informe de situación del FSB y el FMI sobre la hoja de ruta para la aplicación de la política de criptoactivos del G-20. También participó en el análisis de la tokenización y sus implicaciones para la estabilidad financiera llevado a cabo por el FSB.
Apoyo a los avances hacia la unión de los mercados de capitales y fortalecimiento del marco regulatorio de la intermediación financiera no bancaria (IFNB)
En 2024 continuaron los esfuerzos para impulsar la unión de los mercados de capitales y la regulación del sector de IFNB
A lo largo del año, una serie de informes de alto nivel dieron un nuevo impulso a la unión de los mercados de capitales y subrayaron la importancia de movilizar estos mercados para profundizar el mercado único y proporcionar financiación adecuada a las empresas innovadoras y productivas en Europa[47]. El BCE participó en el debate sobre políticas regulatorias, estableciendo prioridades en un comunicado del Consejo de Gobierno sobre el avance en la unión de los mercados de capitales. También presentó tres objetivos futuros fundamentales para la unión de los mercados de capitales en diversas publicaciones y discursos, a saber: i) garantizar productos de ahorro europeos que sean accesibles, transparentes y asequibles, de modo que una mayor proporción del ahorro europeo entre en los mercados de capitales; ii) fomentar la consolidación de los regímenes relativos a la negociación y la posnegociación, y iii) desarrollar el ecosistema de financiación para las empresas innovadoras, especialmente de capital riesgo, que se está quedando atrás en Europa[48]. El BCE también contribuyó a algunos aspectos de la unión de los mercados de capitales relacionados con la infraestructura de los mercados financieros (véase capítulo 4). Además, participó en debates del Eurogrupo sobre el futuro de los mercados financieros y de capitales europeos, y contribuyó a la consulta específica de la Comisión Europea sobre el funcionamiento del marco de titulizaciones de la UE, que se espera que dé lugar a medidas legislativas.
Asimismo, el BCE siguió poniendo de relieve la importancia de abordar las vulnerabilidades estructurales en el sector de IFNB y de mejorar el marco regulatorio correspondiente desde una perspectiva macroprudencial. También subrayó la necesidad de avanzar en la aplicación plena y rápida de las recomendaciones internacionales para afrontar el riesgo de liquidez en los fondos de inversión abiertos y en los fondos del mercado monetario. El BCE contribuyó a la respuesta del Eurosistema a la consulta de la Comisión Europea sobre políticas macroprudenciales para el sector de IFNB[49]. El BCE participó también en los trabajos del FSB sobre la preparación en materia de liquidez de agentes no bancarios ante los ajustes de los márgenes y las garantías, y contribuyó activamente a los trabajos en curso para abordar los riesgos derivados del apalancamiento en el sector de IFNB[50].
Recuadro 3
La evolución del riesgo de concentración en los fondos de renta variable de la zona del euro
En 2024 se observó un aumento significativo del riesgo de concentración en los fondos de renta variable de la zona del euro
El riesgo de concentración surge cuando los fondos mantienen una proporción importante de sus inversiones en un número reducido de empresas de gran tamaño, regiones geográficas o sectores económicos. Un análisis de las tenencias de acciones de los fondos de inversión revela que casi el 30 % de su cartera total de valores de sociedades no financieras (SNF) se concentraba en tan solo 25 empresas al final de 2024 (panel a del gráfico A). Este dato refleja un aumento considerable de la proporción de las carteras asignada a las mayores posiciones de los fondos, con más del 3 % del total de las tenencias de valores de SNF invertidas en una sola acción (panel b del gráfico A).
Gráfico A
Concentración de las tenencias de acciones de los fondos de inversión de la zona del euro a lo largo del tiempo
a) Proporción de las tenencias de acciones de SNF por parte de los fondos de inversión asignadas a los 25 emisores principales
(porcentajes de las tenencias de acciones de SNF)

b) Variación de la concentración de los 25 emisores principales en las tenencias de acciones de SNF por parte de los fondos de inversión
(porcentajes de las tenencias de acciones de SNF)

Fuentes: BCE (Centralised Securities Database, Securities Holdings Statistics) y cálculos del BCE.
Notas: Panel a: Los 25 emisores principales son las 25 SNF de mayor tamaño de la cartera atendiendo al valor de esta en cada trimestre, agregando las exposiciones de renta variable de las empresas que emiten más de un tipo de acción. Panel b: el eje de abscisas clasifica a los emisores entre el mayor emisor (1) y el que ocupa la posición 25 (25), en términos de tamaño de las tenencias al final de cada año.
La creciente concentración de las carteras refleja tanto modificaciones de las estrategias de inversión como cambios de valoración
La creciente popularidad de las estrategias de inversión pasiva y el elevado crecimiento de los precios de las acciones de las empresas tecnológicas estadounidenses han sido factores clave del aumento del riesgo de concentración en los últimos años. La inversión pasiva tiene por objeto replicar el rendimiento del mercado general. Esto significa que los fondos de inversión de gestión pasiva suelen replicar índices bursátiles, lo que ha inclinado sus carteras hacia emisores de mayor tamaño incluidos en los índices bursátiles principales. Como resultado, la composición de las mayores posiciones de los fondos de renta variable de la zona del euro en 2024 reflejó cada vez más el predominio de unas pocas grandes empresas tecnológicas estadounidenses en los mercados bursátiles internacionales (panel a del gráfico B). Los significativos incrementos de las cotizaciones de esas acciones durante el año impulsaron su valor relativo en las carteras, al tiempo que atrajeron flujos de entrada comparativamente mayores en los fondos tecnológicos que en otros fondos de renta variable (panel b del gráfico B).
Gráfico B
Desplazamiento hacia acciones estadounidenses y fondos de renta variable tecnológicos
a) Composición de los 25 emisores SNF principales de los fondos de inversión de la zona del euro, por domicilio del emisor
(porcentajes)

b) Variación acumulada de los flujos de entrada y del valor liquidativo de los fondos de renta variable de la zona del euro en 2024, por tipo de fondo
(porcentajes del patrimonio total)

Fuentes: BCE (Centralised Securities Database, Securities Holdings Statistics), EPFR y cálculos del BCE.
Nota: Panel a: Los 25 emisores principales son las 25 SNF de mayor tamaño de la cartera atendiendo al valor de esta en cada trimestre, agregando las exposiciones de renta variable de las empresas que emiten más de un tipo de acción.
Las carteras concentradas son vulnerables a correcciones repentinas de los precios y a dinámicas de amplificación
Las perturbaciones que afectan a una empresa o sector en el que las carteras de los fondos de inversión tienen gran concentración pueden dar lugar a pérdidas de valoración considerables en todo un fondo e inducir a los inversores a vender masivamente sus participaciones. A su vez, es posible que los fondos de inversión tengan que liquidar de forma rápida sus activos para hacer frente a las salidas de fondos. Esto puede provocar una caída aún mayor de los precios de las acciones afectadas y amplificar las espirales negativas. También aumenta el riesgo de contagio financiero al ejercer presiones sobre los precios de los activos no afectados inicialmente por la perturbación, lo que podría dar lugar a disrupciones más amplias en los mercados. En 2024, el riesgo de correcciones repentinas de las cotizaciones se incrementó debido al mayor riesgo geopolítico, a la incertidumbre macroeconómica y a la preocupación por la sobrevaloración de acciones en algunos mercados de renta variable. En este contexto, reforzar la capacidad de resistencia del sector de fondos de inversión frente a tales perturbaciones es cada vez más importante para preservar la estabilidad financiera general.
4 Buen funcionamiento de las infraestructuras de mercado y de los pagos
El Eurosistema desempeña un papel fundamental en el desarrollo, la gestión y la vigilancia de las infraestructuras de mercado y de los pagos. En 2024, la actividad aumentó en todos los servicios TARGET que opera el Eurosistema, y sus funcionalidades, incluidos los servicios de liquidación multidivisa, siguieron evolucionando. Para potenciar la digitalización de los pagos minoristas y mayoristas y de los mercados de valores, el Eurosistema sentó las bases para la posible emisión de un euro digital y concluyó satisfactoriamente el trabajo exploratorio sobre el uso de la tecnología de registros distribuidos (DLT, por sus siglas en inglés) para la liquidación de la operativa mayorista en dinero de banco central. La constante evolución de las ciberamenazas se abordó desde las perspectivas tanto operativa como de la vigilancia. Se iniciaron los trabajos para mejorar los pagos transfronterizos/entre divisas a escala global con el fin de contribuir a la creación de un ecosistema global de pagos más rápido, más barato, más transparente y más accesible.
4.1 Servicios TARGET
Los servicios TARGET constan de tres servicios de liquidación: T2, un sistema de liquidación bruta en tiempo real para los pagos en euros que sustentan las operaciones de política monetaria del Eurosistema, los pagos interbancarios y los pagos comerciales; TARGET2-Securities (T2S), una plataforma única para la liquidación de valores en Europa, y el servicio de liquidación de pagos inmediatos de TARGET (TIPS, por sus siglas en inglés), que liquida pagos inmediatos en dinero de banco central.
La evolución de los servicios TARGET generó importantes mejoras de eficiencia
En 2024, el BCE logró avances sustanciales en todos los servicios TARGET, y realizó esfuerzos concertados para reforzar la capacidad de recuperación de T2 y T2S en caso de producirse un incidente grave (incluido un ciberataque) y para seguir mejorando las funcionalidades de los servicios TARGET con el fin de atender las necesidades cambiantes de los mercados. Para preservar el procesamiento directo (straight-through processing) en el contexto de los pagos transfronterizos, los mensajes en T2 se actualizaron en línea con los desarrollos más recientes en los estándares del mercado aplicados a los sistemas de grandes pagos (es decir, HVPS Plus). En cuanto a T2S, entre los logros destacables se incluyen la implantación plena de nuevos servicios de información, la ampliación de las funcionalidades para la liquidación de operaciones con depositarios centrales de valores que no se han incorporado a la plataforma T2S, nuevos avances en los servicios de gestión de efectivo para las entidades de crédito participantes y la continuación de los trabajos para la futura integración de nuevos mercados de inversores finales. Asimismo, los órganos de gobierno de T2S realizaron una contribución fundamental a iniciativas regulatorias y de políticas de importancia crucial, como el futuro acortamiento (a T+1) del ciclo de liquidación de valores en la UE y la revisión del régimen de disciplina en la liquidación, haciendo hincapié en la mejora del mecanismo de penalización para aumentar la eficiencia. Los progresos realizados en relación con la evolución de todos los servicios TARGET han generado ganancias de eficiencia significativas para el mercado.
Se amplió la funcionalidad de liquidación multidivisa en los servicios TARGET
La funcionalidad multidivisa de los servicios TARGET permite prestar servicios de liquidación en monedas distintas del euro, en caso de que los respectivos bancos centrales decidan hacerlo. Hasta 2024, esta funcionalidad se utilizaba únicamente en T2S para la liquidación de valores en coronas danesas. Desde febrero de dicho año también se usa en TIPS para la liquidación de pagos inmediatos en coronas suecas. Se utilizará asimismo cuando se ponga en marcha la liquidación de pagos en coronas danesas en T2 y en TIPS en abril de 2025.
La puesta en marcha de ECMS se reprogramó a junio de 2025
Además de los tres servicios de liquidación (T2, T2S y TIPS), el Eurosistema está desarrollando un nuevo servicio TARGET, el Sistema de Gestión de Activos de Garantía del Eurosistema (ECMS, por sus siglas en inglés), para gestionar los activos utilizados como garantía en las operaciones de crédito del Eurosistema en todos los países de la zona del euro. La puesta en marcha de ECMS se ha replanificado de noviembre de 2024 a junio de 2025 con el fin de que los usuarios dispongan de más tiempo para completar las pruebas de las funcionalidades de ECMS en un entorno estable.
La actividad se incrementó en todos los servicios TARGET
En 2024, la actividad se incrementó en todos los servicios TARGET. T2 liquidó una media diaria de 421.875 pagos, lo que supone un incremento del 3,2 % con respecto al año anterior, que estuvo impulsado principalmente por los pagos comerciales. En T2S se liquidó un volumen medio diario de 791.416 operaciones, un aumento del 13,1 % que estuvo ampliamente distribuido entre los distintos participantes y segmentos del mercado. Como consecuencia del crecimiento del número de participantes en TIPS y del inicio de la liquidación de operaciones en una moneda distinta del euro en febrero (véase más arriba), los pagos liquidados en TIPS se incrementaron de forma sustancial en 2024. En cuanto a los volúmenes de pagos denominados en euros, la media diaria se incrementó de 963.894 pagos en diciembre de 2023 a 1.657.421 pagos en diciembre de 2024 (+72 %). En cuanto a los pagos denominados en coronas suecas, la media diaria correspondiente a los pagos denominados en dicha moneda fue de 2.686.745 pagos en el período transcurrido entre febrero de 2024 y el final del año.
4.2 Innovación e integración de las infraestructuras de mercado y de los pagos
Se aprobaron los criterios relativos al acceso de proveedores de servicios de pago distintos de los bancos a los sistemas de pago gestionados por el Eurosistema y a las cuentas de los bancos centrales
El 18 de julio de 2024, el Consejo de Gobierno aprobó los criterios del Eurosistema relativos al acceso de proveedores de servicios de pago distintos de los bancos (PSP no bancarios) a los todos los sistemas de pago gestionados por los bancos centrales y a las cuentas de dichos bancos[51]. La política establece, como principio general, que se concederá acceso a los sistemas de pago operados por los bancos centrales de la zona del euro a los PSP no bancarios que cumplan todos los requisitos de mitigación de riesgos. El Eurosistema no ofrecerá a los PSP no bancarios acceso a cuentas para salvaguardar fondos de clientes; el mantenimiento de una cuenta en un banco central implica depositar los fondos necesarios para cumplir las obligaciones de liquidación. Para paliar las preocupaciones específicas de los bancos centrales desde las perspectivas de la estabilidad financiera y la política monetaria, el Eurosistema impondrá un límite máximo a las tenencias en las cuentas de los PSP no bancarios. Los criterios se han adoptado tras la entrada en vigor del Reglamento sobre pagos inmediatos[52] que, entre otras cosas, modificó la Directiva sobre la firmeza de la liquidación[53], con el fin de permitir que los PSP no bancarios participen en los sistemas de pago designados. El Eurosistema implementó estos criterios a principios de 2025 mediante la Decisión que adoptó el Consejo de Gobierno el 27 de enero de 2025[54], y la Orientación sobre TARGET[55] se actualizará en junio de 2025.
Se definieron normas armonizadas para la gestión de los activos de garantía del Eurosistema
En agosto de 2024, el BCE publicó las normas y procedimientos armonizados para la movilización y la gestión de los activos de garantía en las operaciones de crédito del Eurosistema, que constituyen un paso más hacia una mayor integración financiera de la zona del euro y la unión de mercados de capitales.
AMI-SeCo señaló que los avances de los mercados nacionales para cumplir los estándares fueron lentos
Como parte de su apoyo continuado a la creación de la unión de los mercados de capitales, el grupo consultivo de infraestructuras del mercado para valores y colateral (AMI-SeCo, por sus siglas en inglés) del Eurosistema continuó realizando un seguimiento del cumplimiento de los estándares de armonización de T2S por parte de los mercados nacionales, así como con el manual único de gestión de activos de garantía para Europa (SCoRE, por sus siglas en inglés) y de los estándares europeos sobre eventos corporativos. En el informe de cumplimiento de los estándares sobre eventos corporativos de 2024 y en el informe SCoREBoard correspondiente al segundo semestre de 2024 se señalaron avances limitados y retrasos en el cumplimiento de los estándares de AMI-SeCo, aunque se espera que muchas de las deficiencias que persisten se subsanen para junio de 2025. Un factor que incentiva el cumplimiento es el uso de un estándar de mensajería común, como exigen los estándares SCoRE, que es fundamental para aumentar la automatización de los procesos relacionados con los eventos corporativos y la gestión tripartita de activos de garantía. El grupo de trabajo ISO 20022 Migration Strategy Task Force de AMI-SeCo está desarrollando una estrategia para la migración de todo el mercado al estándar ISO 20022, el último estándar de mensajería disponible.
El Eurosistema continuó analizando el uso de la tecnología DLT para la liquidación de la operativa mayorista en dinero de banco central
Durante 2024, el Eurosistema concluyó satisfactoriamente el trabajo exploratorio para realizar pruebas sobre el uso de la tecnología de registros distribuidos (DLT) para la liquidación de la operativa mayorista en dinero de banco central[56]. Durante seis meses se probaron 58 casos de uso diferentes. En total, el Eurosistema procesó más de 200 operaciones por un importe total de 1,59 mm de euros. En estos trabajos participaron 64 entidades e instituciones de nueve países, incluidos bancos centrales, participantes en el mercado y operadores de DLT.
Las conclusiones se están analizando para tenerlas en cuenta en los próximos pasos que se den en lo que respecta a una visión europea para el futuro de la unión digital de los mercados de capitales[57]. A lo largo de 2024, el Eurosistema siguió intercambiando puntos de vista con el mercado en el New Technologies for Wholesale settlement Contact Group, un grupo de contacto sobre nuevas tecnologías para la liquidación mayorista.
Por último, el servicio de emisión de la UE (EIS, por sus siglas en inglés) se puso en marcha en enero de 2024. Este servicio, empleado por la Comisión Europea para emitir y liquidar títulos de deuda de la UE en T2, un entorno seguro, eficiente y neutral, lleva utilizándose amplia y satisfactoriamente desde su lanzamiento. Se ha emitido deuda por importe de más de 100 mm de euros a través del depositario central de valores del Nationale Bank van België/Banque Nationale de Belgique bajo el enfoque neutral del EIS.
4.3 El proyecto del euro digital
El objetivo de este proyecto es sentar las bases para la posible emisión de un euro digital
En noviembre de 2023, el BCE inició la fase de preparación del proyecto de un euro digital de dos años de duración con el fin de sentar las bases para la posible emisión de un euro digital. En 2024, el Eurosistema avanzó en los principales hitos de este proyecto y proporcionó periódicamente información actualizada sobre los progresos realizados. El primer informe de progreso del proyecto del euro digital se publicó en junio y el segundo en diciembre. Como parte de la fase de preparación, el BCE está trabajando en las normas de funcionamiento del esquema del euro digital (digital euro scheme rulebook), que serán fundamentales para estandarizar la manera de utilizar y gestionar el euro digital en la zona del euro. En 2024, las actividades del grupo responsable del desarrollo de dichas normas de funcionamiento (Rulebook Development Group) se centraron en dos tareas principales: revisar el primer borrador de las citadas normas y seguir elaborando apartados adicionales por medio de las siete nuevas líneas de trabajo.
El diseño del euro digital se basará en las tecnologías más avanzadas para que sea ciberresiliente y pueda responder a las necesidades de los usuarios. En enero, el BCE abrió el plazo de presentación de solicitudes para seleccionar a posibles proveedores de componentes del euro digital y de servicios relacionados, y logró avanzar en el proceso de selección.
En septiembre de 2024 se iniciaron nuevos trabajos de experimentación, así como nuevas actividades de investigación con usuarios para recabar información sobre sus preferencias, también mediante encuestas online y entrevistas con grupos objetivo como pequeños comerciantes y grupos de consumidores vulnerables. Se establecieron acuerdos de colaboración de innovación con partes interesadas de los sectores público y privado con el fin de probar los «pagos condicionales» y explorar otros casos de uso innovadores.
El BCE realizó avances en el desarrollo de una funcionalidad offline del euro digital que permitiría efectuar pagos sin conexión a internet con un nivel de privacidad similar al del efectivo. Asimismo, investigó cómo desplegar esta funcionalidad en los dispositivos de los usuarios finales considerando los aspectos tecnológicos, de seguridad y operativos.
La interacción con las partes interesadas continuó siendo una prioridad en 2024, y el BCE mantuvo una comunicación activa con los ciudadanos, los participantes en el mercado y las autoridades. Las actividades realizadas incluyeron sesiones técnicas con el Consejo de Pagos Minoristas en Euros (ERPB, por sus siglas en inglés), reuniones bilaterales con participantes en el mercado e iniciativas para dar a conocer al público el proyecto y promover la transparencia mediante la celebración de seminarios sobre el euro digital con asistencia de representantes de organizaciones de la sociedad civil.
Como parte de la fase de preparación, el BCE proporcionó apoyo técnico en relación con la propuesta de un reglamento sobre el euro digital
Durante 2024, el BCE prestó apoyo técnico para contribuir a los debates del Parlamento Europeo y del Consejo de la Unión Europea sobre la propuesta de Reglamento sobre el euro digital de la Comisión Europea publicada en junio de 2023.
Asimismo, el BCE también mantuvo contactos regulares con colegisladores y participantes en el mercado para proporcionarles información actualizada sobre los avances del proyecto y recabar sus comentarios y opiniones sobre diversos aspectos de la metodología de calibración de los límites a las tenencias de euros digitales[58]. Aunque el límite a las tenencias se fijaría cuando se aproxime la fecha de emisión —con el fin de garantizar que refleje la situación económica en ese momento—, en 2024, el BCE comenzó a elaborar una metodología que toma en consideración aspectos monetarios y económicos para equilibrar los objetivos establecidos en el proyecto legislativo: lograr que el euro digital sea un medio de pago de uso generalizado y proteger la estabilidad financiera y la transmisión de la política monetaria. En una línea de trabajo específica integrada por expertos del BCE que cuenta con el apoyo de los bancos centrales nacionales y de las autoridades nacionales competentes se empezaron a identificar los principales factores que influyen en la calibración del límite a las tenencias con el fin de contribuir a establecer una metodología coherente que tenga en cuenta estos factores.
El Consejo de Gobierno adoptará una decisión sobre si pasar a la siguiente fase del proyecto del euro digital antes del final de 2025. La decisión sobre la emisión de un euro digital no se tomará hasta que se adopte el marco legislativo de la Unión Europea.
4.4 Vigilancia y la función de banco central emisor
El funcionamiento seguro y eficiente de las infraestructuras de los mercados financieros y los pagos en la zona del euro sigue siendo una prioridad del Eurosistema en su función de vigilancia. Además, en su calidad de banco central emisor del euro, el Eurosistema participa en acuerdos de cooperación con otros responsables de la vigilancia o con autoridades con competencias sobre las infraestructuras de los mercados financieros con una operativa significativa denominada en euros.
La vigilancia continua de las infraestructuras de importancia sistémica siguió siendo una prioridad en 2024
Por lo que respecta a la vigilancia de los servicios TARGET, una prioridad fundamental fue realizar la primera evaluación exhaustiva tras la consolidación de T2 y T2S en 2023. La evaluación se finalizará en 2025 y se ha centrado, en particular, en el seguimiento de la aplicación del marco de gestión de riesgos y del marco de ciberresiliencia y seguridad de la información de la función de gestión de riesgos de los servicios TARGET. También se llevaron a cabo ejercicios de evaluación de sistemas de pago de importancia sistémica (SIPS, por sus siglas en inglés) distintos de T2, en concreto de EURO1, STEP2-T y Mastercard Clearing Management System, que también se concluirán en 2025, en paralelo a las actividades de vigilancia continua de los servicios TARGET y de todos los SIPS.
El Reglamento aplicable a los SIPS se revisó y se introdujeron nuevos requisitos y modificaciones de la definición de operador del SIPS
Asimismo, el Eurosistema revisó el Reglamento del BCE sobre los requisitos de vigilancia de los sistemas de pago de importancia sistémica (Reglamento SIPS)[59] e identificó varias áreas que debían actualizarse. La actualización se llevará a cabo mediante una refundición del Reglamento, que incluirá nuevos requisitos en materia de gobernanza, ciberriesgo y externalización, así como modificaciones de la definición de operador del SIPS para incluir excepcionalmente a las sucursales en la zona del euro de entidades jurídicas ubicadas fuera de la zona del euro. En octubre de 2024 se inició una consulta pública sobre la refundición prevista del Reglamento SIPS y la versión final del Reglamento refundido se publicará en 2025.
El Eurosistema continuó sus actividades de vigilancia de los instrumentos, esquemas y acuerdos de pago electrónico (PISA, por sus siglas en inglés) con arreglo al marco PISA, concluyó la incorporación de las nuevas entidades vigiladas y llevó a cabo evaluaciones exhaustivas de los esquemas y acuerdos paneuropeos sujetos a vigilancia. En la segunda mitad de 2024, la función de vigilancia siguió preparándose para la operacionalización de sus nuevas responsabilidades de conformidad con el Reglamento relativo a los mercados de criptoactivos[60].
En el área de la ciberresiliencia, el Eurosistema revisó su estrategia de ciberresiliencia y amplió su alcance para incluir a las entidades sujetas a vigilancia con arreglo al marco PISA. Además, el Sistema Europeo de Bancos Centrales trabajó en la revisión del marco europeo para ciberataques simulados basados en inteligencia de seguridad, el marco TIBER-EU, también con el objetivo de alinearlo con las normas técnicas de regulación previstas en el Reglamento sobre resiliencia operativa digital (DORA, por sus siglas en inglés)[61] para las pruebas de penetración basadas en inteligencia de seguridad[62]. El marco TIBER-EU actualizado se publicó en febrero de 2025.
En su calidad de banco central emisor del euro, el Eurosistema contribuyó a los trabajos de los colegios de supervisores y de resolución relativos a las entidades de contrapartida central (ECC) de la UE y participó en la supervisión continuada de las ECC de importancia sistémica ubicadas en terceros países. Por lo que se refiere a la liquidación de valores, el Eurosistema continuó con la revisión y evaluación periódicas de los depositarios centrales de valores (DCV) conforme al Reglamento relativo a los DCV (CSDR, por sus siglas en inglés)[63]. También comenzó a desempeñar sus funciones en el proceso de autorización para entidades que operan infraestructuras de mercado basadas en DLT con arreglo al Reglamento sobre un régimen piloto de infraestructuras de mercado basadas en la tecnología de registro descentralizado[64].
En su función de vigilancia, el BCE y el Eurosistema participaron en diversas líneas de trabajo internacionales y europeas
El BCE participó en numerosas líneas de trabajo internacionales desde la perspectiva de la vigilancia que se centraron en cuestiones como los márgenes de las ECC, el riesgo climático y el riesgo general de negocio, así como la gobernanza y la vigilancia de la interconexión de los sistemas de pagos inmediatos. En lo que respecta a la regulación de la UE, el Eurosistema contribuyó a la elaboración de normas técnicas de regulación, incluidas las previstas en el Reglamento Europeo de Infraestructuras de Mercado revisado (EMIR 3)[65], el Reglamento DORA y el CSDR REFIT (reajuste y aclaración adicionales del marco establecido en el Reglamento CSDR), en colaboración con las Autoridades Europeas de Supervisión pertinentes. En el contexto de los debates sobre el EMIR 3, el BCE realizó un seguimiento continuo de los desarrollos en el ámbito de la compensación en la UE y realizó análisis cuantitativos sobre medidas regulatorias como la obligación de mantener cuentas activas establecida en el EMIR 3. Por último, el BCE y la Autoridad Bancaria Europea publicaron el primer informe conjunto sobre el fraude en los pagos, en el que se ponía de relieve la eficacia de los requisitos de autenticación reforzada de clientes.
Recuadro 4
Mejora de los pagos transfronterizos mediante la interconexión de los sistemas de pagos inmediatos
El Eurosistema trata de mejorar los pagos transfronterizos con el fin de apoyar de forma más adecuada a las empresas y a los ciudadanos europeos que intercambian pagos con el exterior. Los pagos que cruzan las fronteras de la UE con frecuencia son relativamente lentos, caros y complejos, lo que dificulta que los usuarios finales envíen y reciban dinero, obstaculizando el comercio, la inversión y las remesas transfronterizos. El BCE y los bancos centrales nacionales de la zona del euro respaldan la hoja de ruta del G-20 para crear un ecosistema global de pagos más rápido, más barato, más transparente y más accesible.
En octubre de 2024, el Consejo de Gobierno puso en marcha varias iniciativas para mejorar los pagos transfronterizos y entre divisas dentro de la UE y con el exterior. Estas iniciativas pueden encuadrarse en dos líneas de trabajo:
Servicio de liquidación entre divisas en TIPS
El Eurosistema implementará un servicio de liquidación entre divisas en TIPS. Este servicio permitirá que los pagos inmediatos originados en una moneda se liquiden en otra moneda y en dinero de banco central. Inicialmente, tres monedas —el euro, la corona sueca y la corona danesa— participarán en esta iniciativa, que podría ampliarse a otras monedas que se integren en TIPS en el futuro. Este servicio se basará en el esquema OCT Inst de transferencias inmediatas One-Leg Out del Consejo Europeo de Pagos.
Trabajos exploratorios sobre la conexión de TIPS con otros sistemas de pagos inmediatos
El Eurosistema continuará explorando la posibilidad de conectar TIPS con otros sistemas de pagos inmediatos. Estos trabajos exploratorios abarcan tres iniciativas:
la implementación del servicio de liquidación entre divisas en TIPS;
la incorporación a la red multilateral de sistemas de pagos inmediatos ―el proyecto Nexus― liderado por el Banco de Pagos Internacionales, y
el establecimiento de un enlace bilateral con el sistema de la India Unified Payments Interface, el sistema con el mayor volumen de pagos inmediatos en el mundo (la India también se encuentra entre los diez primeros países destinatarios de las remesas emitidas desde la zona del euro).
La interconexión transfronteriza de los sistemas de pagos inmediatos podría reducir costes e incrementar la velocidad y la transparencia de los pagos transfronterizos, incluidas las remesas. Asimismo, podría mitigar los riesgos de fragmentación del ecosistema global de pagos. La conexión de estos sistemas es una solución eficiente porque utiliza infraestructuras de pago ya existentes. También contribuye a una arquitectura de pagos transfronterizos más sencilla y competitiva. Además, se preserva la soberanía monetaria, ya que la interconexión evita la sustitución de monedas y que unas pocas entidades de pago de ámbito global dominen el mercado.
Al mismo tiempo, interconectar los sistemas de pagos inmediatos es una tarea compleja y requiere la participación de distintas partes interesadas a diversos niveles en numerosas jurisdicciones. Un reto técnico radica en el uso de estándares diferentes en las distintas jurisdicciones. Otros retos están relacionados con el establecimiento de estructuras adecuadas de gobernanza y vigilancia, lo que incluye asegurar el cumplimiento de los requisitos en materia de prevención del blanqueo de capitales y la financiación del terrorismo (PBC/FT). También han de tomarse en consideración aspectos jurídicos, como la necesidad de abordar las discrepancias regulatorias y la firmeza de la liquidación. Una parte fundamental de los trabajos exploratorios que está llevando a cabo el Eurosistema es el análisis y la evaluación de los beneficios y los desafíos.
5 Operaciones de mercado y servicios financieros prestados a otras entidades
Las líneas swap y repo del Eurosistema son instrumentos de política monetaria utilizados como herramientas de estabilización en épocas de tensión en los mercados financieros mundiales. Las líneas de liquidez en euros con bancos centrales de fuera de la zona del euro volvieron a proporcionar un mecanismo de apoyo a la financiación de mercado. El BCE también siguió ofreciendo periódicamente operaciones en dólares estadounidenses a las entidades de contrapartida de la zona del euro elegibles, respaldadas por la red de líneas swap permanentes de los principales bancos centrales, integrada por el BCE, la Reserva Federal, el Banco de Canadá, el Banco de Inglaterra, el Banco de Japón y el Banco Nacional de Suiza. Durante 2024 no hubo ninguna intervención del BCE en el mercado de divisas. Asimismo, el BCE continuó siendo responsable de la gestión de diversas operaciones financieras en nombre de la Unión Europea y siguió desempeñando una función de coordinación en relación con el marco de servicios de gestión de reservas del Eurosistema.
5.1 Evolución de las operaciones de mercado
Líneas de liquidez en euros y en moneda extranjera
Las líneas swap y repo del Eurosistema son instrumentos de política monetaria que ayudan a evitar que las tensiones en los mercados internacionales de financiación dificulten la transmisión eficaz de la política monetaria en la zona del euro. El cuadro 5.1 muestra las líneas de liquidez vigentes a 31 de diciembre de 2024.
Por lo que respecta a las líneas de liquidez en moneda extranjera, en 2024, el BCE continuó proporcionando semanalmente liquidez en dólares estadounidenses con un vencimiento de siete días en coordinación con la Reserva Federal, el Banco de Canadá, el Banco de Inglaterra, el Banco de Japón y el Banco Nacional de Suiza (la red de líneas swap). El uso de estas líneas por parte de las entidades de contrapartida de la zona del euro siguió siendo muy limitado durante el año.
Cuadro 5.1
Resumen de las líneas de liquidez operativas
Entidad de contrapartida no perteneciente a la zona del euro | Tipo de acuerdo | Recíproco | Importe máximo de financiación |
---|---|---|---|
Danmarks Nationalbank | Línea swap | No | 24.000 |
Sveriges Riksbank | Línea swap | No | 10.000 |
Banco de Canadá | Línea swap | Sí | Ilimitado |
Banco Central de la República Popular China | Línea swap | Sí | 45.000 |
Banco de Japón | Línea swap | Sí | Ilimitado |
Banco Nacional de Suiza | Línea swap | Sí | Ilimitado |
Banco de Inglaterra | Línea swap | Sí | Ilimitado |
Reserva Federal | Línea swap | Sí | Ilimitado |
Banca Naţională a României | Línea repo | No | 4.500 |
Magyar Nemzeti Bank | Línea repo | No | 4.000 |
Banco de Albania | Línea repo | No | 400 |
Autoridad Financiera Andorrana | Línea repo | No | 35 |
Banco Nacional de la República de Macedonia del Norte | Línea repo | No | 400 |
Banco Central de la República de San Marino | Línea repo | No | 100 |
Banco Central de Montenegro | Línea repo | No | 250 |
Banco Central de la República de Kosovo | Línea repo | No | 100 |
Fuente: BCE.
Nota: Lista de las líneas de liquidez establecidas con bancos centrales mantenidas por el Eurosistema a 31 de diciembre de 2024.
Tras la entrada en vigor del nuevo marco del BCE para la provisión de liquidez en euros a bancos centrales no pertenecientes a la zona del euro el 16 de enero de 2024, se extendieron todas las líneas de liquidez en euros respecto de las que se recibieron solicitudes de prórroga, inicialmente hasta el 31 de enero de 2025 y luego hasta el 31 de enero de 2027[66]. El recurso a las líneas de liquidez en euros en 2024 fue limitado.
Información sobre las intervenciones en el mercado de divisas
El BCE no intervino en el mercado de divisas en 2024. Desde la introducción del euro, el BCE ha intervenido en el mercado de divisas en dos ocasiones, en 2000 y en 2011. Los datos sobre las intervenciones en el mercado de divisas se publican trimestralmente, con un retraso de un trimestre, en el sitio web del BCE y en el ECB Data Portal, y también se resumen en el cuadro 5.2. Si no ha habido ninguna intervención en el mercado de divisas en el trimestre correspondiente, se indica expresamente.
Cuadro 5.2
Intervenciones del BCE en el mercado de divisas
Período | Fecha | Tipo de intervención | Par de divisas | Divisa adquirida | Importe bruto (millones de euros) | Importe neto (millones de euros) |
---|---|---|---|---|---|---|
III TR 2000 | 22/09/2000 | Coordinada | EUR/USD | EUR | 1.640 | 1.640 |
22/09/2000 | Coordinada | EUR/JPY | EUR | 1.500 | 1.500 | |
IV TR 2000 | 03/11/2000 | Unilateral | EUR/USD | EUR | 2.890 | 2.890 |
03/11/2000 | Unilateral | EUR/JPY | EUR | 680 | 680 | |
06/11/2000 | Unilateral | EUR/USD | EUR | 1.000 | 1.000 | |
09/11/2000 | Unilateral | EUR/USD | EUR | 1.700 | 1.700 | |
09/11/2000 | Unilateral | EUR/JPY | EUR | 800 | 800 | |
I TR 2011 | 18/03/2011 | Coordinada | EUR/JPY | EUR | 700 | 700 |
2012-2023 | - | - | - | - | - | - |
I TR-IV TR 2024 | - | - | - | - | - | - |
Fuente: BCE.
El marco de información abarca las intervenciones en el mercado de divisas que el BCE llevó a cabo unilateralmente y de forma coordinada con otras autoridades internacionales, así como las intervenciones «en los márgenes» efectuadas en el contexto del Mecanismo de Tipos de Cambio (MTC II).
5.2 Gestión de las operaciones de endeudamiento y de préstamo realizadas por la UE
El BCE procesó los pagos relacionados con diversos programas de préstamos de la UE
El BCE es responsable de la administración de las cuentas y del procesamiento de los pagos relacionados con las operaciones de endeudamiento y de préstamo realizadas por la UE con arreglo al mecanismo de ayuda financiera a medio plazo (MTFA, por sus siglas en inglés)[67] para las balanzas de pagos de los Estados miembros, al Mecanismo Europeo de Estabilización Financiera (MEEF)[68], al instrumento europeo de apoyo temporal para atenuar los riesgos de desempleo en una emergencia (SURE, por sus siglas en inglés)[69], al programa Next Generation EU (NGEU)[70], al Mecanismo para Ucrania, incluida la financiación puente extraordinaria[71] y la asistencia macrofinanciera a corto plazo a la República Árabe de Egipto[72]. El BCE también es responsable de la gestión de determinados pagos generados por las operaciones efectuadas en el contexto de la Facilidad Europea de Estabilización Financiera (FEEF)[73] y del Mecanismo Europeo de Estabilidad (MEDE)[74], así como del procesamiento de todos los pagos relacionados con el acuerdo de préstamo suscrito con Grecia[75]. En 2024, el BCE prestó servicios de agente de pagos a la Comisión Europea[76].
A 31 de diciembre de 2024, el importe total del saldo nominal vivo ascendía a 0,2 mm de euros bajo la facilidad MTFA, a 42 mm de euros del MEEF, a 98,35 mm de euros del SURE y a 31,605 mm de euros del acuerdo de préstamo suscrito con Grecia. Por último, en 2024 el BCE tramitó desembolsos y pagos de intereses de préstamos y transferencias del NGEU a y desde diversos Estados miembros, incluidos los préstamos a Ucrania.
5.3 Servicios de gestión de reservas del Eurosistema
Varios bancos centrales nacionales del Eurosistema prestaron servicios con arreglo al marco de ERMS
En 2024 se continuó ofreciendo una amplia gama de servicios financieros dentro del marco de servicios de gestión de reservas del Eurosistema (ERMS, por sus siglas en inglés) establecido en 2005 para la gestión de activos de reserva denominados en euros de sus clientes. Algunos bancos centrales nacionales del Eurosistema prestan servicios financieros con arreglo a este marco —en condiciones y términos armonizados, y de conformidad con los estándares del mercado— a bancos centrales, autoridades monetarias y organismos públicos situados fuera de la zona del euro, así como a organizaciones internacionales. El BCE desempeña una función general de coordinación, hace un seguimiento del correcto funcionamiento de los servicios, promueve cambios para mejorar el marco y prepara los informes correspondientes para los órganos rectores del BCE.
El número de cuentas de clientes de ERMS comunicadas era de 287 al final de 2024, en comparación con 273 al final de 2023. En el cuarto trimestre de 2024, el total de tenencias agregadas (que incluyen las tenencias de efectivo y de valores) gestionado en el marco de ERMS había aumentado aproximadamente un 8 % con respecto al mismo trimestre de 2023.
6 El efectivo sigue siendo el medio de pago más utilizado por los ciudadanos europeos
En 2024, el volumen de billetes en circulación aumentó de forma moderada, y el efectivo continuó siendo el medio de pago más utilizado en los puntos de venta.
El Eurosistema tiene el compromiso de garantizar que se mantenga la disponibilidad, la accesibilidad y la aceptación del efectivo como medio de pago, y que al mismo tiempo sea lo más sostenible y respetuoso posible con el medio ambiente. Los preparativos para el desarrollo de una nueva serie de billetes en euros brindan una oportunidad para lograr que todos los europeos se identifiquen más con los billetes en euros.
6.1 Circulación y tratamiento del efectivo
Los billetes en euros en circulación se incrementaron ligeramente y las monedas en circulación también siguieron aumentando
Al final de 2024 circulaban 30.500 millones de billetes por un importe total de unos 1.600 mm de euros (gráfico 6.1). El número de billetes en euros en circulación y su importe se incrementaron un 2,4 % y un 1,3 %, respectivamente, durante el año.
Gráfico 6.1
Número e importe de los billetes en euros en circulación
(escala izquierda: billones de euros; escala derecha: miles de millones)

Fuente: BCE.
El volumen de billetes recirculados por las entidades de crédito entre sus clientes aumentó, lo que impulsó la eficiencia
Las entidades de crédito devolvieron 25.400 millones de billetes a los bancos centrales nacionales (BCN) de la zona del euro en 2024, lo que supone un ligero descenso ―de 900 millones de billetes― con respecto a 2023. En términos de importe, los billetes depositados en los BCN ascendieron a un total de 856.000 millones de euros en 2024, frente a 890.000 millones en 2023. Esta disminución se debió al mayor volumen de billetes que las entidades volvieron a poner en circulación entre sus clientes en lugar de devolverlos a los BCN. Este cambio en el tratamiento de los billetes por parte de las entidades refleja sus esfuerzos por mejorar la eficiencia, lo que han logrado, por ejemplo, instalando más cajeros automáticos con la funcionalidad de depósito y de recirculación de billetes.
En 2024, las monedas en euros en circulación (emisión neta) en la zona del euro registraron un aumento similar al de los dos años anteriores y se situó en 3.000 millones de monedas con un valor de 953 millones de euros.
El BCE trata de garantizar el acceso adecuado al efectivo y su aceptación en la zona del euro, y acoge positivamente la regulación sobre el curso legal del euro
El BCE acoge con gran satisfacción la propuesta de establecer normativa vinculante sobre el curso legal de los billetes y monedas en euros en la legislación de la UE. La adopción de un reglamento de la UE proporcionaría a los ciudadanos mayor seguridad jurídica de que pueden realizar operaciones presenciales sin problemas utilizando efectivo. Las entidades de crédito tienen la responsabilidad social de prestar servicios de efectivo integrales y eficientes a los ciudadanos y a las empresas. En 2024, el BCE y los BCN profundizaron en sus análisis sobre el acceso de los ciudadanos a los servicios de efectivo que ofrecen las entidades de crédito, y detectaron que estos servicios habían seguido deteriorándose en determinadas áreas. Por consiguiente, la incorporación de normas que protejan el acceso de la ciudadanía al efectivo en la legislación de la UE también es expresamente bienvenido.
6.2 Uso del efectivo por los consumidores y las empresas
El efectivo sigue siendo el medio de pago más utilizado en los puntos de venta
Entre septiembre de 2023 y junio de 2024, el BCE llevó a cabo un estudio sobre los hábitos de pago de los consumidores de la zona del euro con el fin de analizar sus comportamientos y preferencias de pago, así como su acceso a diversos instrumentos de pago. El estudio mostró que el efectivo era el medio de pago más utilizado en los puntos de venta y que se empleaba en el 52 % de todas las operaciones. Sin embargo, el porcentaje de pagos en metálico disminuyó en comparación con el 59 % registrado en 2022. En términos de importe, las tarjetas representaron un porcentaje de pagos más elevado (45 %) que el efectivo (39 %). La proporción de pagos online en los pagos diarios de los consumidores aumentó del 17 % al 21 %, mientras que el porcentaje de pagos en el punto de venta descendió del 80 % al 75%. El estudio también puso de manifiesto que una mayoría de los consumidores (el 62 % en 2024, frente al 60 % en 2022) consideraba importante tener la posibilidad de pagar en efectivo. Al mismo tiempo, la mayor parte de los consumidores de la zona del euro (el 87 % en 2024, frente al 89 % en 2022) indicaron que les resultaba bastante fácil o muy fácil acceder a un cajero automático o a una entidad bancaria.
En 2024, el BCE publicó los resultados de la encuesta sobre el uso del efectivo por las empresas de la zona del euro, que arrojó luz sobre la aceptación de diversos instrumentos de pago por las empresas y sobre su visión estratégica en cuanto al uso y la aceptación del efectivo. Según esta encuesta, el porcentaje de empresas que aceptaba efectivo había disminuido desde el 96 % en 2021 hasta el 88 % en 2024. La caída de la aceptación del efectivo fue particularmente acusada en hoteles, restaurantes y bares y cafeterías. Entre las empresas que aceptan efectivo en la actualidad, el 94 % señaló que tenía la intención de seguir haciéndolo en el futuro.
6.3 Evolución de las falsificaciones y de los billetes en euros
En 2024, el nivel de falsificaciones fue históricamente bajo con respecto al total de billetes en circulación
En 2024 se retiraron de la circulación unos 554.000 billetes en euros falsos, lo que representa un porcentaje históricamente bajo con respecto al total de billetes en circulación (gráfico 6.2). Aunque es un porcentaje muy pequeño, es mayor que en años anteriores, en los que el número de falsificaciones fue excepcionalmente bajo debido a la pandemia de COVID-19. En total se detectaron unos 18 billetes falsos por cada millón de billetes auténticos en circulación. Por lo tanto, la probabilidad de recibir un billete falso es escasa.
La mayoría de estos billetes son de baja calidad y carecen de los elementos de seguridad o los imitan mal. La autenticidad de los billetes puede comprobarse con facilidad utilizando el método «toque, mire y gire» descrito en la sección del sitio web del BCE sobre los elementos de seguridad de los billetes y en los sitios web de los BCN de la zona del euro.
Gráfico 6.2
Número de billetes falsos detectados al año por cada millón de billetes auténticos en circulación

Fuente: BCE.
Preparativos para los futuros billetes en euros
El BCE está preparándose para desarrollar una nueva serie de billetes en euros con miras a mantener su gran resistencia a la falsificación y para que sean lo más respetuosos posible con el medio ambiente. Este proceso refleja el compromiso del Eurosistema con el efectivo y es una oportunidad para que todos los europeos se identifiquen más con los billetes en euros.
Se están realizando consultas a la ciudadanía durante el proceso de rediseño y se espera una decisión sobre los diseños definitivos en 2026
Durante 2024, un grupo consultivo multidisciplinar —compuesto por expertos en varios ámbitos relevantes— propuso posibles motivos para representar los dos temas elegidos: «La cultura europea» y «Ríos y aves». El 29 de enero de 2025, el Consejo de Gobierno seleccionó motivos para ambos temas y designó un jurado con miembros de todos los países de la zona del euro que contribuirá al concurso de diseño que se convocará más avanzado el año. Se espera que, en 2026, el BCE adopte una decisión sobre los futuros diseños y sobre las fechas de inicio de la producción y emisión de los nuevos billetes. Luego, deberán transcurrir aún varios años para que los primeros billetes sean producidos y puestos en circulación.
7 Estadísticas
El BCE —en colaboración con los bancos centrales nacionales— elabora, recoge, compila y difunde una amplia gama de estadísticas y datos que sirven de apoyo a su política monetaria, así como a las tareas relacionadas con la estabilidad financiera y otras funciones del Sistema Europeo de Bancos Centrales y de la Junta Europea de Riesgo Sistémico. Estas estadísticas también son utilizadas por autoridades públicas, organizaciones internacionales, participantes en los mercados financieros, medios de comunicación y el público en general, y ayudan al BCE a aumentar la transparencia de su trabajo.
En 2024, el BCE amplió la población informadora de las estadísticas de los mercados monetarios, lo que aumentó la representatividad del correspondiente conjunto de datos. También publicó nuevas estadísticas sobre las cuentas financieras ―en particular datos más pormenorizados sobre las tenencias de participaciones en fondos de inversión por parte de los hogares― y comenzó a publicar nuevos detalles sobre las entidades con fines especiales en las estadísticas exteriores trimestrales. Asimismo, continuaron desarrollándose indicadores estadísticos relacionados con el clima en el marco del plan del BCE sobre clima y naturaleza. El BCE siguió aplicando su estrategia de reducción de la carga informadora de las entidades de crédito sobre la base del marco de información integrada (IReF, por sus siglas en inglés) y del diccionario de información integrada de las entidades de crédito (BIRD, por sus siglas en inglés).
7.1 Avances en las estadísticas de la zona del euro para satisfacer las nuevas necesidades en materia de políticas
Ampliación de la población informadora de las estadísticas de los mercados monetarios de la zona del euro
El aumento de la población informadora de las estadísticas de los mercados monetarios (MMSR, por sus siglas en inglés) refuerza la calidad de las estadísticas de estos mercados en la zona del euro. El 1 de julio de 2024, la población informadora de estas estadísticas se amplió añadiendo 24 nuevas entidades a las 45 que ya presentaban información. En consecuencia, el tamaño de la muestra de varios países de la zona del euro se incrementó y la cobertura se extendió a Luxemburgo y Portugal por primera vez.
Los datos que aporten los nuevos agentes informadores se incluirán en el cálculo del tipo a corto plazo del euro (€STR) una vez que se haya determinado que la calidad de los datos es suficientemente buena. La ampliación de la población informadora favorece la representatividad, la robustez y la fiabilidad de las estadísticas de los mercados monetarios de la zona del euro.
Publicación de nuevas estadísticas sobre las cuentas financieras
Los datos detallados sobre las tenencias de participaciones en fondos de inversión por parte de los hogares muestran exposiciones a distintas clases de activos
En abril de 2024, el BCE comenzó a publicar datos sobre las tenencias de los hogares de participaciones en fondos de inversión desglosados por activo subyacente y sector de contrapartida. Estos datos ofrecen más información sobre las exposiciones indirectas de los hogares a través de los fondos de inversión, lo que permite realizar un análisis más preciso de su balance financiero y de su exposición a distintas clases de activos y contrapartes.
En octubre de 2024, tras una modificación de la Orientación sobre las exigencias de información estadística del BCE en materia de cuentas financieras trimestrales[77], el BCE empezó a publicar datos adicionales sobre las cuentas financieras de otras instituciones financieras (OIF) por subsector. Las OIF, que es el segundo sector financiero más importante de la zona del euro después de las instituciones financieras monetarias (IFM), prestan financiación fundamentalmente a las sociedades no financieras (SNF) y, en menor medida, a los hogares y a otros sectores. También desempeñan una función de canalización de fondos desde y hacia el resto del mundo.
Por último, los nuevos datos publicados sobre la emisión de valores representativos de deuda de las SNF a través de filiales instrumentales emisoras de valores (financing conduits) aportan información adicional sobre la financiación de mercado de las SNF en la zona del euro y en los países que la integran.
Nuevos datos sobre las entidades con fines especiales en las estadísticas exteriores
En abril de 2024, el BCE comenzó a publicar nuevos detalles de las entidades con fines especiales (EFE) en las estadísticas exteriores, según lo indicado en la versión modificada de la Orientación sobre las exigencias de información estadística del BCE en materia de estadísticas exteriores[78]. La finalidad de la nueva información trimestral sobre transacciones y posiciones transfronterizas de las EFE en la zona del euro y en los países que la integran, que comienza con los datos del primer trimestre de 2020, es conocer mejor el papel que desempeñan estas entidades en los distintos componentes de las estadísticas exteriores[79].
7.2 Desarrollo adicional de los indicadores estadísticos relacionados con el clima en el marco del plan del BCE sobre clima y naturaleza
El BCE publica tres grandes conjuntos de indicadores estadísticos relacionados con el cambio climático:
- Los indicadores sobre finanzas sostenibles ofrecen una visión general de las emisiones y las tenencias de residentes en la zona del euro de valores representativos de deuda vinculados a criterios de sostenibilidad. Proporcionan información sobre los fondos obtenidos para financiar proyectos sostenibles y la transición hacia una economía de cero emisiones netas.
- Los indicadores analíticos sobre emisiones de carbono de las entidades financieras facilitan información sobre la intensidad de carbono de sus carteras de valores y de préstamos y, por consiguiente, ayudan a evaluar el papel del sector en la financiación de la transición hacia una economía de cero emisiones netas, así como los riesgos asociados.
- Los indicadores analíticos sobre los riesgos físicos de las carteras de las entidades financieras evalúan los riesgos derivados del impacto de los fenómenos naturales provocados por el cambio climático —como inundaciones e incendios— en el rendimiento de las carteras de préstamos, de bonos y de acciones.
Estos indicadores se elaboran en estrecha colaboración con el Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC) y forman parte del plan sobre clima y naturaleza más amplio del BCE. Se compilan utilizando varios conjuntos de datos del BCE/SEBC y externos, como AnaCredit, la base de datos de carteras de valores (SHS, por sus siglas en inglés), la base de datos del Registro de Instituciones y Filiales (RIAD, por sus siglas en inglés) y datos sobre las emisiones de gases de efecto invernadero junto con información sobre riesgos físicos procedentes del Risk Data Hub (RDH) del Disaster Risk Management Knowledge Centre (DRMKC), de Copernicus, del Grupo Intergubernamental de Expertos sobre el Cambio Climático (IPCC, por sus siglas en inglés) y otros.
Los indicadores estadísticos relacionados con el cambio climático, sobre finanzas sostenibles, emisiones de carbono y riesgos físicos, se enriquecieron y actualizaron considerablemente
Los indicadores se actualizaron en abril de 2024. Los indicadores sobre finanzas sostenibles se enriquecieron con nuevos detalles sobre los niveles de certificación de los valores representativos de deuda sostenibles. La actualización de los indicadores sobre emisiones de carbono y riesgos físicos incluyó mejoras significativas en términos de concepto, cobertura, coherencia y granularidad[80]. En septiembre de 2024 se publicaron desgloses adicionales de los indicadores sobre finanzas sostenibles y los datos dejaron de catalogarse como datos experimentales para pasar a ser considerados estadísticas oficiales del SEBC.
Se continúa trabajando en los tres conjuntos de datos con el fin de seguir mejorando la calidad de la información y los desgloses disponibles. También se están investigando otras áreas en el contexto de la iniciativa sobre las limitaciones de los datos del G-20, en particular, la medición del gasto de adaptación, los aspectos relacionados con la cobertura de seguros y la inversión directa exterior (IDE), y el marco conceptual para la elaboración de indicadores prospectivos sobre los riesgos físicos y de transición. Junto con la mejora de los estándares estadísticos internacionales, como el Sistema de Cuentas Nacionales y el Manual de Balanza de Pagos, que facilitarán desgloses adicionales relacionados con el clima para un amplio conjunto de datos económicos, se espera que los trabajos en curso mencionados aumenten la disponibilidad de información sobre estos temas en los próximos años.
7.3 Mejora de la eficiencia en la remisión de información por las entidades de crédito
La estrategia del BCE de reducción de la carga informadora de las entidades de crédito se basa en tres pilares: i) cooperación con otras autoridades europeas y nacionales para integrar la información estadística, prudencial y de resolución; ii) incorporación de la información estadística existente en el marco de información integrada (IReF, por sus siglas en inglés) como primer paso hacia una integración más amplia, y iii) colaboración con el sector bancario para conectar las exigencias de información de las autoridades, y el lenguaje y las definiciones utilizadas por las entidades mediante el diccionario de información integrada de las entidades de crédito (BIRD, por sus siglas en inglés).
El Comité Conjunto de Información Bancaria está estableciendo conceptos y definiciones comunes para su utilización en la remisión de información
La cooperación con otras autoridades cobró impulso en 2024 con la creación del Joint Bank Reporting Committee (JBRC), en el que participan el BCE, la Autoridad Bancaria Europea, la Comisión Europea, la Junta Única de Resolución y las autoridades nacionales pertinentes. En 2024, el JBRC creó una subestructura denominada Reporting Contact Group (RCG), que reúne a expertos en información regulatoria de las entidades de crédito procedentes del sector bancario. El RCG sirve de canal ordinario para la cooperación y el intercambio de puntos de vista con las autoridades. La primera prioridad del JBRC es elaborar conceptos y definiciones comunes para utilizarlos en la información que se remite actualmente, así como en la nueva.
El objetivo del IReF es armonizar la presentación de información estadística entre las entidades de crédito de la zona del euro. En 2024, el BCE anunció que estaba previsto que la presentación de información con arreglo al IReF comenzara a finales de 2029. El nuevo calendario refleja los comentarios recibidos del sector bancario sobre la necesidad de asegurar que el IReF se implemente sin contratiempos.
En 2024, la colaboración en torno al BIRD, una iniciativa en la que participan las autoridades y la industria, sirvió para integrar los marcos supervisores y estadísticos por primera vez. El modelo integrado de datos, que especifica cómo pueden extraerse los datos de los sistemas internos de las entidades de crédito, y las reglas sobre cómo transformar la información en los informes exigidos por las autoridades se publicaron en el sitio web del BIRD.
Recuadro 5
Mejora de las estadísticas macroeconómicas para conocer mejor los vínculos financieros transfronterizos de la zona del euro
El BCE ha publicado varios desgloses nuevos de las estadísticas de balanza de pagos y posición de inversión internacional de la zona del euro y de las cuentas trimestrales de los sectores. La nueva información subsana las dificultades de medición relacionadas con la globalización, puestas de relieve en la revisión de la estrategia de política monetaria del BCE de 2021. Estas dificultades están relacionadas, en particular, con la presencia de empresas multinacionales y la expansión de las cadenas internacionales de intermediación financiera.
Ahora, en el conjunto de datos de balanza de pagos y posición de inversión internacional se dispone de datos más granulares por sector, área geográfica e instrumento financiero, así como de información separada para las entidades con fines especiales (EFE), que son especialmente útiles para analizar la evolución de la inversión de cartera y de la inversión directa exterior (IDE). Estas dos categorías de la balanza de pagos y posición de inversión internacional han sido los principales componentes que explican las fluctuaciones de los flujos financieros internacionales de la zona del euro en los últimos años[81]. El análisis de los flujos financieros también se mejora con nuevos datos sobre otras instituciones financieras (OIF) por subsector, ahora disponibles en las cuentas trimestrales de los sectores, y sobre la emisión de valores representativos de deuda de las sociedades no financieras (SNF) a través de filiales instrumentales emisoras de valores (financing conduits). Por último, los nuevos detalles de las cuentas trimestrales de los sectores sobre las tenencias de los hogares de participaciones en fondos de inversión, por tipo de inversión subyacente y sector de contrapartida, facilitan el análisis de la exposición de los hogares a diferentes clases de activos.
El mayor desglose sectorial de las estadísticas de balanza de pagos y posición de inversión internacional y los nuevos datos de las cuentas trimestrales de los sectores sobre las exposiciones indirectas de los hogares ponen de manifiesto que el sector de fondos de inversión es el principal tenedor de los valores de inversión de cartera emitidos por no residentes en la zona del euro[82]. Los desgloses más detallados por país de contrapartida ofrecen más información geográfica de los flujos financieros transfronterizos de la zona del euro frente a las economías avanzadas y a las emergentes[83].
Los nuevos datos publicados sobre las EFE y las OIF ponen de relieve el papel que desempeñan ambos tipos de instituciones en los vínculos financieros de la zona del euro. Las EFE, que tienen una relevancia significativa en un grupo específico de países, generan un impacto muy limitado en la actividad económica real del país en el que residen, al tiempo que registran flujos financieros considerables y representan alrededor del 30 % de los vínculos de IDE transfronterizos de la zona del euro (gráfico A)[84]. Las OIF proporcionan el 23 % y el 8 % de los préstamos concedidos a las SNF y a los hogares de la zona del euro, respectivamente. En torno al 15 % de la financiación total mediante valores representativos de deuda de las SNF se canalizó a través de filiales instrumentales emisoras de valores (financing conduits) situadas en otros países de la zona del euro.
Gráfico A
Descomposición analítica de las posiciones de IED de la zona del euro
(billones de euros, saldos a fin de período)

Fuentes: BCE y cálculos del BCE.
Notas: Los datos para 2024 corresponden al final de junio de 2024. «OIF» son las instituciones financieras que no son entidades de crédito, fondos del mercado monetario, fondos de inversión, empresas de seguros o fondos de pensiones, y que no están clasificadas como EFE. «SNF» se refiere a las sociedades no financieras, excluidas las que se clasifican como EFE. «Otros» abarca todos los demás sectores residentes.
8 Actividades de investigación del BCE
En esta sección se presenta información sobre las actividades de investigación del BCE relevantes para las políticas y se resumen los trabajos llevados a cabo en 2024. Primero se informa sobre la calidad de la investigación del BCE y a continuación se describen las cinco principales áreas de investigación y de asesoramiento en materia de políticas, así como los avances realizados durante el año, incluidos los relativos al estudio de las implicaciones de la inteligencia artificial. Las actividades del Research Task Force on Heterogeneity in Macroeconomics and Finance se detallan en el recuadro 6.
En 2024, los expertos del BCE desarrollaron una amplia actividad investigadora en temas económicos, monetarios y financieros, y realizaron importantes aportaciones a la formulación de políticas, incluida la revisión en curso de la estrategia de política monetaria. Los estudios basados en la encuesta sobre las expectativas de los consumidores y en la encuesta sobre la situación financiera y el consumo de los hogares, por ejemplo, continuaron proporcionando información muy relevante para la política monetaria.
Las actividades de investigación del BCE relevantes para la formulación de políticas obtienen reconocimiento internacional
El BCE se esfuerza por realizar trabajos de investigación punteros en ámbitos importantes para el trabajo de los bancos centrales. Desde diciembre de 2024, el BCE ocupa la primera posición en el ranking de instituciones de RePEc —un repositorio central de investigación económica— en el área de economía monetaria, seguido del Fondo Monetario Internacional (FMI) en segundo lugar y del Comité de Gobernadores de la Reserva Federal en el tercero. En el campo más amplio de la macroeconomía, el BCE ha avanzado una posición con respecto a 2023, y actualmente figura en el segundo puesto, después del Departamento de Economía de la Universidad de Harvard y delante del FMI. En el ámbito de la banca, el BCE se sitúa ahora a la cabeza de las instituciones tras ascender un puesto en comparación con 2023, por delante de la Chicago Booth School of Economics y el Banco de Pagos Internacionales (BPI). Entre los bancos centrales e instituciones similares de todo el mundo, el BCE ocupa el segundo lugar, detrás del FMI y delante del Comité de la Reserva Federal, el Banco de la Reserva Federal de Nueva York y el BPI. En Europa, el BCE es el tercero en todas las áreas y entre todas las instituciones, incluidas universidades (después de la London School of Economics and Political Science y la Paris School of Economics).
Cinco áreas de investigación en 2024
Los proyectos de investigación emprendidos durante 2024 pueden agruparse en cinco áreas temáticas generales que se beneficiaron en su totalidad de las aportaciones de los bancos centrales nacionales y de la colaboración dentro de los grupos de investigación (research clusters) del Sistema Europeo de Bancos Centrales. En primer lugar, en el ámbito del diseño y la implementación de la política monetaria se llevaron a cabo estudios sobre su diseño óptimo y sobre el nuevo marco operativo, y sobre otros temas relevantes como el funcionamiento de los mercados, los activos de garantía y el impacto de la política monetaria en la dinámica de la inflación. Se realizaron esfuerzos sustanciales de investigación para comprender mejor la evolución de los mecanismos de transmisión de la política monetaria bajo los auspicios de la red de investigación sobre los retos para la transmisión de la política monetaria en un mundo cambiante (Challenges for Monetary Policy Transmission in a Changing World, ChaMP). En segundo lugar, en los proyectos centrados en la evolución de la economía de la zona del euro se efectuaron análisis sobre las empresas, la productividad y la inversión; el consumo de los hogares y los mercados de trabajo, y los precios y la actividad económica, al tiempo que también se desarrollaron nuevos métodos y técnicas para mejorar las herramientas de predicción. En tercer lugar, en el área de análisis de la economía mundial se examinaron el sistema monetario internacional, los mercados financieros globales y los flujos comerciales internacionales, los efectos de desbordamiento a escala mundial, los determinantes internacionales de la inflación y las perspectivas de crecimiento global. En cuarto lugar, en relación con la integración y la gobernanza de la Unión Económica y Monetaria (UEM), gran parte de la labor investigadora se focalizó en los efectos de la política fiscal en la macroeconomía, incluidas la adopción del programa Next Generation EU (NGEU), la reforma del marco fiscal de la UE, las interrelaciones entre la política fiscal y la inflación, así como las interacciones entre las políticas monetaria y fiscal. En quinto lugar, los estudios realizados en los ámbitos de la estabilidad financiera, las políticas (macro)prudenciales y la supervisión bancaria se centraron en la capacidad de resistencia del sector bancario y de las entidades no bancarias, en las implicaciones de la política monetaria para los mercados financieros y la estabilidad financiera, y en el diseño y la evaluación de las políticas prudenciales. En el ámbito de la supervisión bancaria, la investigación puso el foco, en particular, en la eficacia de la supervisión y en el impacto de la normativa climática sobre el comportamiento de las entidades de crédito. Las actividades de investigación sobre monedas digitales de bancos centrales continuaron durante 2024 y se centraron en las implicaciones de numerosas características de su diseño (como la remuneración, los límites a las tenencias y la privacidad).
Investigación sobre las implicaciones de la inteligencia artificial
La rápida evolución de la inteligencia artificial (IA) ha impulsado sustanciales esfuerzos de investigación en el BCE para comprender mejor las implicaciones de la IA para la economía y la formulación de políticas. Un área objeto de especial atención en 2024 fue el uso de técnicas de IA para el análisis económico, como la elaboración de previsiones económicas y el análisis de la comunicación de los bancos centrales. Con respecto al primer tema, se exploró el uso de técnicas de aprendizaje automático en la elaboración de previsiones de inflación. Estas técnicas tienen la capacidad de analizar dinámicas económicas específicas y, con ello, mejorar las previsiones en momentos turbulentos. En otro trabajo se utilizaron los indicadores de sentimiento obtenidos del análisis textual de noticias efectuado por grandes modelos de lenguaje (LLM, por sus siglas en inglés) para elaborar previsiones a corto plazo de la actividad económica[85]. En cuanto a la comunicación de los bancos centrales, el análisis textual generado por LLM se empleó para estudiar cómo influye la comunicación del BCE en los mercados financieros, especialmente en momentos de incertidumbre económica. Esta línea de investigación proporciona información sobre cómo el análisis del sentimiento extraído de la comunicación del banco central puede ayudar a comprender mejor las expectativas de los mercados sobre la inflación y los tipos de interés[86].
Información actualizada sobre las publicaciones del BCE
Los trabajos de investigación realizados en el BCE en 2024 siguieron proporcionando resultados de alta calidad. El BCE publicó 124 documentos en la serie de documentos de trabajo (Working Paper Series) y doce artículos en el Boletín de Investigación (Research Bulletin). Muchos de los documentos de trabajo también se publicaron externamente en revistas académicas.
Recuadro 6
El Research Task Force on Heterogeneity in Macroeconomics and Finance
Los instrumentos de política monetaria, como los tipos interés oficiales del BCE, afectan a los mercados financieros y no pueden adaptarse a segmentos específicos de la población. Por tanto, tradicionalmente, en el análisis de la política monetaria se ha adoptado una perspectiva macroeconómica y se ha estudiado cómo las decisiones del banco central influyen en la inflación y en otras variables agregadas como la renta y el desempleo de toda la zona del euro, pero no sus efectos en las tasas de inflación, la renta disponible y las tasas de paro de grupos de la población seleccionados. Esta perspectiva tradicional cambió en la última década. La crisis financiera de 2008-2009 y la pandemia de COVID-19 suscitaron un nuevo interés en los efectos distributivos de las fluctuaciones cíclicas de variables económicas y en la manera en que se ven afectados por las políticas de estabilización, incluida la política monetaria. Las mejoras paralelas en los métodos de cálculo y en la capacidad computacional han permitido realizar estos análisis.
En 2022 se creó un nuevo grupo de trabajo para investigar las implicaciones macroeconómicas de la heterogeneidad de los agentes económicos de la zona del euro. El primer objetivo del grupo era analizar los efectos distributivos de las políticas del banco central en los hogares. El segundo era comprender mejor cómo la interacción de los comportamientos de diferentes hogares y empresas determina el mecanismo agregado de transmisión de la política monetaria, lo que posiblemente arroje resultados distintos de los obtenidos en los análisis que emplean la perspectiva tradicional agregada.
Por lo que respecta a los efectos distributivos de la política monetaria, el análisis partía de la premisa de que los diferentes instrumentos de política monetaria —desde los tipos de interés oficiales del BCE hasta las compras de activos a gran escala— pueden operar a través de canales de transmisión distintos. Por consiguiente, es posible que sus efectos en los hogares de la zona del euro sean dispares en función de sus fuentes de ingresos y de sus tenencias de activos. Los resultados sugieren que hay diferencias, pero limitadas. Algunos estudios arrojan luz sobre la heterogeneidad de los costes de la escalada de la inflación en 2021-2023. Los hogares con rentas más bajas fueron los más afectados por la disminución del poder adquisitivo de sus ingresos. No obstante, si se considera el desglose por tenencias de activos, las pérdidas de bienestar fueron especialmente importantes para los pensionistas, debido a la caída del valor real de sus tenencias relativamente elevadas de activos nominales. Todos estos análisis pudieron realizarse gracias a la disponibilidad de datos obtenidos de la encuesta del Eurosistema sobre la situación financiera y el consumo de los hogares.
En circunstancias normales, tener en cuenta la heterogeneidad proporciona una perspectiva más completa sobre el mecanismo de transmisión de la política monetaria, pero no afecta a las estimaciones de su impacto agregado en comparación con la perspectiva tradicional del conjunto de la economía. Con todo, existen situaciones concretas ―por ejemplo cuando perturbaciones importantes provocan cambios significativos en la distribución de la riqueza― en las que la heterogeneidad es fundamental para tener una visión completa del impacto de las decisiones de política monetaria. Evidencia reciente sugiere que la heterogeneidad entre las empresas puede ser particularmente relevante en este contexto. En consecuencia, la incorporación de modelos empíricamente realistas ―capaces de replicar aspectos clave de la heterogeneidad de los hogares y las empresas― al conjunto de modelos de política monetaria disponibles resulta de gran utilidad.
Una parte de las actividades del grupo de trabajo también ha consistido en estudiar los efectos de las políticas macroprudenciales. En el caso de indicadores como la ratio préstamo-ingresos de las hipotecas concedidas a los hogares, tener en cuenta la heterogeneidad de este sector es aún más importante para entender las implicaciones de las políticas, ya que, por su naturaleza, estos indicadores solo afectan a grupos específicos de hogares.
9 Asuntos jurídicos
En este capítulo se describen los asuntos del Tribunal de Justicia de la Unión Europea (TJUE) relativos al BCE y se proporciona información sobre los dictámenes del BCE y los casos de incumplimiento de la obligación de consultar al BCE en relación con proyectos de disposiciones legales que entren en su ámbito de competencia. Asimismo, se explica el seguimiento por parte del BCE del cumplimiento de las prohibiciones relativas a la financiación monetaria y al acceso privilegiado.
9.1 Asuntos del Tribunal de Justicia de la Unión Europea relativos al BCE
El Tribunal General confirmó que el BCE ejerce competencias de supervisión en aras del interés público, concretamente para asegurar el buen funcionamiento y la estabilidad de los mercados
En junio de 2024, el Tribunal General desestimó el recurso de indemnización interpuesto por los accionistas de Banca Carige (T-134/21, Malacalza Investimenti y Malacalza/BCE), en el que solicitaban la indemnización del perjuicio que alegaban haber sufrido como consecuencia de acciones emprendidas por el BCE en el contexto del ejercicio de sus funciones de supervisión del banco entre 2014 y 2019. En su sentencia, el Tribunal General constató, en particular, que el ejercicio de las competencias de supervisión por parte del BCE persigue un objetivo de interés público en el buen funcionamiento y la estabilidad de los mercados. Por lo tanto, la responsabilidad extracontractual del BCE por actos y omisiones relacionados con el ejercicio de las competencias de supervisión es limitada, ya que requeriría que se haya infringido una norma jurídica que tiene por objeto conferir derechos a los particulares. Al mismo tiempo, el Tribunal General reconoció, en consonancia con la jurisprudencia existente, que una violación de los principios generales del Derecho —como el principio de buena administración— puede generar responsabilidad extracontractual. Sin embargo, en este caso, el Tribunal General estimó que no se había producido ninguna infracción. Este asunto representó la primera oportunidad para que el TJUE se pronunciase sobre el fondo de un recurso de indemnización por una actuación supervisora del BCE. Actualmente está pendiente el recurso de casación (C-557/24 P, Malacalza Investimenti y Malacalza/BCE).
El Tribunal General confirmó la correcta aplicación del marco del Pilar 2 por parte del BCE
En junio de 2024, el Tribunal General desestimó siete recursos interpuestos por entidades de crédito supervisadas[87] que solicitaban la anulación de la exigencia de deducción y la correspondiente obligación de información impuesta en relación con los compromisos de pago irrevocables contraídos con los sistemas nacionales de garantía de depósitos y el Fondo Único de Resolución como parte de sus aportaciones ex ante. El BCE había impuesto esas medidas en el marco del Pilar 2 para cubrir el riesgo de sobrevaloración de la posición de capital de la entidad, debido a la falta de consideración de la pérdida económica resultante de la transferencia de la garantía aportada como respaldo de los compromisos de pago irrevocables, que ya no podía utilizarse para cubrir pérdidas de forma continuada. El BCE impuso esas medidas con arreglo a una nueva metodología diseñada para tener en cuenta las sentencias del Tribunal General de 2020 que anularon las decisiones por las que se impusieron las mismas medidas por la falta de una valoración individual que determinara si el riesgo identificado estaba gestionado y cubierto de forma adecuada por los procesos establecidos por las entidades y por el capital y la liquidez que poseían. Por consiguiente, esas nuevas decisiones del BCE se adoptaron con una motivación mejorada con el fin de reflejar mejor la valoración individual realizada. El Tribunal General las ratificó en las siete sentencias mencionadas anteriormente confirmando que el BCE había aplicado de manera correcta el artículo 16 del Reglamento del MUS[88] cuando valoró si las entidades de crédito estaban expuestas a un riesgo insuficientemente cubierto e impuso una medida para cubrirlo. Cuatro de los siete bancos han recurrido sus sentencias individuales, y actualmente están pendientes los recursos ante el TJUE.
Por primera vez, el Tribunal de Justicia interpretó las disposiciones de un Reglamento del BCE que impone obligaciones de información estadística a las entidades financieras
En noviembre de 2024, el TJUE (Sala Quinta) dictó sentencia en un procedimiento prejudicial presentado por el Tribunal Administrativo Federal de Alemania (asuntos acumulados C-758/22 y C-759/22). En este caso, el órgano jurisdiccional remitente pretendía aclarar si varias mutualidades de previsión social de Alemania eran fondos de pensiones en el sentido del Reglamento (UE) n.º 2018/231 del Banco Central Europeo, de 26 de enero de 2018, sobre las obligaciones de información estadística de los fondos de pensiones y, por tanto, estaban sujetas a las exigencias de información estadística del BCE. Los recurrentes alegaban que se trataba de fondos de la seguridad social y, por tanto, no estaban sujetos a las exigencias de información del BCE. El Tribunal determinó que los recurrentes podían ser clasificados como fondos de pensiones, ya que sus actividades cumplían cuatro criterios necesarios para ser clasificados en este sector. En resumen: i) su función era ofrecer prestaciones que cubren los riesgos de jubilación, fallecimiento e invalidez; ii) gozaban de autonomía de gestión y elaboraban un conjunto completo de cuentas; iii) la gran mayoría de sus afiliados estaba sujeta a una obligación de afiliación a las mutualidades de previsión social, que no estaban autorizadas, en principio, a prestar sus servicios a otras personas, y iv) los servicios no estaban garantizados por las Administraciones Públicas y dependían del importe de las cotizaciones pagadas y del éxito de las mutualidades de previsión social en la gestión de sus activos. El asunto es importante, ya que confirma que el BCE tiene derecho a recopilar información estadística sobre las actividades financieras de los recurrentes en su condición de fondos de pensiones. Dado que los fondos de pensiones juegan un papel importante en la economía de la zona del euro, esta información es necesaria para desempeñar las funciones del Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC), en particular las relativas a la política monetaria.
9.2 Dictámenes del BCE y casos de incumplimiento
El artículo 127, apartado 4, y el artículo 282, apartado 5, del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea requieren que el BCE sea consultado acerca de cualquier propuesta de acto de la UE o proyecto de disposición legal nacional que entre en su ámbito de competencia. Todos los dictámenes emitidos por el BCE se publican en EUR-Lex.
Se produjeron nueve casos de incumplimiento de la obligación de consultar al BCE sobre proyectos de disposiciones legales
En 2024 se registraron nueve casos claros e importantes de incumplimiento de la obligación de consultar al BCE sobre proyectos de disposiciones legales. Cinco de estos casos se referían a actos jurídicos de la Unión y cuatro a disposiciones legales nacionales. El BCE emitió dictámenes por iniciativa propia en siete casos. En dos casos se emitió una carta por incumplimiento.
El primer caso de la UE estaba relacionado con una propuesta de Directiva de la UE sobre fondos de inversión alternativos (FIA) y se consideró claro e importante porque se refería al acceso del SEBC a datos detallados sobre el sector de los FIA, así como a las exigencias estadísticas del BCE con respecto a este sector. El segundo caso de la UE hacía referencia al Reglamento por el que se crea la Autoridad de Lucha contra el Blanqueo de Capitales y la Financiación del Terrorismo (AMLA, por sus siglas en inglés). Este caso se considera claro e importante porque contiene disposiciones relativas a la cooperación entre la AMLA y el BCE. El tercer caso de la UE estaba relacionado con la Directiva relativa a la eficiencia energética de los edificios. Este caso se considera claro e importante debido a la necesidad del BCE de acceder a los certificados de eficiencia energética. El cuarto caso de la UE se refería a la Directiva sobre diligencia debida de las empresas en materia de sostenibilidad. Este caso se considera claro e importante por su relevancia para la gestión de los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza (ASG) de los bancos y la necesidad de garantizar la coordinación y el intercambio de información entre todas las autoridades respectivas[89]. El quinto caso de la UE hacía referencia al Reglamento relativo a la transparencia e integridad de las actividades de calificación ASG. Este caso se consideró claro e importante porque se refiere a la evaluación independiente que realiza el Eurosistema de los requisitos a las garantías.
El primer caso nacional de incumplimiento se refiere a legislación búlgara que afecta al Българска народна банка (Banco Nacional de Bulgaria). Este caso se considera claro e importante porque el nombramiento temporal del gobernador o un subgobernador del Banco Nacional de Bulgaria como primer ministro en funciones plantea cuestiones importantes relativas a la independencia de dicho banco central. El segundo caso se refiere a una ley griega que transfiere las participaciones restantes del Estado en bancos griegos a un organismo público diferente. Este caso se considera claro e importante porque la ley tiene implicaciones para las entidades de crédito griegas sujetas a la supervisión directa del BCE. El tercero se refiere a una ley húngara que incluye al Magyar Nemzeti Bank dentro del ámbito de aplicación de la ley sobre ciberseguridad. Este caso se considera claro e importante en vista de su impacto en la independencia de dicho banco central. El cuarto caso se refiere a la legislación maltesa que afecta a la remuneración del gobernador y de los subgobernadores del Bank Ċentrali ta’ Malta/Central Bank of Malta. Este caso se considera claro e importante en vista de su impacto en la independencia de dicho banco central.
El BCE adoptó cuatro dictámenes sobre propuestas de actos jurídicos de la Unión
El BCE adoptó cuatro dictámenes sobre propuestas legislativas de la UE relativas a: i) servicios de pago y de dinero electrónico; ii) acuerdos monetarios con terceros países que utilizan el euro; iii) obligaciones de información en los ámbitos de los servicios financieros y del apoyo a la inversión, y iv) el marco para el acceso a los datos financieros.
El BCE adoptó 38 dictámenes sobre proyectos de disposiciones legales nacionales
El BCE adoptó 38 dictámenes sobre proyectos de disposiciones legales nacionales. Los dictámenes sobre disposiciones legales nacionales abarcan a menudo más de un tema. El BCE adoptó:
- diez dictámenes referidos al acceso al efectivo;
- seis dictámenes relativos a bancos centrales nacionales (BCN);
- cinco dictámenes sobre temas relacionados con el Fondo Monetario Internacional;
- cuatro dictámenes relacionados con impuestos especiales a la banca o impuestos sobre las transacciones financieras;
- dos dictámenes en materia de ciberseguridad;
- dos dictámenes sobre sanciones internacionales;
- un dictamen referente a la introducción del euro;
- un dictamen sobre la vigilancia de los sistemas de pago;
- un dictamen relacionado con las exigencias de reservas mínimas;
- un dictamen en materia de criptoactivos;
- un dictamen relativo a ayudas a prestatarios;
- un dictamen sobre la resolución de las entidades de contrapartida central;
- un dictamen acerca de la aplicación de los requerimientos de registro de actividades de representación de intereses (lobbying activities) al personal de un BCN;
- un dictamen referido a la provisión de liquidez de emergencia por un BCN;
- un dictamen sobre la presentación de información de estadísticas sobre pagos;
- un dictamen relacionado con un consejo nacional de estabilidad financiera.
9.3 Cumplimiento de las prohibiciones relativas a la financiación monetaria y al acceso privilegiado
En general, las disposiciones de los artículos 123 y 124 del Tratado se cumplieron
De conformidad con lo dispuesto en el artículo 271, letra d, del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea, el BCE tiene encomendada la tarea de supervisar el cumplimiento de las prohibiciones recogidas en los artículos 123 y 124 del Tratado y en los Reglamentos (CE) n.º 3603/93 y n.º 3604/93 del Consejo por parte de los bancos centrales nacionales (BCN) de la UE. Con arreglo al artículo 123, queda prohibida la autorización de descubiertos o la concesión de cualquier otro tipo de créditos por el BCE y por los BCN en favor del sector público de los Estados miembros y de las instituciones u organismos de la UE, así como la adquisición en el mercado primario de instrumentos de deuda emitidos por estas instituciones. En virtud del artículo 124, queda prohibida cualquier medida, que no se base en consideraciones prudenciales, que establezca un acceso privilegiado del sector público de los Estados miembros y de las instituciones u organismos de la UE a las entidades financieras. En paralelo al Consejo de Gobierno del BCE, la Comisión Europea supervisa el cumplimiento de estas disposiciones por parte de los Estados miembros.
El BCE también supervisa las adquisiciones realizadas por los BCN de la UE en el mercado secundario de instrumentos de deuda del sector público del Estado miembro de que se trate, del sector público de otros Estados miembros y de organismos e instituciones de la UE. De conformidad con los considerandos del Reglamento (CE) n.º 3603/93 del Consejo, las adquisiciones de instrumentos de deuda del sector público en el mercado secundario no deben servir para eludir el objetivo del artículo 123 del Tratado.
El ejercicio de seguimiento realizado por el BCE en 2024 confirmó que, en general, se cumplieron las disposiciones de los artículos 123 y 124 del Tratado.
El BCE seguirá efectuando un seguimiento de la vinculación del Magyar Nemzeti Bank con la Bolsa de Budapest, ya que la adquisición de una participación mayoritaria en la Bolsa de Budapest por parte del Magyar Nemzeti Bank en 2015 podría seguir planteando problemas de financiación monetaria.
La financiación por parte de los BCN de las obligaciones del sector público con respecto al Fondo Monetario Internacional (FMI) no se considera financiación monetaria siempre que resulte en activos extranjeros que tengan todas las características de activos de reserva. Sin embargo, las donaciones financieras proporcionadas en años anteriores por el Nationale Bank van België/Banque Nationale de Belgique y la Banque de France a través del FMI para aliviar la deuda de países pobres muy endeudados no generaron ningún activo extranjero y, por consiguiente, siguen requiriendo medidas correctivas.
La financiación del Servicio Ejecutivo de la Comisión de Prevención del Blanqueo de Capitales e Infracciones Monetarias (Sepblac) por parte del Banco de España no es compatible con la prohibición de financiación monetaria establecida en el artículo 123, dado que el Sepblac es un organismo del sector público. Por tanto, deberían reconsiderarse los acuerdos con el Sepblac de cara a garantizar el cumplimiento de la prohibición.
10 El BCE en el contexto internacional y de la UE
En 2024, el BCE siguió manteniendo un diálogo abierto con sus interlocutores europeos e internacionales. La interacción entre el BCE y el Parlamento Europeo es una parte esencial del marco de rendición de cuentas del BCE. El BCE participó en comparecencias ordinarias e intercambió correspondencia con la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios (ECON) del Parlamento Europeo. Asimismo, interactuó con la ECON como parte de sus trabajos en curso sobre un euro digital. En el ámbito internacional, el BCE mantuvo contactos con los socios del G-20, subrayando la necesidad de reforzar la capacidad de resistencia tanto del sector bancario como del sector financiero no bancario y de avanzar en la aplicación de las hojas de ruta acordadas en el G-20 y de Basilea III. El BCE también contribuyó a los debates sobre políticas relevantes para la banca central celebrados en el Fondo Monetario Internacional (FMI), en particular en relación con las políticas y facilidades de préstamo del FMI para economías emergentes y países de bajos ingresos.
10.1 Rendición de cuentas del BCE
La rendición de cuentas es una contrapartida esencial de la independencia
El Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (TFUE) otorga al BCE independencia para garantizar que pueda cumplir su mandato de estabilidad de precios sin interferencias políticas. Esta independencia lleva aparejada la obligación de rendir cuentas de su actividad ante el Parlamento Europeo, el órgano que representa a los ciudadanos de la Unión Europea. Las prácticas de rendición de cuentas del BCE, basadas en el artículo 284, apartado 3, del TFUE, facilitan un diálogo bidireccional entre el BCE y el Parlamento Europeo que permite al BCE explicar sus políticas y decisiones y escuchar las inquietudes de los representantes electos de los ciudadanos. Además, el control jurisdiccional por parte del Tribunal de Justicia de la Unión Europea complementa el marco de rendición de cuentas del BCE.
El BCE continuó interactuando con el Parlamento Europeo y estableció relaciones con los nuevos representantes electos
En junio de 2024, los ciudadanos de la UE eligieron un nuevo Parlamento Europeo, por lo que este estuvo en receso entre finales de abril y principios de julio. Por ello, la presidenta del BCE participó en tres comparecencias ordinarias ante la ECON, una en febrero con la Comisión saliente y dos en el segundo semestre del año con los nuevos miembros electos. La presidenta también intervino en el debate plenario sobre el Informe Anual 2022 del BCE. Estas actividades facilitaron el intercambio de opiniones sobre las principales decisiones de política monetaria y otras cuestiones de banca central. El vicepresidente también presentó el Informe Anual 2023 del BCE ante la ECON en abril. Asimismo, el BCE publicó en abril sus comentarios sobre la resolución del Parlamento Europeo relativa al Informe Anual 2022.
A lo largo del año, el BCE respondió a doce preguntas remitidas por escrito por miembros del Parlamento Europeo. En ellas se abordaban temas como la política monetaria, las perspectivas económicas, el euro digital y cuestiones institucionales del BCE. Tras la elección del nuevo Parlamento, en septiembre se celebró una sesión introductoria sobre el BCE para que los eurodiputados se familiarizasen con las actividades del BCE y sus obligaciones de rendición de cuentas. En noviembre de 2024, una delegación de la ECON integrada por varios nuevos miembros del Parlamento Europeo realizó la visita anual al BCE en Fráncfort del Meno.
El diálogo sobre el euro digital continuó
A lo largo de 2024, el BCE continuó colaborando estrechamente con el Parlamento Europeo en la fase de preparación del euro digital. Piero Cipollone, miembro del Comité Ejecutivo, participó en dos comparecencias ante la ECON para presentar información actualizada sobre los avances del proyecto del euro digital[90]. Además, la presidenta de la ECON y los miembros de esta Comisión siguieron recibiendo notificaciones con información de los progresos más importantes en relación con el euro digital. El BCE también participó en eventos organizados por miembros del Parlamento Europeo para abordar distintos aspectos del proyecto del euro digital.
El apoyo al euro alcanzó un máximo histórico en 2024
La encuesta del Eurobarómetro estándar de otoño de 2024 puso de manifiesto que el 81 % de los encuestados de la zona del euro apoyan la moneda única, lo que marca un nuevo máximo histórico. Asimismo, el 51 % de los encuestados de la zona expresaron su confianza en el BCE, el nivel más alto desde el otoño de 2009 y un aumento de 8 puntos porcentuales con respecto al mismo período de 2023. El BCE sigue comprometido a interactuar de forma constructiva con el Parlamento Europeo y con los ciudadanos de la zona del euro. Al explicar sus decisiones, abordar las preocupaciones del público y mantener un diálogo abierto, el BCE trata de reforzar la confianza y asegurar el cumplimiento efectivo de sus obligaciones de rendición de cuentas.
10.2 Relaciones internacionales
G-20
La presidencia del G-20 promovió la cooperación multilateral pese a las considerables tensiones geopolíticas
Durante la presidencia brasileña del G-20 en 2024, a pesar de la relajación de las presiones inflacionistas y de la resiliencia económica global, la economía mundial siguió afrontando retos significativos como consecuencia de la guerra de Rusia contra Ucrania y de la escalada de los conflictos en Oriente Próximo. Pese a las tensiones geopolíticas, la presidencia brasileña avanzó con éxito en la cooperación multilateral, y se llegó a un consenso sobre los comunicados publicados en las reuniones de julio y octubre de los ministros de Finanzas y los gobernadores de los bancos centrales del G-20, así como sobre la Declaración de los Líderes de Río de Janeiro de noviembre. Las prioridades se centraron en la desigualdad, el cambio climático, el desarrollo sostenible, el refuerzo del papel de los bancos multilaterales de desarrollo, la estabilidad financiera y la cooperación internacional en materia tributaria. Se adoptó una hoja de ruta del G-20 con el objetivo de que los bancos multilaterales de desarrollo sean mejores, más grandes y más eficaces. El BCE acogió con satisfacción el reconocimiento por parte de la presidencia brasileña del papel que desempeña el Consejo de Estabilidad Financiera (FSB, por sus siglas en inglés) en la regulación del sector bancario y del sector financiero no bancario, lo que subraya la necesidad de aplicar: i) la hoja de ruta del G-20 y las recomendaciones del FSB sobre los criptoactivos; ii) la hoja de ruta del G-20 relativa a los pagos transfronterizos; iii) Basilea III, y iv) las recomendaciones del FSB sobre los intermediarios financieros no bancarios. El BCE también hizo hincapié en la importancia de regular las tecnologías innovadoras, como la inteligencia artificial y la tokenización, para asegurar que sus beneficios se sustenten en marcos regulatorios sólidos.
Políticas relacionadas con el FMI y con la arquitectura financiera internacional
El BCE contribuyó a los debates del FMI para seguir prestando asistencia a las economías emergentes y a los países de bajos ingresos
El BCE siguió participando activamente en los debates sobre el sistema monetario y financiero internacional que se celebraron en el FMI[91] y en otros foros. En 2024, el FMI dio pasos significativos para seguir prestando asistencia a las economías emergentes y a los países de bajos ingresos.
En octubre, el FMI dio la bienvenida a la nueva silla 25 de su Directorio Ejecutivo, que, junto con otras dos sillas, representa al África subsahariana y refuerza la voz y la representación de esa región. El FMI también reformó su política de cargos y sobretasas con el fin de reducir sustancialmente los costes de financiación de los países miembros en situación de necesidad, salvaguardando al mismo tiempo la capacidad financiera del FMI. En el caso de los países de bajos ingresos, el FMI fijó el rumbo para que el Fondo Fiduciario para el Crecimiento y la Lucha contra la Pobreza (PRGT, por sus siglas en inglés) se asiente sobre una base sostenible, en parte gracias a un acuerdo sobre un paquete de reformas de las políticas del PRGT y de su financiación de varios años de duración destinado a asegurar recursos que permitan que el FMI siga proporcionando financiación a tipos de interés concesionales. Además, llevó a cabo su primera revisión provisional del Fondo Fiduciario para la Resiliencia y la Sostenibilidad (RST, por sus siglas en inglés). Este fondo ayuda a países de renta baja y a países vulnerables de renta media a fortalecer su resiliencia macroeconómica al cambio climático y a futuras pandemias, contribuyendo así a la estabilidad futura de la balanza de pagos. Los Estados miembros de la UE y sus bancos centrales realizan importantes contribuciones tanto al PRGT como al RST. Los bancos centrales de la UE solo pueden realizar aportaciones si el activo resultante contra el fondo tiene la consideración de activo de reserva, lo que impide las contribuciones en forma de subvenciones como concesiones o donaciones. El BCE también continuó respaldando iniciativas internacionales para ayudar a los países vulnerables a abordar las crecientes vulnerabilidades derivadas de la deuda, en particular la mejora del Marco Común para el Tratamiento de la Deuda del G-20 y la iniciativa del FMI y del Banco Mundial para apoyar a países con problemas de liquidez pero cuya deuda es sostenible.
Tres años después de la última asignación general de derechos especiales de giro (DEG) realizada por el FMI en 2021, el BCE y los bancos centrales nacionales del Eurosistema revisaron sus acuerdos de canje voluntarios (VTA, por sus siglas en inglés) de DEG con el FMI[92]. En noviembre, el Consejo de Gobierno del BCE concluyó que los actuales VTA del Eurosistema siguen siendo adecuados, incluidos los rangos para las operaciones de canje.
Recuadro 7
La Casa del Euro: un primer año de vibrante colaboración
¿Qué es la Casa del Euro?
La Casa del Euro, situada en el corazón del barrio europeo de Bruselas, es un espacio compartido por el BCE y siete bancos centrales nacionales (BCN) de la zona del euro ―el Deutsche Bundesbank, el Banc Ceannais na hÉireann/Central Bank of Ireland, el Banco de España, la Banque de France, la Banca d’Italia, el Bank Ċentrali ta’ Malta/Central Bank of Malta y la Banka Slovenije―. Además, el Hrvatska narodna banka ha enviado a un empleado en comisión de servicio al equipo del BCE destinado en Bruselas para ampliar la influencia de la nueva oficina. Asimismo, el Nationale Bank van België/Banque Nationale de Belgique, con sede en Bruselas, colabora estrechamente con la Casa del Euro. La oficina se inauguró oficialmente el 9 de noviembre de 2023 con el objetivo de promover la cooperación entre los bancos centrales del Eurosistema y de aumentar su visibilidad en Bruselas.
Transcurrido un año desde su inauguración, la Casa del Euro se ha convertido en un eje dinámico para la colaboración, el diálogo y el debate entre los bancos centrales y los principales agentes interesados de Bruselas. Los expertos del BCE y de los BCN destinados en la Casa del Euro trabajan conjuntamente para compartir conocimientos y transmitir las opiniones del Eurosistema a los responsables de la formulación de políticas, a los think tanks, a los representantes del sector privado y a los medios de comunicación. También prestan apoyo a los miembros del Consejo de Gobierno del BCE y al personal del Eurosistema en sus interacciones en Bruselas.
La Casa del Euro ha logrado su ambición de interactuar con los distintos agentes interesados en los temas relacionados con las políticas de la UE que son de relevancia para el Eurosistema. Los eventos organizados en la Casa del Euro son una manera de que el BCE y los BCN participantes lleguen a un público más amplio e intercambien puntos de vista con los distintos grupos de agentes. Entre los temas tratados en estos eventos se incluyen la política monetaria del BCE, así como el euro digital, la unión de los mercados de capitales, el cambio climático y el impacto de la digitalización.
Aspectos destacados en 2024
Un evento destacado que cabe mencionar fue la celebración de una mesa redonda de alto nivel sobre el euro digital, un importante proyecto dirigido a salvaguardar la soberanía monetaria de Europa a medida que aumenta la digitalización de nuestra economía. En septiembre, Piero Cipollone, miembro del Comité Ejecutivo del BCE, y la entonces comisaria de la UE, Mairead McGuinness, se reunieron con representantes de asociaciones de consumidores, del comercio minorista y del sector bancario para analizar las ventajas de un euro digital. Este encuentro puso de relieve el compromiso del BCE de interactuar con todas las partes interesadas en el contexto del proyecto del euro digital.
La Casa del Euro también organizó sesiones con intervenciones públicas y debates centrados en las perspectivas económicas, la política monetaria y los retos estructurales de la zona del euro. En marzo, Piero Cipollone pronunció su discurso inaugural de política monetaria en la Casa del Euro. Durante el año, expertos del BCE realizaron periódicamente presentaciones para informar a la comunidad de Bruselas sobre la orientación de la política monetaria del BCE y las perspectivas económicas de la zona del euro. Asimismo, el BCE y el FMI celebraron eventos conjuntos en mayo y en noviembre que brindaron a los participantes la oportunidad de analizar los retos económicos a los que se enfrenta Europa y los esfuerzos para fomentar la innovación, la inversión y la productividad.
Asimismo, el BCE y los BCN colaboraron en varios eventos especiales que tuvieron lugar en la Casa del Euro durante el año. Uno de ellos se dedicó a la unión de los mercados de capitales, un tema de gran relevancia para el Eurosistema. En junio de 2024, ponentes de alto nivel del BCE y de los BCN se reunieron para analizar la necesidad de avanzar con rapidez y de adoptar medidas concretas para culminar la unión de los mercados de capitales. Los participantes pusieron de relieve áreas prioritarias como proporcionar mejores prácticas para los inversores minoristas y desarrollar el mercado de titulizaciones de la UE. Otros dos eventos, organizados conjuntamente por el BCE y los BCN participantes, se focalizaron, respectivamente, en el crecimiento de las grandes empresas tecnológicas (big tech) en el sector financiero y en los intermediarios financieros no bancarios.
2025 y años posteriores
La Casa del Euro mantiene su compromiso de interactuar con los principales grupos de agentes presentes en Bruselas para transmitir las opiniones del Eurosistema y recabar información relevante para los responsables de la toma de decisiones del Eurosistema. Este primer año ha demostrado el valor de la colaboración entre el BCE y los BCN sobre el terreno en Bruselas y constituye un buen augurio para el futuro.
11 Promoción del buen gobierno y de la sostenibilidad social y medioambiental
El BCE desarrolla actividades importantes para abordar cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza (ASG). En su condición de institución pública, el BCE rinde cuentas ante los ciudadanos de la Unión Europea (UE) y sus representantes electos. Esta responsabilidad implica la comunicación y la interacción eficaces con diferentes sectores de la población, el mantenimiento de los estándares éticos más elevados y la transparencia, el empoderamiento de los empleados al tiempo que se promueve su bienestar, así como el análisis de los impactos y los riesgos asociados al clima y al medio ambiente. En 2024 se lograron varios hitos establecidos en el plan sobre clima y naturaleza del BCE.
11.1 Información actualizada sobre cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza
El BCE continuó trabajando en temas ambientales, sociales y de gobernanza en 2024
La descripción de los principales avances en cuestiones ASG en 2024 se complementa con información detallada en otras secciones de este Informe Anual y con información adicional disponible en el sitio web del BCE (cuadro 11.1).
En las secciones 11.2 y 11.3 se explica con detalle cómo el BCE llevó a cabo iniciativas relevantes en 2024 para reforzar constantemente sus marcos de gobernanza en su condición de institución europea, al tiempo que promovió la transparencia y la interacción con la ciudadanía. En la sección 11.2 se pone de relieve la manera en la que el BCE coopera estrechamente con instituciones homólogas a escala europea e internacional para fortalecer la ética, la integridad y la buena conducta, respondiendo también así al creciente interés del público por estos asuntos. En la sección 11.3 se presentan las iniciativas llevadas a cabo por el BCE para potenciar la comunicación con los ciudadanos y aumentar su transparencia y su accesibilidad al público. En la sección 11.4 se ofrecen un resumen de las políticas de personal y datos sobre cómo el BCE fomenta una cultura de trabajo abierta y promueve el desarrollo profesional, además de información actualizada sobre las iniciativas en materia de diversidad e inclusión, con una descripción de los principales cambios en 2024. Por último, en la sección 11.5 se aborda el trabajo del BCE en temas relacionados con el clima y el medio ambiente, y se ofrecen detalles sobre publicaciones más especializadas en esta área.
Cuadro 11.1
Sitios web y publicaciones del BCE con información detallada sobre cuestiones ASG
Cuestiones de gobernanza | Cuestiones sociales | Cuestiones ambientales |
---|---|---|
El cambio climático y el BCE | ||
Organización | Comunicación | Cambio climático y supervisión bancaria |
Ética | Diversidad e inclusión | Protección del medio ambiente en el BCE |
Marco jurídico | Arte y cultura | Billetes: medio ambiente, salud y seguridad |
Los riesgos climáticos se están incorporando cada vez más en el marco general de gestión de riesgos
Los riesgos ASG se analizan como parte del marco de gestión de riesgos financieros y no financieros del BCE, que se describe en el capítulo sobre gestión de riesgos de las Cuentas Anuales del BCE de 2024. Uno de los componentes de este marco es la prueba de resistencia climática del balance del Eurosistema[93], en la que el BCE evalúa la sensibilidad del perfil de riesgo financiero del Eurosistema al cambio climático. La primera prueba de resistencia climática se llevó a cabo en 2022 y desde entonces ha pasado a ser un ejercicio periódico que se realizó, de nuevo, en 2024.
11.2 Fortalecimiento de la ética y de la integridad
La Oficina de Cumplimiento y Gobernanza (CGO, por sus siglas en inglés) del BCE es responsable de establecer las normas deontológicas y de gobernanza con arreglo a los más altos estándares de conducta, y de vigilar el cumplimiento de dichas normas.
El Comité de Ética y Cumplimiento celebró sesiones temáticas sobre buena conducta a las que asistieron numerosas instituciones homólogas
En 2024, para apoyar a los bancos centrales nacionales y a las autoridades nacionales competentes en la aplicación de las Orientaciones Deontológicas, el Comité de Ética y Cumplimiento proporcionó asesoramiento sobre cuestiones relativas a las restricciones a las operaciones financieras privadas y los conflictos de intereses en relación con las actividades externas y las excedencias. Además, para maximizar las ventajas y los conocimientos adquiridos gracias a la diversidad de perspectivas, el Comité organizó sesiones temáticas con oradores externos a las que asistieron representantes de unas 50 instituciones y organizaciones públicas diferentes. Para celebrar el Día Mundial de la Ética, el Comité creó un banner con el lema: «Ética: nuestra brújula común» en todas las lenguas oficiales de la UE, que ponía de relieve nuestro compromiso común.
El BCE firmó el acuerdo por el que se crea el Órgano de normas éticas de la UE y participó activamente en los trabajos de la ENMO
En el ámbito europeo, el BCE, junto con otras instituciones europeas, trabajó en la adopción de un acuerdo interinstitucional por el que se establece el Órgano de normas éticas de la UE. La firma del acuerdo es un logro importante y decisivo para fomentar una cultura común de buena conducta entre las instituciones europeas. A escala internacional, el BCE participó activamente en el intercambio de conocimientos y mejores prácticas en el marco de la Red de Ética de las Organizaciones Multilaterales (ENMO, por sus siglas en inglés), tanto a través de su función de vicepresidencia de la red como de sus contribuciones a las reuniones, a los grupos de trabajo y a la conferencia anual organizada por la Organización Mundial de la Salud, reforzando así la colaboración mundial.
Mantener la concienciación sobre la ética y la integridad siguió siendo una de las máximas prioridades en 2024. Además de los programas para los empleados recién contratados, la CGO hizo hincapié en la organización de cursos de formación diseñados a medida para funciones de negocio específicas, así como de sesiones de actualización de conocimientos sobre las normas aplicables a las operaciones financieras privadas. También se emprendieron varias iniciativas de divulgación para celebrar el Día Mundial de la Ética, con stands y un test de conocimientos dirigido a todos los empleados del BCE. La CGO siguió avanzando en la digitalización para simplificar el acceso del personal a asesoramiento en materia de ética, por ejemplo, a través de dispositivos móviles del BCE. Además, el proceso para la presentación de declaraciones de intereses por parte de altos cargos del BCE se digitalizó, lo que permite presentarlas de forma más rápida y fluida.
Las iniciativas de sensibilización y los esfuerzos constantes por desarrollar herramientas digitales intuitivas se tradujeron en un incremento notable del número de solicitudes de asesoramiento en cuestiones de ética, que pasaron de 2.767 en 2023 a 3.070 en 2024 (gráfico 11.1). Los controles anuales de vigilancia del cumplimiento organizados por la CGO en 2024 volvieron a confirmar el cumplimiento generalizado de las normas sobre operaciones financieras privadas por parte de los empleados y de los altos cargos del BCE.
Gráfico 11.1
Resumen de las consultas formuladas por empleados del BCE en 2024

Fuente: BCE.
El Comité Deontológico apoya y asesora a altos cargos del BCE sobre cuestiones de ética
El Comité Deontológico independiente del BCE, junto con el Comité de Auditoría del BCE, complementa la estructura de gobernanza del BCE. Ofrece asesoramiento a altos cargos del BCE en cuestiones de ética, principalmente relacionadas con actividades privadas, así como con la incorporación a un nuevo empleo tras el cese en el cargo, y evalúa sus declaraciones de intereses. Asimismo, el Comité realiza un seguimiento de los avances europeos e internacionales en materia de ética y buena conducta. En 2024 revisó el cumplimiento de las normas sobre operaciones financieras privadas por parte de los altos cargos del BCE a través de las declaraciones de intereses y emitió 34 dictámenes sobre diversos temas, diez de ellos sobre restricciones post-empleo (varios de estos dictámenes incluyeron recomendaciones sobre el cumplimiento de los períodos de incompatibilidad). Los dictámenes del Comité Deontológico se publican en el sitio web del BCE seis meses después de su fecha de emisión.
11.3 Comunicación y transparencia de la política del BCE
Una comunicación clara es esencial para encauzar adecuadamente las expectativas de los expertos y del público en general
Dado que la inflación siguió disminuyendo en 2024 y se acerca al objetivo del 2 % en 2025, las políticas del BCE se han visto favorecidas por la estabilidad de las expectativas de inflación. Los estudios de investigación muestran cada vez más que las expectativas de los consumidores y las empresas son al menos tan importantes como las de los mercados financieros para la transmisión de la política monetaria. Con el fin de encauzar adecuadamente las expectativas, el BCE debe comunicarse de manera clara, coherente y comprensible.
Se realizaron esfuerzos concertados para explicar el primer recorte de los tipos de interés en junio de 2024
El año 2024 estuvo marcado por un giro en el ciclo de los tipos de interés oficiales. El primer recorte de tipos de interés en junio de 2024 fue acompañado de un esfuerzo de comunicación coordinado para explicar la decisión y las perspectivas económicas. Estos esfuerzos de comunicación incluyeron artículos de opinión de la presidenta que aparecieron en varios medios de comunicación de toda Europa (y también se publicaron como una entrada del Blog del BCE para explicar los motivos del recorte de los tipos de interés), así como entrevistas de los miembros del Comité Ejecutivo en televisión y radio. En la sección «El BCE explicado» se publicó, en todas las lenguas de la UE, una explicación sobre lo que significan las bajadas de tipos de interés para los ciudadanos en su vida cotidiana, que se difundió a través de las redes sociales del BCE.
Impulso de las actividades de divulgación
La política del BCE se debatió en los canales de mayor alcance
La subida de los precios se había convertido en un tema muy importante para los ciudadanos europeos durante la anterior escalada de la inflación y suscitó muchas preguntas y preocupaciones. El BCE continuó explicando sus actuaciones al público. Los estudios muestran que la mayoría de los europeos siguen informándose sobre el BCE en la televisión y en la radio, y se va llegando a un porcentaje de personas cada vez mayor también a través de las noticias en internet. Por tanto, los responsables de la política monetaria del BCE se centraron en la televisión, las redes sociales y los medios de interés general como canales para explicar la política del BCE y de qué forma consigue la estabilidad de precios en beneficio de todos.
Se exploraron nuevos formatos para llegar al público
Se estudiaron nuevos formatos, como un documental televisivo «entre bastidores» sobre cómo se toman las decisiones, con percepciones personales acerca del funcionamiento del BCE. Para establecer una conexión directa con los ciudadanos de todos los países de la zona del euro, los responsables de la política monetaria del BCE combinaron a menudo las visitas oficiales con oportunidades para interactuar con los ciudadanos en lugares como un mercado local de productos agrícolas o en escuelas y universidades. Se realizó un esfuerzo extraordinario para llegar a personas que posiblemente no suelen oír hablar de la política del banco central, mediante la aparición de la presidenta Christine Lagarde en un famoso programa televisivo de humor en el que explicó de manera sencilla y accesible qué hace el BCE para mantener los precios bajo control, cómo afecta la inteligencia artificial a la economía y cómo hacer frente a una mayor incertidumbre económica.
Los responsables de la política monetaria del BCE visitaron empresas
Para hacer tangible la relación entre la política monetaria y la actividad económica real, los responsables de la política monetaria del BCE visitaron empresas en distintos países de la zona del euro, por ejemplo, el laboratorio de computación cuántica Pasqal en Francia, el proveedor de tecnología y servicios Bosch en Alemania y el puerto de Róterdam en los Países Bajos. Estas visitas no solo ofrecen la oportunidad de debatir cómo está afectando la política del BCE a la economía y a las empresas, sino que también ayudan a los representantes del BCE a comprender mejor los retos económicos a los que se enfrentan las empresas, por ejemplo, el impacto de la regulación y la tecnología en la productividad, la dificultad de encontrar trabajadores bien formados o las exigencias de la transición ecológica.
El BCE siguió interactuando con la comunidad local de Fráncfort y la región del Rin-Meno
El BCE continuó esforzándose por ser un buen ciudadano institucional de la ciudad de Fráncfort del Meno y por interactuar directamente con la población local. En 2024, el BCE volvió a abrir sus puertas a los visitantes durante el evento cultural anual de la «Noche de los Museos». También participó en las celebraciones locales del Europafest el Día de Europa (9 de mayo) con un stand muy visitado. Asimismo, junto con la orquesta sinfónica de la radio de Fráncfort, organizó el concierto al aire libre «Europa Open Air» cerca de las oficinas del BCE, que tuvo gran éxito y contó con la asistencia de unos 17.000 invitados.

Petra Hielkema, presidenta de la Autoridad Europea de Seguros y Pensiones de Jubilación; Philip R. Lane, miembro del Comité Ejecutivo del BCE, y Joachim Nagel, presidente del Deutsche Bundesbank interactuando con ciudadanos locales en el stand del BCE durante el Europafest celebrado el 9 de mayo de 2024.
Mayor accesibilidad del BCE
El público sigue estando muy interesado en conocer el BCE desde dentro
A lo largo del año, el Centro de Visitantes del BCE recibió un total de 21.325 visitantes, 12.798 de los cuales acudieron a visitas guiadas y 8.527 asistieron a conferencias. En vista del gran interés del público por la arquitectura del edificio principal del BCE, en julio de 2024 se reanudaron las visitas arquitectónicas guiadas, a las que asistieron 1.040 visitantes. Esto es solo una fracción de las personas interesadas, pero el número de plazas en las visitas guiadas es reducido debido a las limitaciones de capacidad.
Se pusieron a disposición del público nuevos canales digitales
Para facilitar el acceso al BCE y a sus políticas —incluido el acceso online—, el BCE reformó la estructura de sus sitios web, adoptando un enfoque centrado en los usuarios, con el fin de facilitarles la búsqueda de información. Además, se creó un nuevo canal de WhatsApp para llegar a nuevos públicos que ofrece noticias, tests de conocimientos y otros contenidos interactivos. A finales de 2024 este canal había alcanzado más de 90.000 suscriptores. El BCE también continuó esforzándose por usar la tecnología para asegurar que la información que publica sea fácil de entender. Para ello, se está desarrollando una herramienta basada en inteligencia artificial que mejora el estilo de redacción y se están proporcionando más contenidos multilingües con la ayuda de eTranslation, el servicio de traducción automática de la Comisión Europea.
Los aniversarios son una oportunidad para llamar la atención del público sobre la labor del BCE
Los días especiales y los aniversarios brindan oportunidades de llamar la atención del público sobre el BCE y su labor, para explicar qué hace y cómo afecta a los ciudadanos. En 2024 se celebró el décimo aniversario del establecimiento de la supervisión bancaria europea. Para conmemorarlo, se actualizó y se mejoró el material sobre la supervisión bancaria expuesto en el Centro de Visitantes del BCE. El año pasado, el podcast del BCE cumplió también cinco años y este aniversario se celebró con un episodio especial de preguntas al BCE (#AskECB) en el que se respondieron las preguntas planteadas por ciudadanos. Por su parte, el canal de LinkedIn del BCE alcanzó los 500.000 seguidores.
Las solicitudes de acceso público aumentaron ligeramente en comparación con 2023 y se observó un interés sostenido por documentos sobre temas institucionales
El régimen de acceso público del BCE desempeña un papel fundamental en su política de transparencia. Dicho régimen fomenta la apertura y refuerza la legitimidad democrática del BCE al proporcionar el acceso más amplio posible a sus documentos, garantizando al mismo tiempo la protección de la independencia y el funcionamiento eficaz de la institución.
El número de solicitudes de acceso público a documentación del BCE se incrementó ligeramente en 2024 (74 solicitudes) en comparación con 2023 (73 solicitudes). Las solicitudes siguieron abarcando una amplia gama de temas relacionados con aspectos institucionales y de gobernanza, y cuestiones de banca central y de supervisión. Al igual que en 2023, el mayor número de solicitudes se referían a documentos relacionados con cuestiones institucionales, como la contratación pública. Para poner de relieve el compromiso del BCE con la transparencia, los documentos proporcionados en respuesta a solicitudes de acceso público se suelen poner a disposición de los ciudadanos a través del Registro público de documentos del BCE. Asimismo, el resumen de los temas tratados en las solicitudes de acceso a documentos recibidas por el BCE se actualizó para 2024.
Con el fin de que se conozca mejor el marco jurídico que rige el acceso a la documentación y de fomentar una cultura de transparencia en la institución, el BCE organizó iniciativas de divulgación dirigidas a toda su plantilla en el Día Internacional del Acceso Universal a la Información proclamado por la UNESCO.
El Defensor del Pueblo Europeo no señaló ningún caso de mala administración en el tratamiento de las solicitudes de acceso público por parte del BCE.
11.4 Empoderamiento de nuestros empleados para que destaquen en beneficio de Europa
Nuestro lugar de trabajo está pensado por y para las personas
En 2024, el BCE continuó dando prioridad a los esfuerzos para promover una cultura de trabajo abierta y un lugar de trabajo dinámico, inclusivo y favorable en el que cada persona esté empoderada para aportar su mejor versión. Se introdujeron varias iniciativas para mejorar el bienestar, el desarrollo profesional y la diversidad e inclusión (D&I). El BCE también inició la transición hacia espacios de trabajo dinámicos, un nuevo diseño de las oficinas que refleja la evolución del modelo híbrido de trabajo a distancia y presencial. Las nuevas políticas, como el permiso parental especial retribuido en su totalidad y la ampliación del permiso para cuidadores, subrayan la dedicación del BCE para fomentar un entorno equitativo. Se puso en marcha un portal de desarrollo profesional (Career Portal) para dar apoyo al desarrollo profesional de los empleados, ofreciendo oportunidades de movilidad (para poder cambiar de puesto de trabajo internamente) y de mentoring. El énfasis en la D&I es evidente en los ambiciosos objetivos de género e iniciativas que abordan sus diferentes facetas. Con estos esfuerzos, el BCE pretende promover un lugar de trabajo en el que todos los empleados se sientan valorados y empoderados para contribuir de la mejor manera posible al futuro de Europa.
Cultura y condiciones de trabajo
El BCE está evolucionando hacia espacios de trabajo dinámicos
El BCE está transformando sus espacios de trabajo para adaptarse a un modelo híbrido de trabajo a distancia y presencial. En 2024, la institución dio los primeros pasos hacia la introducción de espacios de trabajo dinámicos —en los que también se comparten las mesas— con el fin de fomentar la flexibilidad, la inclusión y la colaboración, optimizando a la vez el uso del espacio de oficinas. La participación de los empleados es vital para crear un entorno laboral que favorezca la diversidad de personas y de formas de trabajo. Algunos equipos ya han diseñado sus nuevos espacios y se trasladarán a ellos en 2025.
Se ha establecido un nuevo permiso parental especial, además del existente, y se ha ampliado el permiso especial para cuidadores
El 1 de enero de 2025, el BCE introdujo una política de permisos especiales para los progenitores de niños nacidos o adoptados a partir de esa fecha, quienes podrán disfrutar de 40 días de permiso adicional retribuido durante los tres primeros años siguientes al nacimiento o la adopción. Una medida transitoria concede 20 días por los niños nacidos o adoptados a partir de agosto de 2022. El permiso especial concedido a los cuidadores se ha ampliado a diez días al año. Estas prestaciones adicionales a las ya existentes ponen de relieve el compromiso del BCE con la conciliación de la vida laboral y personal, así como con la igualdad de género, y promueven un lugar de trabajo inclusivo.
El seguimiento de la encuesta a los empleados dio prioridad al bienestar y a la cultura que permite hablar sin reservas
El BCE siguió dando prioridad a escuchar a los empleados para entender mejor sus necesidades. Guiado por los comentarios de la encuesta, el BCE puso en marcha iniciativas para aumentar el bienestar y reforzar la cultura de hablar sin reservas de cualquier cuestión. Por ejemplo, los grupos focales (focus groups) ayudaron a comprender las causas e identificar soluciones para los retos que afectan al bienestar, las campañas de comunicación aumentaron la concienciación sobre las opciones de trabajo flexible y los talleres dotaron a los empleados y a los directivos de herramientas para hacer frente a comportamientos irrespetuosos.
Con vistas a fomentar un lugar de trabajo respetuoso, el BCE llevó a cabo una revisión de los procedimientos de notificación, investigación y disciplinarios
Además, se llevó a cabo una revisión en las distintas áreas operativas del marco de la institución para tratar las conductas indebidas en el lugar de trabajo con el fin de incrementar la claridad y la eficiencia de los procedimientos, y de garantizar una mejor protección y apoyo.
Se aprobó la nueva metodología GSA
En 2024 concluyó la revisión de la metodología de ajuste general de los salarios (GSA, por sus siglas en inglés), que define cómo se ajustan los salarios del BCE anualmente. El nuevo método se basa en los datos publicados por Eurostat, lo que garantiza la transparencia y la objetividad.
Desarrollo del talento y profesional
Lanzamiento del Career Portal, el portal de desarrollo profesional
El desarrollo profesional es una prioridad en el BCE y en 2024 se puso en marcha una iniciativa clave a este respecto, el nuevo Career Portal. Este portal es un punto central para que los empleados exploren oportunidades como los programas de movilidad y de mentoring. También les ofrece una nueva opción que les permite buscar a personas dentro de la organización para intercambiar puestos de trabajo con ellas, con el fin de realizar movimientos horizontales, ampliar sus competencias y mejorar sus redes profesionales. En 2025 se añadirán a este portal nuevas funcionalidades, como el job shadowing, que ofrece la oportunidad de aprender cómo trabaja un compañero observándolo en su puesto de trabajo. En las seis primeras semanas posteriores al lanzamiento del portal lo utilizaron 1.207 empleados.
Los empleados del BCE aprovecharon las oportunidades de movilidad
En lo que respecta a la movilidad, el Programa Schuman ―que es una oportunidad de trabajar en comisión de servicio mediante intercambios de personal entre el BCE, las autoridades nacionales competentes (ANC) y los bancos centrales nacionales (BCN)― inició su sexta edición en 2024 con 39 proyectos. Los empleados del BCE también continuaron participando en intercambios con varias ANC e instituciones europeas, en el marco de un programa específico de intercambio de personal del Mecanismo Único de Supervisión (MUS). Al final de 2024 existían siete acuerdos de intercambio de personal con cuatro ANC (Banca d’Italia, De Nederlandsche Bank, Banco de España y ACPR) y tres organismos (la Junta Única de Resolución, el Banco Europeo de Inversiones y la Autoridad Europea de Valores y Mercados).
El programa de aprendizaje se centró en la IA, los riesgos climáticos y el liderazgo
Nuestro entorno de trabajo está cambiando y nos presenta nuevos retos a una velocidad cada vez mayor. El desarrollo de las competencias existentes y la adquisición de otras nuevas son cruciales tanto para el crecimiento personal como para el éxito de la organización. El programa de aprendizaje de 2024 se centró en la inteligencia artificial (IA), los riesgos climáticos y el liderazgo. En el ámbito de la IA, el foco se puso en aumentar la concienciación y fomentar el interés: se animó a los empleados a explorar la IA y a empezar a probar tecnologías y herramientas. Un programa de aprendizaje sobre riesgos climáticos permitió al personal del Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC) y del MUS entender el impacto de estos en el sistema financiero. Entre las iniciativas de desarrollo del liderazgo se incluyó un ejercicio de evaluación de 360 grados para todos los niveles de liderazgo y, por primera vez, un programa de desarrollo específico para jefes de equipo.
Diversidad e inclusión
El BCE continuó promoviendo la diversidad y la inclusión
Fomentar una cultura de diversidad, inclusión y pertenencia es un compromiso colectivo en el BCE. Nuestros Executive D&I Sponsors proporcionan apoyo en materia de liderazgo y refuerzan la importancia de esta cuestión, mientras que los D&I Ambassadors promueven la diversidad y la inclusión en las áreas operativas, junto con seis redes de D&I que amplifican las voces de los grupos menos representados. El D&I Adviser y el equipo de recursos humanos aúnan estos esfuerzos integrando la perspectiva de la D&I en el diseño de las políticas y facilitando un diálogo abierto en la institución. Para aprovechar nuestra experiencia y nuestros conocimientos colectivos en materia de D&I, los integrantes de una red de D&I del SEBC y del MUS se reúnen periódicamente, haciendo que nuestras instituciones estén un paso más cerca de ser un reflejo de los ciudadanos a los que sirve el BCE y ofreciéndoles resultados cada vez mejores.
La ampliación del alcance y la interseccionalidad en materia de D&I ocuparon un lugar destacado en la agenda
En aras de la igualdad de género, el BCE ha introducido ambiciosos objetivos de género y medidas asociadas. En 2024, las mujeres ocupaban el 33,3 % de los puestos de dirección (bandas salariales I-L) y el 37,3 % de los de alta dirección (bandas salariales K-L), lo que supone una caída de 0,7 puntos porcentuales con respecto a los objetivos para esos niveles. Con respecto a la composición de los puestos de dirección, se han logrado avances significativos en los diez últimos años. No obstante, cerrar la brecha en el nivel de expertos (bandas salariales F/G-G) y de jefes de equipo (banda salarial H) sigue siendo complicado (figura 11.1), lo que subraya la necesidad de que el equilibrio de género continúe siendo una prioridad en nuestra agenda estratégica.
En 2024, los esfuerzos se dedicaron no solo a ayudar a las mujeres, sino también a involucrar a los hombres a través de una serie específica de charlas sobre las normas de género, las masculinidades y el permiso de paternidad. Con el objetivo de cultivar y mantener un entorno en el que se valoran los orígenes, las experiencias y las competencias individuales de cada persona, se celebraron varios talleres centrados en el comportamiento y el liderazgo inclusivos, la inclusión LGBT+, la raza, el origen étnico y la alianza para la D&I.
Para conmemorar el Mes de la Diversidad de la UE en 2024, el BCE puso en marcha un programa de mentoring y grupos focales para los empleados de minorías etnorraciales
El BCE dedicó el Mes de la Diversidad de la UE en 2024 a la raza y el origen étnico, colaborando con expertos externos y poniendo en marcha un programa piloto de mentoring y grupos focales para los empleados de minorías etnorraciales. La información recopilada sobre los puntos fuertes y las áreas de mejora sirvió de base para un taller piloto de inclusión racial dirigido a directivos.
Figura 11.1
Nuestro personal de un vistazo

1) A 31 de diciembre de 2024.
2) Se refiere únicamente a empleados con contrato indefinido o de duración determinada.
3) La metodología para informar sobre el porcentaje de cada género se ha perfeccionado tras la última extracción de datos para el Informe Anual 2023 del BCE. Por tanto, las comparaciones con datos anteriores deberían reflejar estos cambios metodológicos.
4) Incluye 59 participantes en el programa de graduados.
5) Empleados en comisión de servicio de un banco central nacional del Sistema Europeo de Bancos Centrales, de instituciones y organismos públicos europeos y de organizaciones internacionales.
6) Se refiere a cualquier traslado horizontal permanente o temporal entre divisiones o áreas operativas.
7) Se refiere a cualquier traslado permanente o temporal a un puesto con una banda salarial superior, con o sin proceso de selección.
8) Se refiere únicamente a empleados con contrato indefinido o de duración determinada convertible en indefinido.
9) El cuadro muestra los porcentajes de empleados y becarios del BCE por nacionalidad, es decir, los miembros de la plantilla que tienen varias nacionalidades se computan por cada nacionalidad que declaran. Los porcentajes se obtienen calculando la proporción entre el número de personas de cada nacionalidad y el número total de nacionalidades (solo de la UE). Los países se enumeran siguiendo el orden alfabético del nombre del país en sus respectivas lenguas nacionales.
11.5 Avances en los trabajos relacionados con los retos medioambientales y climáticos
El BCE necesita entender el impacto del cambio climático y de la transición ecológica en la economía y en el sector financiero
Los avances recientes en economía y modelización climáticas muestran que los costes de un cambio climático incesante son significativamente superiores a lo que se había supuesto. Esta situación se debe, en parte, a no haber progresado lo suficiente en la mitigación de este fenómeno. Los costes de una transición oportuna a una economía más verde serían considerablemente menores[94]. Las emisiones globales anuales de carbono se encuentran ahora en máximos históricos y los expertos esperan que el calentamiento global alcance los 2,6°C-2,8°C por encima de los niveles preindustriales durante este siglo, incluso si se cumplen los compromisos políticos actuales. El incremento previsto de las temperaturas es mucho más elevado que el límite de 1,5°C establecido en el Acuerdo de París[95]. Por lo tanto, los riesgos de un planeta más caliente y una transición demasiado tardía están aumentando. Además, la degradación de la naturaleza afecta a la economía y genera riesgos financieros. El clima y la naturaleza están interconectados, por lo que el BCE necesita entender su impacto combinado en la economía y en el sector financiero para cumplir su mandato con mayor efectividad.
En 2024, el BCE siguió trabajando en su plan sobre clima y naturaleza 2024-2025. Este proyecto está coordinado por el centro sobre el cambio climático del BCE y se lleva a cabo en colaboración con otros departamentos de la institución, así como con diferentes comités del Eurosistema y otros foros ligados al cambio climático. El plan se basa en logros anteriores y describe la visión del BCE sobre cómo abordar el impacto del cambio climático y la degradación de la naturaleza en el marco de su mandato. Aparte de continuar implementando las medidas acordadas en el pasado[96], se identifican tres áreas prioritarias de actuación adicional: i) gestionar la transición a una economía verde, ii) comprender el creciente impacto físico del cambio climático, y iii) avanzar en los trabajos sobre los riesgos naturales. El centro sobre el cambio climático también ha puesto en marcha iniciativas de desarrollo de capacidades y ha mejorado las sinergias dentro del Eurosistema a través de programas de formación comunes y seminarios y proyectos conjuntos. Los empleados del BCE también han colaborado en cursos de formación y seminarios con expertos de otros bancos centrales y otras partes interesadas no pertenecientes al Eurosistema. El BCE ha contribuido a que se avance en la agenda climática en foros internacionales, entre ellos la Central Banks and Supervisors Network for Greening the Financial System (NGFS), el Consejo de Estabilidad Financiera, el Comité de Supervisión Bancaria de Basilea, las Autoridades Europeas de Supervisión y la Junta Europea de Riesgo Sistémico, el Banco de Pagos Internacionales (BPI), el Comité de Pagos e Infraestructuras del Mercado del BPI, el G-7, el G-20 y el Fondo Monetario Internacional y el Banco Mundial.
La huella de carbono de las tenencias de activos corporativos sigue disminuyendo
En la implementación de la política monetaria, la información financiera relacionada con el clima sobre las tenencias mantenidas por el Eurosistema con fines de política monetaria y las reservas exteriores del BCE, publicada en junio de 2024, amplió el alcance de la información presentada sobre activos corporativos para incluir otras clases de activos. Ahora, la información divulgada incluye el 99,7 % de los activos totales mantenidos con fines de política monetaria. Las emisiones de carbono asociadas a los activos corporativos —para las que el Eurosistema ha fijado como objetivo una senda de descarbonización que respalda los objetivos del Acuerdo de París y de neutralidad climática de la UE— siguieron disminuyendo. Dado que el 31 de diciembre de 2024 se puso fin a las reinversiones de bonos corporativos, esta reducción se sustentará en el perfil de vencimientos de estos activos y en las actuaciones de las propias empresas. En mayo de 2024, el Consejo de Gobierno acordó que se establecerán objetivos intermedios de reducción de emisiones para las tenencias de activos corporativos con el fin de, en este contexto, realizar un seguimiento interno de la trayectoria de reducción de emisiones de las carteras de valores corporativos. Si se identifican desviaciones con respecto a la trayectoria deseada, el Consejo de Gobierno valorará caso por caso la necesidad de adoptar medidas correctoras en el marco de su mandato. Además, el Eurosistema continuó incorporando consideraciones climáticas en sus operaciones de política monetaria y mejorando su evaluación y gestión de riesgos. Por ejemplo, los BCN del Eurosistema aplican ahora los criterios mínimos comunes a sus sistemas internos de evaluación del crédito (ICAS, por sus siglas en inglés), de conformidad con el compromiso asumido en julio de 2022[97].
El BCE dio pasos significativos en los análisis de escenarios, la supervisión bancaria y los datos relacionados con el clima
En cuanto a la estabilidad financiera y los análisis de escenarios, el análisis puntual de escenarios climáticos planteados en el paquete «Objetivo 55» realizado por el BCE, la Junta Europea de Riesgo Sistémico y las Autoridades Europeas de Supervisión muestra que es poco probable que las pérdidas por riesgo de transición, por sí solas, supongan una amenaza para la estabilidad financiera general de la UE. Sin embargo, cuando estos riesgos se combinan con perturbaciones macroeconómicas, pueden incrementar las pérdidas de las instituciones financieras. Por ello es necesario seguir un enfoque coordinado en las políticas. Los nuevos escenarios climáticos a largo plazo elaborados por la línea de trabajo de la NGFS liderada por el BCE incluyen una función de daños actualizada, que se traduce en una evaluación del riesgo físico más negativa, y ponen de relieve el hecho de que las políticas climáticas que no son suficientemente ambiciosas dificultan la transición.
La Supervisión Bancaria del BCE continuó evaluando la adaptación de las entidades de crédito a las expectativas supervisoras del BCE sobre los riesgos climáticos y medioambientales. La mayoría de las entidades aplican ahora de forma generalizada marcos para los riesgos relacionados con el clima y la naturaleza. Sin embargo, en un número reducido de entidades aún no se han establecido los elementos básicos para una gestión adecuada de dichos riesgos. Si las entidades no cumplen los requisitos en los plazos establecidos, pueden enfrentarse a sanciones pecuniarias periódicas.
Por lo que respecta a la contribución en el ámbito de los datos relacionados con el clima, los tres conjuntos de indicadores estadísticos del BCE sobre el clima (en concreto, los relativos a las finanzas sostenibles, los riesgos físicos y las emisiones de carbono) se actualizaron y mejoraron en 2024 (véase sección 7.2).
Puede consultarse información sobre la sostenibilidad corporativa y las emisiones financiadas en el informe anual de divulgación de información financiera relacionada con el clima
La información financiera anual relacionada con el clima sobre las carteras del BCE no relacionadas con la política monetaria y su declaración ambiental ofrecen una visión general de la huella de carbono de las emisiones financiadas del BCE y de los objetivos de reducción, así como de los impactos y objetivos medioambientales de sus propias operaciones. Los datos sobre el comportamiento medioambiental del BCE en 2024 se publicarán en 2025, junto con un nuevo Programa de Gestión Medioambiental para 2025-2027.
Prosiguen los esfuerzos para reducir el impacto medioambiental de los billetes en euros y de los pagos electrónicos, así como los trabajos sobre el euro digital
En 2024 prosiguieron los trabajos para reducir la huella ambiental de los billetes en euros. Las actuaciones emprendidas incluían medidas para lograr que a partir de 2027 solo se utilice algodón orgánico en la fabricación de papel, así como estudios sobre la ampliación de la vida útil de los billetes en circulación y sobre métodos alternativos sostenibles para eliminar los residuos de los billetes, como el reciclaje y la reutilización de materiales de desecho. Por último, los futuros billetes en euros se están diseñando con arreglo a principios del ecodiseño, lo que significa que los aspectos medioambientales se tienen en cuenta en todas las fases de su proceso de desarrollo (véase sección 6.3). En cuanto a los pagos minoristas electrónicos y en su función de catalizador, el BCE, junto con el SEBC, ha estudiado formas de contribuir a reducir la huella ambiental del proceso de pago. El Eurosistema ha identificado las mejores prácticas medioambientales para los pagos minoristas electrónicos, centradas exclusivamente en los pagos digitales. El mismo enfoque se está aplicando al proyecto del euro digital, en el que el Eurosistema ha puesto el foco en minimizar la huella ambiental en toda la cadena de valor. Esto implica utilizar los criterios existentes y optimizar los procesos, aplicar protocolos para minimizar el consumo de energía y adherirse a las mejores prácticas en materia de comportamiento medioambiental y transparencia de los datos.
Además de aplicar las medidas acordadas anteriormente, el BCE intensificó su labor en tres áreas (figura 11.2).
Figura 11.2
Áreas prioritarias de los trabajos del BCE relacionados con el clima en 2024-2025

Fuente: BCE.
El BCE pretende entender mejor el impacto de la transición ecológica en las funciones que le han sido encomendadas
El BCE realizó progresos para entender y abordar el impacto de la transición hacia una economía más verde. La encuesta sobre préstamos bancarios del BCE de julio de 2024 mostró que los riesgos climáticos se tienen cada vez más en cuenta en las condiciones del crédito y en la demanda de préstamos, en particular para financiar la inversión en la transición ecológica. En un análisis se puso de manifiesto que, a pesar de los avances realizados, siguen siendo necesarias inversiones verdes considerables en Europa. En un informe del SEBC se analizaron las consecuencias estructurales de la transición para la productividad, mientras que contribuciones analíticas, como un recuadro del Boletín Económico sobre los efectos macroeconómicos de las políticas de transición relacionadas con el cambio climático, reforzaron el marco de modelización macroeconómica del BCE. En una entrada del blog del BCE se señaló que las empresas intensivas en energía se ven afectadas por los bajos márgenes y se consideraron las implicaciones para la transición ecológica. En lo que respecta a la aplicación de la política monetaria, el Consejo de Gobierno confirmó en marzo de 2024 que, en la medida en que las diferentes configuraciones del marco operativo sean igualmente adecuadas para asegurar la implementación eficaz de la orientación de la política monetaria, el diseño del futuro marco operativo del Eurosistema debería facilitar la consecución del objetivo secundario del BCE —concretamente la transición a una economía verde— sin perjuicio de su objetivo principal de mantener la estabilidad de precios.
El BCE debe tener en cuenta el mayor impacto físico del cambio climático
Por lo que respecta al mayor impacto físico del cambio climático, el BCE estudió cómo integrar este impacto en los escenarios climáticos y en las proyecciones macroeconómicas. Las contribuciones incluyeron un análisis de los efectos de las perturbaciones asociadas al aumento de las temperaturas en la inflación de los países de la zona del euro y la amplificación de los riesgos físicos a través de los vínculos generados por las cadenas de suministro. En cuanto a la adaptación al cambio climático, en un estudio sobre políticas para reducir la brecha de protección de seguro climático publicado por el BCE y la Autoridad Europea de Seguros y Pensiones de Jubilación se explicaban con detalle las causas de esta brecha en Europa atribuibles tanto a la oferta como la demanda de seguros, y se describían algunas pautas para establecer un sistema europeo de protección de seguro de catástrofes naturales.
Los riesgos relacionados con el clima y la naturaleza están interconectados
Para avanzar en los trabajos sobre los riesgos relacionados con la naturaleza, el BCE publicó un recuadro sobre los «servicios de los ecosistemas» y un artículo sobre el impacto de la degradación de la naturaleza y la pérdida de biodiversidad en el Boletín Económico, en el que se llegaba a la conclusión de que la degradación de la naturaleza puede plantear retos significativos para el objetivo del SEBC de mantener la estabilidad de precios y su función de contribuir a la estabilidad financiera establecidos en el Tratado. Además, el BCE, junto con el Potsdam Institute for Climate Impact Research, la organización NatureFinance y la Universidad de Minesota, llevaron a cabo trabajos de investigación que pusieron de relieve la importancia de integrar escenarios climáticos y de riesgos naturales para obtener una visión más precisa de los riesgos para la estabilidad financiera y económica. El BCE también realizó estudios en los que se exploraron las implicaciones legales de los riesgos relacionados con la naturaleza para los bancos centrales y los supervisores, como se indicó en el discurso pronunciado por Frank Elderson sobre los riesgos que plantea la degradación de la naturaleza.
Recuadro 8
El BCE integra tecnologías de IA en su trabajo
En 2024, el BCE siguió desarrollando su enfoque estratégico para integrar la inteligencia artificial (IA) en las operaciones, los procesos de formulación de políticas y las funciones de supervisión.
En el área de banca central, la atención se centró en el apoyo de la IA a la innovación en el trabajo. El BCE investigó el uso de algoritmos de IA para apoyar la adopción de decisiones de política monetaria y el impacto de la IA en la economía y la comunicación de los bancos centrales (véase, por ejemplo, el capítulo 8). Las iniciativas relacionadas con las operaciones de mercado incluyeron actividades de sondeo del mercado para evaluar la aplicación de la IA en los mercados financieros, la puesta en marcha de una red de IA del mercado y el uso de herramientas de IA para medir el sentimiento del mercado. Los trabajos sobre IA proseguirán con varios proyectos experimentales en ámbitos como la comunicación automatizada, la optimización de la presentación de información y la visualización de datos. Además, ahora hay cuatro grandes modelos de lenguaje a disposición de todo el BCE que prestan apoyo a más de 4.500 usuarios. Como parte del programa de aprendizaje de 2024, se animó a todos los empleados a explorar la IA y su uso en su trabajo (véase sección 11.4).
En lo que respecta a la supervisión bancaria, aprovechando los avances logrados en el marco del programa de tecnología aplicada a la supervisión (suptech), más de 3.500 supervisores se beneficiaron de la IA y de otras tecnologías avanzadas en 2024. Un elemento clave en el que se basa la estrategia tecnológica del Mecanismo Único de Supervisión para el período 2024-2028 es la idea de la «supervisión al alcance de la mano», que implica utilizar la tecnología, los datos y la innovación para facilitar un acceso rápido a información clave sobre los riesgos relacionados con las entidades supervisadas. Se han desarrollado varias plataformas basadas en IA. Athena es una herramienta basada en la IA que ayuda a los supervisores a extraer y a comparar información de un corpus de millones de artículos, evaluaciones supervisoras y documentos bancarios. Heimdall es una herramienta que utiliza funcionalidades de la IA con el fin de agilizar las evaluaciones de idoneidad de miembros de los consejos de administración de las entidades de crédito para desempeñar sus funciones. Por otra parte, el Virtual Lab proporciona a los supervisores y a otros empleados del SEBC la infraestructura para colaborar y desarrollar sus propias soluciones de IA. La Supervisión Bancaria del BCE también está probando nueve casos de uso de IA generativa de alta prioridad que estarán operativos en los dos próximos años.
Estos logros se sustentan en el firme compromiso del BCE con los principios éticos, la seguridad de los datos, el intercambio de información con otros bancos centrales y el cumplimiento regulatorio. Al adoptar la IA de manera responsable, el BCE pretende contribuir a un entorno financiero estable, eficiente y orientado al futuro en la zona del euro.
12 Conoce a nuestros empleados
Muchos de los logros alcanzados en 2024 fueron posibles gracias a la colaboración entre los empleados del BCE y del Sistema Europeo de Bancos Centrales (SEBC). En particular, el Consejo de Gobierno y el Consejo General contaron con el apoyo de distintos comités de expertos en sus procesos de toma de decisiones. Estos comités, integrados por expertos del BCE y del SEBC, ofrecen asesoramiento en sus respectivas áreas de competencia. En este capítulo, algunos de nuestros empleados explican la función del comité en el que participan y también dan a conocer su experiencia personal en su comité respectivo y, de manera más general, en el BCE.
Óscar Arce

Tengo el privilegio de presidir el Comité de Política Monetaria, un foro esencial que reúne a expertos del Eurosistema y del SEBC para prestar apoyo al Consejo de Gobierno y al Consejo General. Nuestra labor consiste en analizar la evolución de la economía y en preparar las deliberaciones de política monetaria que ayudan a orientar las decisiones relativas a los tipos de interés y otras medidas de política monetaria. En pocas palabras, contribuimos a garantizar que nuestras políticas mantengan la inflación estable y respalden la economía de la zona del euro.
Antes de incorporarme al BCE ocupaba el cargo de director general de Economía y Estadística del Banco de España, donde me ocupé de temas de previsión y coyuntura. También trabajé un tiempo en la Comisión Nacional del Mercado de Valores de España y en la Oficina Económica del Presidente del Gobierno de España. Soy doctorado en Economía por la London School of Economics and Political Science y mi trabajo de doctorado se centró en la política monetaria, la estabilidad financiera y la política macroeconómica.
Estar al frente de la Dirección General de Economía del BCE es un honor y un gran reto profesional. El BCE ha sido un pilar de estabilidad y prosperidad para la Unión Económica y Monetaria desde su creación. Nuestro trabajo, en estrecha colaboración con el resto del Eurosistema, seguirá siendo fundamental en los años venideros. Lo que más disfruto de mi trabajo es el intercambio constante de ideas con colegas con gran talento de toda Europa.
Fuera del ámbito profesional me gusta pasar tiempo con mi familia en Madrid y explorar caminos en mi moto.
Cornelia Holthausen

Ocupo el cargo de presidenta del Comité de Estabilidad Financiera, un foro de debate de asuntos relacionados con la detección y evaluación de riesgos para la estabilidad financiera y la orientación apropiada de las políticas macroprudenciales.
Tras finalizar el doctorado me pareció muy motivador trabajar en beneficio de Europa y en 1999 me incorporé al BCE como economista de la Dirección General de Estudios, en concreto en las áreas de mercados monetarios y sistemas de pago. Enseguida me interesó trabajar directamente en cuestiones normativas y fue una satisfacción incorporarme a la Dirección General de Operaciones de Mercado unos años más tarde como gestora de liquidez. Me pareció un lugar fascinante para trabajar durante la crisis financiera porque el análisis y la adopción de decisiones rápidas iban de la mano, y tuve la sensación de que el trabajo de todos los miembros del equipo tuvo un impacto real.
Posteriormente asumí puestos de dirección en las áreas de investigación financiera, operaciones de mercado, economía y, por último, estabilidad financiera. Mi trabajo en distintas áreas del BCE y en temas tan diferentes con equipos distintos a lo largo de los años fue una experiencia muy interesante y me permitió constatar el enorme compromiso con la calidad en toda la institución.
En la Dirección General de Política Macroprudencial y Estabilidad Financiera nos dedicamos a realizar análisis exhaustivos y a proporcionar asesoramiento en relación con las políticas macroprudenciales, la estabilidad financiera y la regulación financiera. Nuestro equipo se ocupa de identificar y de hacer un seguimiento de los riesgos sistémicos en el sector financiero en toda la zona del euro. Para ello, trabajamos en estrecha colaboración con los bancos centrales nacionales, el Mecanismo Único de Supervisión, la Junta Europea de Riesgo Sistémico y otras áreas operativas del BCE. Nuestra labor es compleja, pero también es gratificante que todos colaboremos para lograr un objetivo común.
Me siento satisfecha y orgullosa de haber podido trabajar durante tanto tiempo en una institución que es parte integral de Europa y que se ha mantenido sólida incluso en períodos difíciles. Además, sé que Europa permanecerá firmemente unida en las próximas décadas.
Vitaliana Rondonotti

Desde 2017 soy secretaria del Comité de Estadísticas. Me encargo de coordinar asuntos estadísticos del SEBC de carácter transversal, de hacer un seguimiento de la aplicación del programa de trabajo de estadísticas del SEBC y del Mecanismo Único de Supervisión, y de prestar apoyo a la presidencia en la dirección estratégica del comité. Como secretaria del Comité he vivido épocas complicadas, pero también enriquecedoras. He trabajado directamente para cuatro directores generales en la Dirección General de Estadística y he sido testigo de las notables transformaciones que se han producido en la función estadística asociadas a las crecientes necesidades de datos, las nuevas metodologías, la rápida evolución de la tecnología y la necesidad de colaborar de forma eficiente con un número cada vez mayor de personas interesadas, tanto presencial como virtualmente.
Al haber vivido y estudiado en diferentes países crecí apreciando los entornos multinacionales y multiculturales y me convertí en una firme defensora de la cooperación internacional. Cuando oí hablar del proyecto de una moneda única europea, me entusiasmó la oportunidad de incorporarme a una institución internacional como el BCE y de trabajar en beneficio de Europa.
Tras finalizar mis estudios en estadísticas metodológicas, en el año 2000 me incorporé a la Dirección General de Estadística del BCE como experta en desestacionalización. Al principio me dediqué a elaborar estadísticas de agregados monetarios, pero enseguida se despertó mi interés por contribuir a nuevas iniciativas estadísticas, como el estudio del uso de centrales de información de riesgos y de otras nuevas fuentes de datos con fines estadísticos y la creación de la base de datos de estadísticas de carteras de valores, uno de los primeros proyectos del SEBC con información estadística granular.
Me siento orgullosa de trabajar para el Comité de Estadísticas, de contribuir a la producción de estadísticas europeas de alta calidad que son fundamentales para la formulación de las políticas del BCE y de aportar mi granito de arena para lograr una Europa mejor y más fuerte.
Sylvia Hildebrandt

Soy senior office coordinator en la Dirección de Billetes. Desde mi incorporación al BCE en 2017 soy responsable de la gestión de las cuestiones administrativas y logísticas del Comité de Billetes. La función de este comité es asegurar que el efectivo en euros siga siendo ampliamente accesible y aceptado como medio de pago y como depósito de valor, además de continuar siendo innovador, seguro y respetuoso con el medio ambiente.
Mi trabajo consiste en facilitar el intercambio fluido de información entre la presidencia, la secretaría y los miembros del comité, y valoro sinceramente el ambiente de colaboración y el espíritu de equipo que traspasa las fronteras nacionales.
Antes de incorporarme al BCE trabajé en gestión del talento en el sector privado y posteriormente como asistente de equipo. Siempre me ha apasionado trabajar con personas y organizar eventos, y me hizo mucha ilusión poder aportar mi experiencia y conocimientos a mi trabajo en el BCE. El ambiente diverso e internacional de la institución son un gran estímulo para mí, y como he estudiado Anglística, me encanta poner en práctica mis competencias lingüísticas a diario. Tengo el firme compromiso de impulsar una Europa fuerte y me siento orgullosa de contribuir a este objetivo a través de mi labor en el Comité de Billetes.
En mi tiempo de ocio me gusta estar al aire libre paseando con mi perro o montando en bicicleta de montaña. A mi pareja y a mí nos encanta recorrer en bici los preciosos paisajes que rodean nuestro hogar en Odenwald.
Me ilusiona seguir contribuyendo a la misión del BCE y espero aprovechar las oportunidades que me depare el futuro.
Christian Barontini

Trabajo como secretario de un grupo que reúne a las secretarías de todos los comités del SEBC. Esto conlleva prestar asistencia técnica, logística y estratégica. Asesoramos sobre las normas que regulan los comités, aseguramos el alineamiento del contenido y el plazo de los entregables comunes, y realizamos un seguimiento de la forma en la que los comités responden a las peticiones de los órganos rectores.
Mi primera experiencia con los comités fue al principio de mi carrera en el ámbito de la banca central, cuando se introdujo el euro en 1999. Entonces participé en un grupo de trabajo del Comité de Política Monetaria como representante de la Banque de France. Este bagaje me ayudó a conocer mejor los mecanismos en los que se sustentan los proyectos europeos y la importancia de considerar las perspectivas nacionales para lograr un entendimiento común.
En 2007 me incorporé al BCE como economista en la Dirección General de Relaciones Internacionales y Europeas, donde contribuí a preparar las posiciones del BCE para las reuniones de instituciones y foros de la UE en Bruselas. Posteriormente pasé a ocupar mi puesto actual en la Dirección General de Secretaría, donde coordino las reuniones de los órganos rectores del BCE. Durante este período también he sido un miembro activo del Comité de Comunicación, que asesora a los órganos rectores sobre una amplia variedad de cuestiones de comunicación interna y externa, como la forma de adaptarse a la evolución del uso de herramientas digitales o aspectos de comunicación de importantes proyectos como la revisión de la estrategia de política monetaria en 2021.
El euro es una moneda única que se creó para promover el crecimiento, la estabilidad y la integración económica en Europa, y contribuir a una misión tan importante, aunque sea de una manera modesta, es motivo de gran orgullo para mí.
Cuentas Anuales
https://www.ecb.europa.eu/press/annual-reports-financial-statements/annual/annual-accounts/html/ecb.annualaccounts2024~718377b1c1.es.htmlBalance consolidado del Eurosistema a 31 de diciembre de 2024
https://www.ecb.europa.eu/press/annual-reports-financial-statements/annual/balance/html/ecb.eurosystembalancesheet2024~28f64426e5.es.html© Banco Central Europeo, 2025
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Todos los derechos reservados. Se permite la reproducción para fines docentes o sin ánimo de lucro, siempre que se cite la fuente.
Traducción efectuada por el Banco de España y el Banco Central Europeo. En caso de discrepancia, prevalece la versión original en inglés.
Puede consultarse terminología específica en el glosario del BCE (disponible solo en inglés).
HTML ISBN 978-92-899-7075-4, ISSN 1725-2873, doi:10.2866/4717934, QB-01-25-040-ES-Q
Véase también M. Andersson et al., «Intangible assets of multinational enterprises in Ireland and their impact on euro area activity», Occasional Paper Series, n.º 350, BCE, 2024.
Para más información sobre la evolución del mercado de trabajo de la zona del euro, véase «Explaining the resilience of the euro area labour market between 2022 and 2024», Boletín Económico, número 8, BCE, 2024.
La orientación de la política fiscal se define como la variación del saldo primario ajustado de ciclo, excluidas las medidas de apoyo al sector bancario y las subvenciones del NGEU por el lado de los ingresos.
Existe un desfase en la transmisión de los tipos de interés más elevados a los pagos por intereses de la deuda, que puede explicarse por la ampliación de los plazos de vencimiento de la deuda pública viva durante el período de tipos de interés bajos.
Véase S. Haroutunian et al. «The path to the reformed EU fiscal framework: a monetary policy perspective», Occasional Paper Series, n.º 349, BCE, 2024.
Véase Comisión Europea, «Semestre Europeo de 2025: dar vida al nuevo marco de gobernanza económica», Comunicación de la Comisión al Parlamento Europeo, el Consejo y el Banco Central Europeo, COM (2024) 705 final, 26 de noviembre de 2024.
Para más información sobre los determinantes de la tasa de variación de los precios de los alimentos en la zona del euro, véase el recuadro titulado «Factores determinantes de la inflación de los alimentos en la zona del euro en los dos últimos años», Boletín Económico, número 2, BCE, 2024.
Para más información sobre la evolución de la inflación subyacente, véase P. R. Lane, «Underlying inflation: an update», discurso pronunciado en la conferencia «Drivers and Dynamics Conference 2024», organizada por el Federal Reserve Bank of Cleveland y el BCE, Cleveland, 24 de octubre de 2024.
Para información más detallada, véase el recuadro titulado «Transmisión de la política monetaria a la inflación de los bienes y de los servicios: una perspectiva granular», Boletín Económico, número 8, BCE, 2024.
Para más información sobre el papel amortiguador de los beneficios, véase el recuadro titulado «Indicadores de márgenes para el análisis de la inflación considerando el papel de los costes totales», Boletín Económico, número 4, BCE, 2024.
La deriva salarial mide las desviaciones de la evolución de los salarios reales con respecto a la evolución de los salarios negociados, y refleja factores como cambios en las horas extraordinarias, componentes salariales variables de las empresas y tensiones en los mercados de trabajo. Para más información sobre la evolución reciente, véase el recuadro titulado «La evolución reciente de los salarios y el papel de la deriva salarial», Boletín Económico, número 6, BCE, 2024.
Para una descripción preliminar y técnica de las principales características de la encuesta sobre las expectativas de los consumidores, véase K. Bańkowska et al., «ECB Consumer Expectations Survey: an overview and first evaluation», Occasional Paper Series, n.º 287, BCE, diciembre de 2021. Para más información sobre las conclusiones de esta encuesta en lo que respecta a las expectativas de los hogares, véase F. D’Acunto et al., «Household inflation expectations: an overview of recent insights for monetary policy», Discussion Paper Series, n.º 24, BCE, 2024. Para conocer resultados recientes de la misma encuesta en relación con la confianza en el BCE entre los residentes en la zona del euro y la percepción de los consumidores acerca de los determinantes de la inflación, véanse, respectivamente, el artículo «Trust in the ECB – insights from the Consumer Expectations Survey», Boletín Económico, número 3, BCE, 2024, y el recuadro «La causa principal de la inflación reciente según los consumidores: cambios en su percepción a lo largo del tiempo», Boletín Económico, número 7, BCE, 2024.
El análisis se ha publicado en B. Anghel, S. Bunel et al., «Digitalisation and productivity: A report by the ESCB Expert Group on productivity, innovation and technological change», Occasional Paper Series, n.º 339, BCE, febrero de 2024, en G. Bijnens et al., «The impact of climate change and policies on productivity: A report of the ESCB Expert Group on productivity, innovation and technological change», Occasional Paper Series, n.º 340, BCE, febrero de 2024, y en T. Lalinsky et al., «The impact of the COVID-19 pandemic and policy support on productivity: A report of the ESCB Expert Group on productivity, innovation and technological change», Occasional Paper Series, n.º 341, BCE, febrero de 2024. Un resumen del análisis se publicó en el artículo titulado «The impact of recent shocks and ongoing structural changes on euro area productivity growth», Boletín Económico, número 2, BCE, 2024.
Véase M. Draghi, «The future of European competitiveness», septiembre de 2024, informe elaborado a petición de la Comisión Europea.
Los totales pueden superar el 100 % debido al redondeo, p. ej., las tenencias de valores del sector público ascendían a 1.558 billones de euros.
Para más información, véase F. M. Ferrara, T. Hudepoh, P. Karl, T. Linzert, B. Nguyen, y L. Vaz Cruz, «Who buys bonds now? How markets deal with a smaller Eurosystem balance sheet», The ECB Blog, BCE, 22 de marzo de 2024.
Para más información, véase I. Rahmouni-Rousseau e I. Schnabel «The dynamics of PEPP reinvestments», The ECB Blog, BCE, 13 de febrero de 2024.
Para más información sobre los préstamos adicionales, véase la explicación «¿Qué son los marcos de préstamos adicionales?», BCE, actualizado el 14 de enero de 2021.
Para más detalles, véase el recuadro titulado «Cambios en el marco de activos de garantía del Eurosistema para promover una mayor armonización», Boletín Económico, número 1, BCE, 2025.
Orientación del Banco Central Europeo, de 9 de julio de 2014, sobre medidas temporales adicionales relativas a las operaciones de financiación del Eurosistema y la admisibilidad de los activos de garantía y por la que se modifica la Orientación BCE/2007/9 (BCE/2014/31) (DO L 240 de 13.8.2014, p. 28).
Orientación (UE) 2015/510 del Banco Central Europeo, de 19 de diciembre de 2014, sobre la aplicación del marco de la política monetaria del Eurosistema (refundición) (BCE/2014/60) (DO L 91 de 2.4.2015, p. 3).
Estas modificaciones entrarán en vigor cuando se lleve a cabo la siguiente actualización periódica del marco jurídico aplicable, pero no antes del cuarto trimestre de 2025, excepto para los cambios relativos a los préstamos que se beneficiaron de avales públicos relacionados con la pandemia de COVID-19, que no entrarán en vigor antes del final de 2026.
Véase «The financial risk management of the Eurosystem’s monetary policy operations», BCE, julio de 2015.
Véase la explicación «¿De dónde proceden los beneficios y las pérdidas del BCE y de los bancos centrales nacionales de la zona del euro?», BCE, actualizado el 19 de mayo de 2023.
Este cambio se basó en dos decisiones separadas: i) la aceptación de los S-ICAS como una fuente adicional de evaluación del crédito, sujeto al desarrollo de un marco armonizado (como parte de las modificaciones acordadas en el marco de activos de garantía, véanse la sección 2.2 y «El BCE anuncia cambios en el marco de activos de garantía del Eurosistema para promover una mayor armonización», nota de prensa, BCE, 29 de noviembre de 2024), y ii) la aprobación del marco armonizado (véase «Decisiones adoptadas por el Consejo de Gobierno del BCE (distintas de las decisiones por las que se establecen los tipos de interés) – enero de 2025», BCE, 31 de enero de 2025).
La metodología del BCE sobre colchones mínimos se introdujo en 2016 y se revisó por primera vez en 2022. El BCE comenzó a utilizar esta metodología revisada en sus evaluaciones de los colchones de las OEIS a partir del 1 de enero de 2024.
España, Grecia y Portugal anunciaron la introducción de un porcentaje positivo neutral para el colchón anticíclico, mientras que Italia anunció la introducción de un colchón contra riesgos sistémicos aplicable a las exposiciones domésticas al riesgo de crédito y al riesgo de contraparte.
Además de algunos países que han aplicado nuevas medidas macroprudenciales, Croacia y Letonia anunciaron cambios en el tratamiento de las exposiciones al sector inmobiliario con arreglo al artículo 124 del Reglamento de Requerimientos de Capital (RRC) a la luz de los cambios introducidos por el RRC III.
Bulgaria y Grecia anunciaron la aplicación de medidas basadas en la capacidad de pago de los prestatarios en 2024, mientras que varios países también realizaron algunos ajustes en sus medidas de este tipo ya existentes.
Véase «Financial Stability Review», BCE, mayo de 2024 y «Financial Stability Review», BCE, noviembre de 2024.
Véanse i) Eslovaquia: Dictamen del Banco Central Europeo, de 14 de febrero de 2024, sobre un impuesto especial para las entidades de crédito (CON/2024/4); ii) Letonia: Dictamen del Banco Central Europeo, de 4 de noviembre de 2024, sobre la imposición de una contribución solidaria temporal a las entidades de crédito con fines de seguridad nacional (CON/2024/35); iii) España: Dictamen del Banco Central Europeo, de 17 de diciembre de 2024, relativo a un impuesto sobre el margen de intereses y comisiones de determinadas entidades financieras (CON/2024/41).
La JERS reúne a los gobernadores de los bancos centrales de todos los países del Espacio Económico Europeo, así como a los máximos responsables de las autoridades supervisoras nacionales y europeas, para realizar evaluaciones trimestrales del riesgo sistémico y, en caso necesario, emitir avisos y recomendaciones. Para más información, véase el Reglamento (UE) n.º 1096/2010 del Consejo, de 17 de noviembre de 2010, por el que se encomienda al Banco Central Europeo una serie de tareas específicas relacionadas con el funcionamiento de la Junta Europea de Riesgo Sistémico (DO L 331 de 15.12.2010, p 162).
Véase «Using the countercyclical capital buffer to build resilience early in the cycle», BCE/JERS, enero de 2025.
Véase «Advancing macroprudential tools for cyber resilience – Operational policy tools», JERS, abril de 2024.
Véase «NBFI Monitor», n.º 9, JERS, junio de 2024.
Véase «Follow-up report on vulnerabilities in the residential real estate sectors of the EEA countries», JERS, febrero de 2024.
Véase «La JERS emite una recomendación sobre las vulnerabilidades del sector inmobiliario comercial en el Espacio Económico Europeo», nota de prensa, JERS, 25 de enero de 2023.
Reglamento (UE) n.º 1092/2010 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 24 de noviembre de 2010, relativo a la supervisión macroprudencial del sistema financiero en la Unión Europea y por el que se crea una Junta Europea de Riesgo Sistémico (DO L 331 de 15.12.2010, p.1).
Véase «El Grupo de trabajo de alto nivel para la revisión del Reglamento de la JERS publica un informe titulado “Building on a Decade of Success”», nota de prensa, JERS, 18 de diciembre de 2024.
Véase la sección 1.3.1.5 del «Informe Anual sobre la actividades de supervisión del BCE 2024».
Para más información, véanse la sección 1.2.4.1 del «Informe Anual sobre las actividades de supervisión del BCE 2023», y F. Elderson, «Sustainable finance: from “eureka!” to action», discurso pronunciado en el simposio Finance in Transition del Sustainable Finance Lab, Amsterdam, 4 de octubre de 2024.
Haciendo uso de su facultad para imponer sanciones a las entidades de crédito supervisadas, el BCE impuso: i) dos sanciones administrativas a Confédération Nationale du Crédit Mutuel por incumplir dos decisiones de supervisión relacionadas con modelos internos, ii) dos sanciones administrativas a Banque et Caisse d’Epargne de l’Etat debido a dos incumplimientos consistentes en haber presentado información trimestral inexacta en relación con los fondos propios y los requerimientos de fondos propios, y iii) una sanción administrativa a BNP Paribas Fortis SA/NV a causa de un incumplimiento consistente en haber presentado trimestralmente, sobre la base de su situación consolidada, información inexacta sobre sus requerimientos de fondos propios y activos ponderados por riesgo de crédito y riesgo de dilución de exposiciones de factoring.
Reglamento (UE) 2024/1623 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 31 de mayo de 2024, por el que se modifica el Reglamento (UE) n.° 575/2013 en lo que respecta a los requisitos para el riesgo de crédito, el riesgo de ajuste de valoración del crédito, el riesgo operativo, el riesgo de mercado y el suelo de los activos ponderados por riesgo (DO L, 2024/1623 de 19.6.2024).
Directiva (UE) 2024/1619 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 31 de mayo de 2024, por la que se modifica la Directiva 2013/36/UE en lo referente a las facultades de supervisión, las sanciones, las sucursales de terceros países y los riesgos ambientales, sociales y de gobernanza (DO L, 2024/1619 de 19.6.2024).
Reglamento (UE) 2023/1114 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 31 de mayo de 2023, relativo a los mercados de criptoactivos y por el que se modifican los Reglamentos (UE) nº 1093/2010 y (UE) nº 1095/2010, y las Directivas 2013/36/UE y (UE) 2019/1937 (DO L 150 de 9.6.2023, p. 40).
Véanse, por ejemplo, M. Draghi, «The future of European competitiveness», septiembre de 2024, elaborado a petición de la Comisión Europea, y E. Letta, «Much more than a market», abril de 2024, elaborado a petición del Consejo Europeo.
Véanse, por ejemplo, «Financial Integration and Structure in the Euro Area», ECB Committee on Financial Integration, BCE, junio de 2024; «Financial Stability Review», BCE, noviembre de 2024; C. Lagarde, «Seguir el dinero: canalizar el ahorro hacia la inversión y la innovación en Europa», discurso pronunciado en el 34.º Congreso Europeo de Banca: «Out of the Comfort Zone: Europe and the New World Order», Frankfurt am Main, 22 de noviembre de 2024; L. de Guindos, «Bridging the gap: reviving the euro area’s productivity growth through innovation, investment and integration», discurso pronunciado en el Latvijas Banka and SUERF Economic Conference 2024, Riga, 2 de octubre de 2024; y P. Cipollone, «Towards a digital capital markets union», discurso pronunciado en el simposio del Bundesbank «The Future of Payments», Frankfurt am Main, 7 de octubre de 2024.
Véase Eurosystem response to EU Commission’s consultation on macroprudential policies for non-bank financial intermediation (NBFI), FSC high-level task force on NBFI, noviembre de 2024. El BCE participó también en la respuesta de la JERS a la misma consulta.
Véanse «Liquidity Preparedness for Margin and Collateral Calls: Final report», Financial Stability Board, 10 de diciembre de 2024, y «Leverage in Non-bank Financial Intermediation: Consultation report», Financial Stability Board, 18 de diciembre de 2024.
Los proveedores de servicios de pago distintos de los bancos incluyen a las entidades de pago, según se definen en el artículo 4, apartado 4, de la Directiva sobre servicios de pago de la UE, y a las entidades de dinero electrónico, según se definen en el artículo 2, apartado 1, de la Directiva sobre dinero electrónico.
Reglamento (UE) 2024/886 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 13 de marzo de 2024, por el que se modifican los Reglamentos (UE) n.º 260/2012 y (UE) 2021/1230, y las Directivas 98/26/CE y (UE) 2015/2366 en lo que respecta a las transferencias inmediatas en euros (DO L 2024/886 de 19.3.2024).
Directiva 98/26/CE del Parlamento Europeo y del Consejo, de 19 de mayo de 1998, sobre la firmeza de la liquidación en los sistemas de pagos y de liquidación de valores (DO L 166 de 11.6.1998, p. 45).
Decisión (UE) 2025/222 del Banco Central Europeo, de 27 de enero de 2025, sobre el acceso de los proveedores de servicios de pago no pertenecientes al sector bancario a los sistemas de pago gestionados por los bancos centrales del Eurosistema y a las cuentas de dichos bancos (BCE/2025/2) (DO L 2025/222 de 6.2.2025).
Orientación (UE) 2022/912 del Banco Central Europeo de 24 de febrero de 2022 sobre el sistema automatizado transeuropeo de transferencia urgente para la liquidación bruta en tiempo real de nueva generación (TARGET) y por la que se deroga la Orientación BCE/2012/27 (BCE/2022/8).
Véase también la página web del BCE sobre el trabajo exploratorio del BCE sobre nuevas tecnologías para la liquidación mayorista en dinero de banco central.
Véase P. Cipollone, «Towards a digital capital markets union», discurso pronunciado en el Bundesbank Symposium on the Future of Payments, Frankfurt am Main, 7 de octubre de 2024.
Para más información, véanse «Preliminary methodology for calibrating holding limits», presentación realizada en la 14.ª sesión técnica sobre el euro digital organizada por el ERPB, BCE, Frankfurt am Main, 10 de diciembre de 2024; «Update on workstream on the methodology for the calibration of holding limits», presentación realizada en la 11.ª sesión técnica sobre el euro digital organizada por el ERPB, BCE, Frankfurt am Main, 11 de abril de 2024; «Summary of inputs on the methodology for calibrating holding limits», presentación realizada en la 12.ª sesión técnica sobre el euro digital organizada por el ERPB, BCE, Frankfurt am Main, 16 de julio de 2024, y «ERPB – Annex to preliminary methodology for holding limit calibration», BCE, Frankfurt am Main, 10 de diciembre de 2024.
Reglamento del Banco Central Europeo (UE) n.º 795/2014, de 3 de julio de 2014, sobre los requisitos de vigilancia de los sistemas de pago de importancia sistémica (BCE/2014/28) (DO L 217 de 23.7.2014, p.16).
Reglamento (UE) 2023/1114 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 31 de mayo de 2023, relativo a los mercados de criptoactivos y por el que se modifican los Reglamentos (UE) n.º 1093/2010 y (UE) n.º 1095/2010, y las Directivas 2013/36/UE y (UE) 2019/1937 (DO L 150 de 9.6.2023, p. 40).
Reglamento (UE) 2022/2554 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 14 de diciembre de 2022 sobre la resiliencia operativa digital del sector financiero y por el que se modifican los Reglamentos (CE) n.º 1060/2009, (UE) n.º 648/2012, (UE) n.º 600/2014, (UE) n.º 909/2014 y (UE) 2016/1011 (DO L 333 de 27.12.2022, p. 1).
Para más información, véase «Adopting TIBER-EU will help fulfil DORA requirements», BCE, septiembre de 2024.
Reglamento (UE) n.º 909/2014 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 23 de julio de 2014, sobre la mejora de la liquidación de valores en la Unión Europea y los depositarios centrales de valores y por el que se modifican las Directivas 98/26/CE y 2014/65/UE y el Reglamento (UE) n.º 236/2012 (DO L 257 de 28.8.2014, p. 1).
Reglamento (UE) 2022/858 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 30 de mayo de 2022 sobre un régimen piloto de infraestructuras del mercado basadas en la tecnología de registro descentralizado y por el que se modifican los Reglamentos (UE) n.º 600/2014 y (UE) n.º 909/2014 y la Directiva 2014/65/UE (DO L 151 de 2.6.2022, p. 1).
Reglamento (UE) 2024/2987 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 27 de noviembre de 2024, por el que se modifican los Reglamentos (UE) n.º 648/2012, (UE) n.º 575/2013 y (UE) 2017/1131 por lo que respecta a las medidas para atenuar las exposiciones excesivas a entidades de contrapartida central de terceros países y para mejorar la eficiencia de los mercados de compensación de la Unión (DO L 2024/2987 de 4.12.2024).
Para más detalles sobre el marco, véase P. Cipollone, P. Lane e I. Schnabel, «Learning from crises: our new framework for euro liquidity lines», The ECB Blog, BCE, 29 de enero de 2024.
De conformidad con el artículo 141, apartado 2, del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea (DO C 326 de 26.10.2012), p. 47; los artículos 17, 21.2, 43.1 y 46.1 de los Estatutos del SEBC, y el artículo 9 del Reglamento (CE) n.º 332/2002 del Consejo, de 18 de febrero de 2002, por el que se establece un mecanismo de ayuda financiera a medio plazo a las balanzas de pagos de los Estados miembros (DO L 53 de 23.2.2002, p. 1).
De conformidad con el artículo 122, apartado 2, y el artículo 132, apartado 1, del Tratado de Funcionamiento de la Unión Europea; los artículos 17 y 21 de los Estatutos del SEBC, y el artículo 8 del Reglamento (UE) n.º 407/2010 del Consejo, de 11 de mayo de 2010, por el que se establece un mecanismo europeo de estabilización financiera (DO L 118 de 12.5.2010, p. 1).
De conformidad con los artículos 17 y 21 de los Estatutos del SEBC en conjunción con el artículo 10 del Reglamento (UE) n.º 2020/672 del Consejo, de 19 de mayo de 2020, relativo a la creación de un instrumento europeo de apoyo temporal para atenuar los riesgos de desempleo en una emergencia (SURE) a raíz del brote de COVID-19 (DO L 159 de 20.5.2020, p. 1).
De conformidad con los artículos 17 y 21 de los Estatutos del SEBC en conjunción con el Reglamento (UE) n.º 2021/241 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 12 de febrero de 2021, por el que se establece el Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (DO L 57 de 18.2.2021, p. 17).
De conformidad con los artículos 17 y 21 de los Estatutos del SEBC en conjunción con el Reglamento (UE) 2024/792 del Parlamento Europeo y del Consejo, de 29 de febrero de 2024, por el que se establece el Mecanismo para Ucrania (DO L 2024/792 de 29.2.2024).
De conformidad con los artículos 17 y 21 de los Estatutos del SEBC en conjunción con la Decisión del Consejo (UE) 2024/1144, de 12 de abril de 2024, por la que se concede una ayuda macrofinanciera a corto plazo a la República Árabe de Egipto (DO L 2024/1144 de 15.4.2024).
De conformidad con los artículos 17 y 21 de los Estatutos del SEBC en conjunción con el artículo 3, apartado 5, del Acuerdo Marco de la FEEF.
De conformidad con los artículos 17 y 21 de los Estatutos del SEBC en conjunción con el artículo 5.12.1 de las Condiciones Generales para los Acuerdos sobre Líneas de Asistencia Financiera del MEDE.
En el contexto del acuerdo de préstamo suscrito entre los Estados miembros cuya moneda es el euro (distintos de Alemania y Grecia) y el Kreditanstalt für Wiederaufbau (actuando en aras del interés público, sujeto a las instrucciones de la República Federal de Alemania y con su aval), como prestamistas, y la República Helénica como prestatario y el Bank of Greece como agente del prestatario, y en virtud de lo previsto en los artículos 17 y 21.2 de los Estatutos del SEBC y el artículo 2 de la Decisión del Banco Central Europeo, de 10 de mayo de 2010, relativa a la gestión de los préstamos bilaterales mancomunados a la República Helénica y por la que se modifica la Decisión BCE/2007/7 (BCE/2010/4) (DO L 119 de 13.5.2010, p. 24).
De conformidad con el Memorando de Entendimiento del Servicio de Emisión de la Unión Europea.
Orientación (UE) 2021/827 del Banco Central Europeo, de 29 de abril de 2021, por la que se modifica la Orientación BCE/2013/24 sobre las exigencias de información estadística del Banco Central Europeo en materia de cuentas financieras trimestrales (BCE/2021/20) (DO L 184 de 25.5.2021, p. 4).
Orientación (UE) 2022/747 del Banco Central Europeo, de 5 de mayo de 2022, por la que se modifica la Orientación BCE/2011/23 sobre las exigencias de información estadística del Banco Central Europeo en materia de estadísticas exteriores (BCE/2022/23) (DO L 137 de 16.5.2022, p. 177).
Las EFE tienen una relevancia significativa en un grupo específico de países.
Para más información sobre los datos, las alternativas metodológicas y las limitaciones todavía existentes, véase «Climate change-related statistical indicators», Statistics Paper Series, n.º 48, BCE, abril de 2024.
Véase el recuadro titulado «La acusada contracción de los flujos financieros de la zona del euro con el exterior en 2022: análisis basado en un mayor detalle de las estadísticas de balanza de pagos», Boletín Económico, número 4, BCE, 2023.
Véase M. Anacki, A. Aragonés, G. Calussi y H. Olsson, «Exploring the investment funds households own», The ECB Data Blog, BCE, 17 de septiembre de 2024.
La lista de los países de contrapartida incluye actualmente, por ejemplo, a todos los países del G-20 y de la UE que no pertenecen a la zona del euro. En particular, ahora se dispone de información de más economías avanzadas (Australia, Noruega y Corea del Sur) y economías emergentes (Argentina, Indonesia, México, Arabia Saudí, Sudáfrica y Turquía).
Véase el recuadro titulado «El impacto de las entidades con fines especiales en los vínculos financieros transfronterizos de la zona del euro», Boletín Económico, número 7, BCE, 2024.
Véase, por ejemplo, J. Ashwin et al., «Nowcasting euro area GDP with news sentiment: a tale of two crises», Journal of Applied Econometrics, vol. 39, n.º 5, agosto de 2024, pp. 887-905.
Véase L. Leek, S. Bischl y M. Freier «Introducing Textual Measures of Central Policy-Linkages Using ChatGPT», SocArXiv Papers, 78wnp, Center for Open Science, 2024.
Véanse las sentencias del Tribunal General en los asuntos T-182/22, T-186/22, T-187/22, T-188/22, T-189/22, T-190/22 y T-191/22.
Reglamento (UE) n.º 1024/2013 del Consejo, de 15 de octubre de 2013, que encomienda al Banco Central Europeo tareas específicas respecto de políticas relacionadas con la supervisión prudencial de las entidades de crédito (DO L 287 de 29.10.2013, p. 63).
Estas son las autoridades responsables de supervisar el cumplimiento por parte de las entidades de crédito de las obligaciones en virtud de la Directiva propuesta por un lado, y las autoridades responsables de la supervisión prudencial de las entidades de crédito, incluido el BCE, por otro.
Véanse «Preserving people’s freedom to use a public means of payment: insights into the digital euro preparation phase», intervención de Piero Cipollone, miembro del Comité Ejecutivo del BCE, en la reunión de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios del Parlamento Europeo celebrada en Bruselas el 14 de febrero de 2024, y «From dependency to autonomy: the role of a digital euro in the European payment landscape», intervención de Piero Cipollone, miembro del Comité Ejecutivo del BCE, en la reunión de la Comisión de Asuntos Económicos y Monetarios celebrada en Bruselas el 23 de septiembre de 2024.
El BCE tiene la condición de observador en el FMI y cuenta con un representante permanente en la sede del Fondo en Washington D.C. El observador del BCE participa en determinadas reuniones del Directorio Ejecutivo del FMI.
Tras el establecimiento de un VTA por parte de Luxemburgo en 2022, el número total de VTA del Eurosistema ascendió a 19 (18 de Estados miembros de la UE y uno del BCE).
La publicación de los resultados de la prueba de resistencia de 2024 de forma cualitativa formará parte de la información financiera relacionada con el clima del Eurosistema en 2025.
Véase «NGFS publishes latest long-term climate macro-financial scenarios for climate risks assessment», nota de prensa, Central Banks and Supervisors Network for Greening the Financial System, 5 de noviembre de 2024.
Véase el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente, «Informe sobre la Brecha de Emisiones 2024», para más información sobre la estimación de que, con arreglo a las políticas vigentes, el calentamiento global aumentará en 2,6 ºC-2,8 ºC este siglo con respecto a los niveles preindustriales.
Véanse el plan de actuación del BCE de 2021 para incluir consideraciones climáticas en la política monetaria, la estrategia de supervisión bancaria de 2022-2024 y la agenda climática de 2022.
Para más información sobre los criterios mínimos, véase el recuadro titulado «Criterios mínimos comunes para incorporar los riesgos climáticos en los sistemas internos de evaluación del crédito del Eurosistema», Boletín Económico, número 6, BCE, 2022.